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Lilia por suerte había encontrado cubiertos y utensilios de cocina de plástico. Así que mientras ella preparaba la comida de verdad, los niños jugaban a ser cheff italianos haciendo una pizza de plastilina.

De todos modos Lilia estaba cocinando la verdadera pizza, trabaja en Fazzbear. La pizza es lo mejor de aquí.

Sundrop se acercó a la mujer, tocando su hombro y por lo silencioso que fue el sol ella brinco del susto y casi le pega con el rodillo para la masa de la pizza en la cara al animatrónico.

-Cuidado.

Le dijo este, habia esquivado el golpe. Lilia suspiro calmandose.

-No te escuché, me asustaste.

Volviendo a su trabajo de hacer la ultima bandeja de pizza para ese ejército de niños..pero aun así hablo nuevamente.

-Lo siento.

Y se disculpo, Sundrop sonrió como acostumbra.

-¡No te preocupes, Sunshine!

Ella alzó su vista.

-¿Por qué me llamas así?

-Acaso no puedo? Es malo? ¿Te he ofendido?

Vaya, la oratoria del animatronico era la de un humano..Solo que era un humano más colorido y de metal.

-No, solamente no espere eso.

Lilia rio, sonriéndole al Sol.

-Pero si estamos poniéndonos apodos, te llamaré Sunny.

El robot asintió emocionado, luego agachó más su cabeza para acercarse a la de Lilia.

-¿Puedo ayudarte con la pizza?

Y ella sin inmutarse asintió. Aunque era ciertamente extraño. Pronto puso a trabajar a Sundrop, cocinar era algo nuevo para el. Ya que alimentaba a los niños con lo que realizaban los cocineros del pizzaplex, pero esta vez..el podría hacerlo con la ayuda de su nueva ayudante, estaba feliz. Una tercera persona era lo que le faltaba a Sun, quien solo convivía con los niños y con su hermano, Moondrop.

•••

-Sunny, ayudame a servir las pizzas.

Lilia cortaba con precisión cada trozo, mientras Sundrop observaba y analizaba que los cortes quedarán perfectamente simetricos. Y como si fuera un camarero con 20 años de experiencia llevaba las bandejas con facilidad, pero es que no era solo por su fuerza de animatronico..Era porque se llevó 4 bandejas, dos en sus brazos y las otras dos en las manos para colocarlas en las mesas y servir a los niños.

Lilia parpadeo varias veces, esas pizzas estaban recién hechas y si alguien normal las hubiera llevado sin cubrirse las manos, se hubiera quemado como el demonio. Pero ese sol las llevo como si nada.

Pronto el de rayos volvió hacia donde Lilia.

-¿Falta alguna pizza?

-Uh, no. Pero dejé algo para nosotros.

Mostró una bandeja muy pequeña, con solamente 6 pizzas.

-Aunque olvide que no puedes comer, eres un animatrónico.

Recordó, pero ante su comentario Sundrop cruzo los brazos. Ofendido.

-Eso fue ofensivo, Sunshine.

Lilia rio.

-Pero no es verdad?

Sundrop negó. Eso nunca se lo espero la mujer.

-No puedo ingerir comida ya que mi sistema no tiene digestión de alimentos, pero si tengo papilas gustativas.

Dulces Sueños Donde viven las historias. Descúbrelo ahora