"..."Era obvio que el comportamiento de la Marquesa era nuevo para todos. Incluso yo pocas veces fui capaz de verla tan enojada.
La sonrisa que mi madre mostraba no se sentía tan amenazante, podría decirse que trataba de mantener la calma y eso fue de agrado para la mayoría de los sirvientes.
"Lo mejor será discutir esto en privado, Polo encárgate de llevar a los niños al comedor, iremos en unos minutos."
Dijo luego de observar a mis hermanos algo incómodos.
Con cierta duda en obedecer el mayordomo se inclino y poco después el lugar quedó casi vacío.
El marques aún seguía de pie cerca de las doncellas y antes de que pudiera decir algo mi madre se interpuso.
"Cariño, puedo ocuparme de esto yo sola, por favor llévate a Dalia contigo."
El pequeño cuerpo de alguien se acercó con temor hacia el hombre de aspecto elegante.
"..."
A comparación de Seshia se veía muy frágil y sus ojos parecían estar llenos de dolor.
Ser padre no era fácil, sin embargo debía estar a la altura.
El Marques se veía algo preocupado, no quería parecer ser alguien indulgente ante el maltrato, pero tampoco quería darle la contra a su esposa, mucho menos cuando se trata del primer día.
En su cabeza iban y venían castigos opcionales para las doncellas y el mayordomo por no cumplir bien sus tareas.
Justo cuando estaba por retirarse algo pareció llamar su atención y sin mucho esfuerzo logró identificar de que se trataba.
'El material de las prendas que seleccioné para mi hija incluía algunas joyas como adorno, ahora que lo veo ¿Dónde está el presupuesto que otorgué al mayordomo para su cuidado personal?'
A simple vista solo su esposa había sido tratada pero la niña seguía en un estado poco común, era su falta de atención la que había provocado este descuido y no sabía como disculparse.
"Tienes la autoridad de hacer lo que te plazca, solo no tardes mucho."
Resignado ante la situación, el Marqués se retiró del lugar esperando arreglar las cosas durante la cena.
Con un toque suave cargó a la pequeña entre sus brazos y se dirigió a la cocina.
Las doncellas pensaron que al no estar el Marqués presente podrían salvarse del castigo.
A simple vista la señora no parecía ser alguien severa y por ende intentaron calmar la situación.
"M-mi señora, por favor, no dejé que este pequeño descuido la ponga en un mal sitio frente a los demás."
"..."
"Somos incapaces de dañar a alguien de la familia."
El silencio de la dama parecía indicar que sus súplicas estaban funcionando, es por eso que una se atrevió a levantar la mirada, sin embargo.
"...!"
Lo que vio a continuación era el rostro de alguien enojado.
"Estoy pensando en que hacer con ustedes"
"...!"
"...!"
"Hace poco vi en los periódicos un caso muy parecido"
La mujer dio unos cuantos pasos hasta estar cerca para luego inclinarse y sacar algo brillante del bolsillo de una de ellas.
"Los nobles hacían burla del hombre que se atrevió a tocar una de sus joyas."

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REVENGE
Aléatoire"Ódiame si eso te hace sentir mejor." No importaba en lo mínimo. "Porque aún así me perteneces."