Ikigai || [SNV]

XXV. Bonhomía.

La mañana llegó con un fuerte aroma a petricor que se mezclaba parsimonioso con la escencia del café de Shang, la cual subía por las escaleras y hacía cosquillas en el olfato de Fengxian obligándolo a abrir los ojos antes de lo planeado.

Podía ver por la ventana el sol surgiendo entre las nubes negras que cubrían el horizonte, y todavía las plantas del balcón goteaban algo de rocío. La lluvia había llegado a su fin hace poco, y tanto el aroma como el cielo le decían que pronto volvería a arrasar con la ciudad, pero aún así, Bu se permitió bajar de la cama y sentarse en la cornisa disfrutando de la refrescante humedad de la mañana.

Pasaron varios minutos antes de que el asiático se dignara a revisar su celular, encontrando los buenos días de Narciso, de hace un par de horas, los cuales se limitó a responder con un emoji de corazón, para luego entrar al chat de Thor.

El anuncio de "en línea" le provocó una pequeña sonrisa que le fue difícil camuflar.

"Buenos días, ave madrugadora."

"Al que madruga Dios lo ayuda."
"Pero no me siento ayudado, me siento desvelado."

"XD."
"Duerme más."

"No puedo, Loki no aparece y el viejo está furioso."

"Tsk."
"Mala suerte."
"¿Crees que se haya escapado?"

"¿La verdad?"
"Debe estar en la plaza haciendo ejercicio."
"A veces se pone raro cuando no le salen las cosas como quiere."

"Entonces no es mal momento para escribirte."
":]."
"Papá dice que puedes venir hoy para terminar la tarea."

"¡Yay!"
"Saqué premio."
"XD."

"Entendí esa referencia."
"X'D."

"Bueno, igual tengo que ir a buscar a Loki."
":[."
"Te escribiré cuando esté por salir."
"¿Quieres que lleve algo?"

"Ya te dije que no hace falta."

"Y ya te dije que no me gusta visitar con las manos vacías."
"Elige o elijo yo."

"Aiñ."
"Elige lo que quieras."
"A caballo regalado no se le mira el diente."

"Amanecimos proverbiosos hoy."

"Es que el clima está bonito, me pone reflexivo."

"Es verdad, me gusta este clima."
"Por cierto."

Repentinamente los mensajes de Thor se detuvieron, LüBu miró la pantalla confuso, sin embargo supuso que algo más había sucedido en su hogar, por lo que bajó de la cornisa a su habitación nuevamente y se despojó del pijama para cambiarlo por ropa de diario. Cuando al fin estuvo listo y se dispuso a bajar las escaleras, notó que un nuevo mensaje había llegado.

"El viejo me dio permiso de quedarme contigo si caía otra vez una tormenta como la de anoche."
"Espero que no sea una molestia."

"Perfecto."
"Siéntete como en casa. :'D"

"Gracias. ☆"