Sweet Temptation

Capítulo 36.

La tensión en el ambiente no podía pasar desapercibida. Sonic tuvo que poner todo en orden inmediatamente para no crear un caos. En la sala, por supuesto, se encontraban una pareja de guardias siempre encargados de mantener todo tranquilo y claro, fueron partícipes de la confesión tan inesperada y para nada agradable de la ardilla. La primera reacción de Amy y suya fueron colocarse frente a ella, como una especie de protección. Fue lo correcto ya que, ni tarde ni perezoso uno de ellos estaba dispuesto a caminar violentamente hacia la chica, siendo detenido por él mismo con un porte amenazante, pero sin ganas de llegar más lejos. Fue suficiente un ''No te acerques'' y el jalón de su acompañante para que retrocediera y entre insultos salieran disparados del lugar, sin importarles ellos.

Asumía que irían a comentarle el alarmante asunto al líder de todo el lugar. No podía culparlos, y tenía la necesidad de correr tras ellos para ser el primero en explicar la situación y ayudar en todo lo que pudiera, sin embargo, desconocía gran parte de los detalles.

Caminó firmemente a la ardilla que se encontraba todavía perdida en el suelo del lugar, siendo únicamente protegida por una muy tensa eriza rosada. Se arrodilló frente a ella y tomó entre sus manos el collar que antes se había arrancado del cuello, analizándolo atentamente. Parecía un collar de oro, cuadrado pero lo suficientemente pequeño para no llamar la atención. Lo que sobresalía era una pequeña joya azul en el centro, brillante que estaba hundida en su lugar. Asumía que era una especie de botón o alerta que hacía visible su posición.

''Mi padre...él me dio a entender que debía recurrir a eso. Él me dijo que debía actuar, que era la única forma'' explicó, presionada, extremadamente arrepentida de no haber confiado en sus amigos, en Sonic. ''Yo creí...''

''Después de todo, sigue haciendo las cosas más difíciles, incluso dentro de una celda'' fue un comentario amargo, cruel y lleno de remordimiento que salió de la boca de Silver. Nadie se atrevió a negarlo.

Sonic suspiró y acarició la mejilla enrojecida de la ardilla. Una vez incorporado, empezó a asegurarse de las condiciones de sus amigos, lo suficientemente libres y fuertes para al menos correr y pelear si era necesario. ''Tenemos que ir a explicar la situación. Esto definitivamente no hará más fácil que confíen en nosotros, debemos ayudarlos en lo que podamos. Esta gente no tiene la culpa, tampoco los solados que están a punto de llega, solo siguen ordenes ciegas. Tenemos que ser inteligentes, todo puede salir bien con la suficiente ayuda''

No tuvieron nada que discutir, incluso si algunos quisieran, lo cierto era que, no tenían tiempo. Todos se incorporaron como pudieron y dieron marcha directamente a lo que creyeron era la sala principal. No fue fácil, era un lugar oscuro, casi como un laberinto, y a la gente de ahí pareció importarles muy poco que ellos estuvieran sueltos por el lugar, parecían todos estar reunidos, ya que no había absolutamente nadie a la vista. Después de unos minutos llegaron al lugar más grande, luminoso y aunque no era tan avanzado, parecía muchísimo más decente que las celdas anteriores. Dentro estaba reunido un grupo de personas, rodeando a la misma persona que antes había prometido ayudar, la cual no se veía tan feliz. Sintió sus ojos mirarlo, y tragó saliva.

''Debes entender que tu presencia no es bienvenida. La de ninguno de ustedes'' su voz era tan fría, llena de un rencor oculto tras un tono firme.

''Podemos ayudarlos. No tenemos que recurrir a algo extremista, podemos buscar un plan menos invasivo'' explicó, avanzando unos pasos, siendo detenido por dos personas, sin lastimarlo.

''Eso hicimos. Pero parece que les dimos demasiada confianza, sobre todo a ella'' miró con repudio a la ardilla, la cual tembló y bajó la mirada, apretando los dientes. ''Si las cosas hubieran sido como planeamos desde un inicio...''