Re Zero Arco 8: Vincent Vollachia

Capítulo 34: No te perdonaré hasta que me lo digas

------Había llegado la mañana de salida hacia la Capital Imperial de Lupgana.

A la entrada de la Ciudad Fortificada de Garkla, los refugiados de la Capital Imperial y sus alrededores continuaron llegando en manadas durante toda la mañana, aumentando hasta un número que ni siquiera las ciudades que podían albergar a la mayor cantidad de personas podrían manejar.

Todos estaban ocupados lidiando y respondiendo a la situación, pero desafortunadamente, no era un asunto sobre el cual alguien que no estuviera afiliado al Imperio pudiera hacer o decir algo.

Por eso, es necesario que las tareas que se le confíen a uno se cumplan adecuadamente.

Si no es el caso------

???: [Aunque realmente me duele mucho... no puedo ser de ninguna ayuda para ti.]

Los pequeños hombros del peli rosado se arrugaron con frustración, y como si sintiera el mismo dolor que él, Emilia apretó los puños.

Emilia entendía muy bien el dolor de no poder hacer lo que uno deseaba por no ser lo suficientemente fuerte.

Además, este chico------Schult, era un niño pequeño. Emilia tampoco había podido estar allí para sus seres queridos cuando era niña.

Así que era dolorosamente consciente de los sentimientos de Schult.

Schult: [Emily-sama, se lo ruego. Por favor, salve a Priscilla-sama, Al-sama y Heinkel-sama.]

Con los ojos redondos y llenos de lágrimas, Schult le pidió ayuda a Emilia.

Se necesitó mucho coraje para que un niño tan pequeño contuviera las lágrimas y suplicara a alguien que ayudara a las personas que amaba.

Era algo que Emilia no podría haber hecho. Por eso, respetaba la valentía de Schult.

Por eso, Emilia le traería a Schult un final diferente al de ella en aquel entonces.

Emilia: [Sí, déjamelo a mí. Aprecio que me pidas que haga esto.]

Schult: [Emily-sama...]

Emilia: [Porque con esto, no importa lo que Priscilla diga para tratar de mantenerme alejada, ¡puedo responderle que lo pediste con un por favor correctamente!]

Con un golpe en su propio pecho, Emilia tranquilizó a Schult con esas palabras.

Cuando Schult escuchó esto, sus ojos redondos se abrieron aún más y su expresión rápidamente se iluminó.

Schult: [¡Sí, señora! Priscilla-sama no está siendo honesta consigo misma, ¡así que espero que le respondas!]

La voz de Schult recuperó algo de su energía, aunque era algo hueca, y Emilia, tratando de igualar las palabras de Schult, asintió firmemente con un "¡Sí!"

???: [Em es confiable. Pero es peligroso. Es mejor si Bae te cuida.]

???: [...No necesitas decir nada, esa ya era la intención, supongo.]

Mientras Emilia y Schult hablaban, dos niñas intercambiaron palabras.

Beatrice, la escolta de Emilia, y Utakata, la escolta de Schult, observaron con satisfacción el intercambio de Emilia y Schult, luego intercambiaron miradas.

Beatrice: [Probablemente aquí tampoco sea totalmente seguro, de hecho. Sería buena idea permanecer escondida aquí con la cabeza entre las manos junto a ese chico Schult, así no te verán, supongo.]

Utakata: [Cuando llegue el momento, Uu protegerá a Shuu y peleará, y Bae también hará lo mejor que pueda con Suu y los demás.]

Beatrice: [...Vaya, qué dicho más alentador, de hecho.]