《Melodía del Amor》

Capítulo 15 - Amigos

Ritz se considera un buen amigo, no es que quiera sonar pretencioso ni nada parecido. Pero le gusta pensar que siempre ha estado ahí para sus amigos y él es feliz con eso.

Eso es lo que quiere pensar. Pero mientras mira las cosas de su habitación no puede evitar sentir una punzada de tristeza. Se sienta en la cama y se pregunta cuándo fue la última vez pensó en sus sueños propios.

Sus amigos están prosperando en lo que aman y por alguna razón siente que se está quedando atrás.

Se frota los ojos con fuerza negándose a llorar, no es que envidie a sus amigos ni nada por el estilo, de hecho está muy feliz por ellos y se emociona al verlos en televisión pero él también quiere ser visto.

Pero gastó sus ahorros por ellos, no se los dijo porque sabía que se sentirían culpables y de todos modos sus oportunidades ya se fueron. Aún así está triste tomando la carta de aceptación al programa en el que quería trabajar y al cual no pudo ir.

Ritz no pudo evitar llorar mientras apretaba la carta en su manos y terminaba botando aquel papel a la basura.

Incluso si volviera al pasado hubiera ayudado a sus amigos.

Se lava el rostro y se tira a la cama, se siente muy fracasado y estúpido. Apoyando a su amor de infancia a ir por el chico que le gusta, apoyándolo y dejando sus sueños de lado por ellos.

Posiblemente alguien más racional lo hubiera llamado un completo estúpido y quizás lo era.

Ritz pensó que mañana sería un mejor día, por ahora se permitiría llorar.

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Veneer sentía que todo estaba saliendo como quería, recolectar con Floyd fue un poco incómodo al principio pero Ramón siempre estaba ahí para aliviar el ambiente.

Aunque sus horarios eran un poco apretados siempre había tiempo. Han pasado un par de meses desde eso y estaban felices.

Toco la puerta suavemente y Floyd lo recibió con una sonrisa.

— Llegaste temprano.

— Lo siento, simplemente quise pasar más tiempo. Oh, Ramón… ¿Vas a algún lado? — Ramon estaba sentado guardando algunas cosas en una pequeña mochila que se puso en la espalda.

Los miró con cuidado a ambos y asintió. Floyd miró a Veneer.

— Luces lindo hoy. — Ante aquello Veneer se sonrojó y Ramón pasó por su lado saliendo del departamento, no sin antes cerrar la puerta con fuerza.

— ¿Sucede algo? — preguntó con duda al ver la actitud de Ramón a lo que Floyd dio un ligero suspiro.

— No lo sé, ha estado actuando así últimamente y no me dice que pasa.

— ¿A dónde va?

— No lo sé, dice que va al parque. — Veneer lucía preocupado y pensativo.

— ¿No crees que deberíamos seguirlo? — Floyd dudo pero eso resolvería el problema, dudo pero asintió.

Ambos salieron y siguieron a Ramón a una distancia prudente. El sencillamente no fue al parque como dijo que haría, hizo una pequeña parada en una pastelería y compró un pequeño pastel. Uno muy pequeño que guardó en su mochila.

Floyd estaba confundido porque no sabía de donde Ramon sacó dinero.

Confundidos lo siguieron hasta que él llegó a una cafetería, fue extraño porque lo vieron desde el otro lado de la calle.