Victoria

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Veo como Checo carga a mi
sobrino Luke, el hace muecas raras
que para el son graciosas.

—Lo volviste a golpear—hablo
Victoria—ya hemos hablado
sobre esto max.
—Se fue con otro hombre—me
excusé—sé que no debí haber
actuado así con él, pero lo
merecía.
—Te estas contradiciendo.
—¡Checo!—grite su nombre
el se sobresalto asustado—amor, ve al patio y juega con Luke
—S-si—se levanto del suelo
cargando al niño y junto a sus
juguetes salieron al patio.
—No quiero que le vuelvas a
levantar la mano a Checo—
en el rostro de mi hermana se
mantenía su ceño fruncido— Tus casi dos metros me valen una mierda, Emilian. No quiero que vuelvas a golpear a Checo.
—¡Calla! —exclamé—, ¿Crees que solo porque tu lo dices lo hare? - solté una risa, carente de humor—no, el es mi esposo y si me es infiel tendré que castigarlo.
—:¿Te estas escuchando?—se levantó del sofá, parándose frente de mi—no quiero que lo vuelvas a golpear

No respondí y lo único que
hice fue levantarme del sofá,
salí de la casa acercándome a
Checo y a mi sobrino

—Dámelo—de los brazos de mi
esposo le arrebate a Luke,
quien al sentirme comenzó a
llorar—ya se van
—N-no, max—volví a entrar
otra vez a la casa.
—Ya comieron, ya conversamos, ahora se van— Luke fue a los brazos de su madre—adiós.
—Me despediré de Checo—camino hacia él, quien se mantenía con la mirada agachada—adiós cariño
—Vic... no te vayas.
— Lo lamento cariño. Me
tengo que ir, Max ya no te
lastimara y si lo hace cuando
vuelva yo lo hare pagar.

Checo asintió, Victoria tomo su bolso y
sin más salió de la casa.
La casa se quedo en silencio
checo no se movía de su lugar.
Me acerque a paso lento hacia
él.

—Ven amorcito—acaricie
su tersa mejilla, disfrutando
de la calidez que desprende—me gusta que uses estos pantalones—aprete su traseroen mis manos, provocando que el suelte un gemido de dolor—Haces que me ponga duro.
—No me hagas daño por
favor-sus ojos se mantenían
cerrados—Qui-quiero ir al
hospital.
—Qué te pasa?—pregunte
fastidiado. Aprete con mas
fuerza—Dime la puta verdad,
no querrás verme enojado a
estas horas.
—Quiero visitar a mi mama
por favor— susurro.
—¿Y porque me mientes sobre
el hospital?

No contesto, en cambio soltó
un sollozo

—Me estas lastimando— caminamos hasta el sofá donde lo solté bruscamente, empujándolo y haciendo que caiga sobre este.
—No iremos con tu madre—respondí.
—No la veo desde hace meses.
—¡Crees que aun no me he
olvidado de lo que hiciste
ayer?—me subo encima de
él, tomando su rostro en mis
manos—Saliste de casa sin
mi permiso, solo.... no, solo
no estuviste. Estabas con tu
amante.
-Fui a ver a Charles

Ver sus ojos rojos, llenos
de lagrimas hicieron que
tenga piedad. Hoy no lo
castigare, debe sentirse aun
mal por lo que pase ayer. Me
levante y tome mi billetera
junto a mi celular de la mesa.

—Voy a salir, no quiero que
salgas—me coloco mi chaqueta
guardando mis cosas en mis
bolsillos—:Escuchaste?
—S-si—contesto
—Si te portas bien, mañana
iremos a tu familia—me acerque besando su frente—nana ha salido, regresara en unos minutos.
—Adiós—asentí y caminé hacia
la puerta

No quería dañarlo más, se
supone que lo amo.Se supone
que es mi esposo. Su supone
que debo cuidarlo y protegerlo
pero termine haciendo todo lo
contrario.

ERES MIO SERGIO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora