"Los sueños cambian. Otras cosas toman prioridad. Mi lugar no esta en el ayer o en el mañana sino aquí mismo y ahora"
Siguiendo las indicaciones de Ginebra, Arthur había terminado encontrando la casa de Ordo el botánico, toda aquella situación le parecía demasiado extraña, incluso tenía el presentimiento de que se estaba perdiendo de algo importante, pero su loco sueño de convertirse en un caballero lo hacía tomar esta clase de misiones ayudando a las personas.
-Aquí esta lo que pidió- le dice un muchacho de cabello castaño y ojos dorados, parecía muy estudioso, tanto que había podido replicar la receta con solo leer las notas de su abuelo, algo que parecía recordarle a otra persona pero no estaba seguro a quien- Lamento la demora, hemos tenido muchos pacientes últimamente.
-Gracias, sobre todo considerando que tu abuelo no está muy bien de salud, pero fuiste muy hábil ayudándolo- le dice Arthur- ¿Cuál es tu nombre?
-Nasiens, me llamo Nasiens y tú... no pareces un aprendiz de caballero ¿verdad?
-No, mi nombre es Arthur y solo soy uno de los mozos del palacio.
-En serio- dice Nasiens siguiendo con su curiosidad- Mi abuelo dice que te veías muy elegante para ser un simple mozo, incluso dice que le recuerdas un poco al difunto rey Uther, pensó que podrías ser un familiar lejano.
-No, debe ser una rara coincidencia, en fin debo entregar esto, gracias- dice retirándose.
***
Mientras tanto en otro lugar del reino.
-Tristán creo que estamos perdidos- exclama el pequeño Percival mientras recorren los caminos en círculos.
-No, no lo estamos el mapa que me tome prestado no puede estar equivocado.
-Dirás el que le robaste a Gilthunder con ayuda de su hijo.
-Chion últimamente esta muy apegado a mi, no sabia que estuviera interesado en ser un caballero sagrado y cree que juntándose conmigo podremos algún día ser parte de la guardia de Liones.
-Mi abuelo...- exclama el pequeño- No deja de decirme que me aleje de todo esto, que pronto habrá muchos conflictos y que solo debo participar si tengo algo que proteger, una causa que valga la pena.
-Suena razonable- ambos jóvenes se detienen al escuchar pasos acercarse.
Tristán toma su espada y apunta en dirección hacia un arbusto de donde emerge un pequeño zorro color rosado.
-Me asusto- dice Percival.
-¿Qué clase de bebe se asusta con un zorrito?- exclama una voz femenina.
-¿Quién eres?- dice Tristán- ¿Y tú de donde saliste?- dice al notar que ahora un chico rubio está parado frente a ellos.
-Tristan, creerás que estoy loco, pero creo que ese zorro se convirtió en él- explica Percival.
-Veo que esta vez hay muchos intrusos molestos en este bosque- habla Lancelot sintiendo una extraña sensación de calidez por el peculiar grupo.
***
Arthur había llegado hasta donde se encontraba Ginebra, la niña parecía agotada y lo veía con cierto temor.
-¿Cómo está tu padre?- le pregunta.
-Eh... bien- dice tomando la medicina- Muchas gracias y disculpa por las molestias.
-¿Tu padre no está enfermo verdad?- le dice serio.
-¿De qué estás hablando?
-No sé lo que pretendes hacer, ni tengo idea de que quieres lograr... pero te juro que la próxima vez que te entrometas en mi camino, te matare- termina mientras Ginebra logra ver como las pupilas del joven se tornan oscuras por unos segundos, antes de volver a montar en su caballo y seguir rumbo al castillo. Algo que la deja sumamente inquieta de que las cosas estaban lejos de terminar.
***
Lancelot había acompañado a los otros jóvenes fuera del bosque, Tristán y Percival emprendieron su camino de vuelta al castillo de Liones, mientras que Gawain esperaba en una roca a que el rubio pudiera dar con el paradero de su maestra, comenzaba a anochecer cuando finalmente Merlín aparece.
-Maestra- dice la adolescente yendo en su encuentro- ¿Está bien? ¿Lancelot la rescató?
-¿Lancelot?- dice curiosa- No se de quien me hablas, solo seguí el borde del bosque y algo me dijo que te encontraría aquí.
-Es raro- exclama Gawain- Hoy pasaron cosas muy extrañas, conocí a Lancelot y a otros 2 chicos, pero sentía como si ya nos conociéramos.
-¿Gawain?- pregunta Merlín desanimada- ¿Podrías mantener este viaje en secreto de tu padre?
-Si claro...- dice dudosa.
-Gracias y promete que no volveremos a tocar este tema- los pensamientos de la pelinegra seguían siendo un revoltijo, tanto que su cabeza comenzaba a dolerle y un hueco en su estomago comenzaba a crecer.
***
Esa misma noche en Liones, un jinete encapuchado se acerca al castillo hasta llegar a una de las torres mas apartadas, arriba la princesa Elizabeth le hace una señal y desmonta su caballo para entrar por una grieta entre la pared.
-¡Meliodas!- exclama la albina mientras salta a sus brazos.
-Elizabeth, debes huir conmigo- pide en tono de súplica sin darle tiempo de seguir con su reunión.
-¿De qué estás hablando?
-Lo escuche todo, mi padre quiere atacar Liones, la familia Godwing quiere atacar el reino de mi padre, toda Britannia será arrastrada en una tonta guerra, debemos irnos.
-No... Lo que dices no puede ser cierto...
-Lo es, es una locura y además me enteré de algo, el rey Uther parece ser que tuvo un hijo a escondidas, un heredero que puede reclamar el trono, mi padre enviará asesinos por todo el reino a buscarlo.
Ambos príncipes hablaban a escondidas en uno de los pasillos, pero sin que se dieran cuenta, Arthur escuchaba esa conversación desde detrás de una columna, él sospechaba desde hace un tiempo sobre esa relación prohibida, el mismo rey Bartra lo sospechaba, pero no tenía pruebas suficientes y ahora sin querer se había enterado de algo aún más siniestro.
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Érase una vez... Nosotros
Fanfiction"No importa cuantas veces renazcas, no importa cuantas vidas diferentes tengas, aquellas almas que están destinadas a encontrarse lo harán sin importar las fronteras del tiempo o el espacio" ¿Podrá esta vez el destino de Arthur Pendragon ser diferen...