MY NAME

Capítulo 12: Traidor traiciona traidor.

Lo más triste de la traición es que viene de las personas en quienes confiabas~

     Gangjae se giró hacia donde se encontraban ambos detectives y se agachó a la altura de Jiwoo, acercando su navaja a su rostro.

     — Escucha —la calló acercando cada vez más la navaja a su rostro—. Tú solo preocúpate por lo que te voy a hacer a ti. Será divertido, voy a jugar contigo toda la noche.

     Antes de que Do Gangjae pudiera reaccionar, Pildo le dio una patada en el brazo, haciendo que Gangjae se alejase de Jiwoo, pero los matones de Gangjae le dieron un par de golpes como respuesta.

     Yo miraba todo mientras estaba sentada a unos metros de allí, sosteniendo mi brazo ya que por el gran corte que Gangjae me había hecho ya no podía moverlo.

     — ¡Carajo!¡Que mierda! —se quejó Gangjae— ¡Quería matarte frente a Mujin Choi! —se acercó a Jiwoo y la tomó de las mejillas para acercarla a él— ¡Detective, detective, detective! Di tus ultimas palabras si quieres, te doy esa oportunidad.

     — Te juro que te mataré —respondió Oh Hyejin.

     Gangjae empezó a reír y le besó la frente.

     — Háganlo —les ordenó soltando a Jiwoo.

     Se acercó a mí y me levantó tomándome del brazo que no podía mover.

     — Tú irás con ellos —me dijo lanzándome dentro de la camioneta en la que Jiwoo y Pildo estaban esposados al techo—. Quizás así aprendas el significado de la palabra "Lealtad", con Mujin Choi te habrá funcionado eso, pero las cosas cambiarán a partir de ahora.

     Me esposó a una de las paredes de auto, mi brazo izquierdo estaba completamente inmovilizado gracias a las esposas, mientras que mi brazo derecho estaba completamente inutilizable gracias al gran dolor que sentía al intentar moverlo.

     — Esto te dolerá mucho —le advirtió Gangjae a Jiwoo riendo—. Mientras te aplastas, tu cráneo se abrirá y se te saldrán los sesos. Me encantaría verlo, pero no tengo tiempo.

     Gangjae me miró.

     — Ay, querida, sabes que te amo, pero debes aprender la lección —me dijo fingiendo tristeza—. Si mueres pues, quizás era parte del destino, pero si no... quién sabe, a lo mejor Mujin Choi te asesinará, lo que pase primero.

     Rió como el maniático en el que se convirtió, se despidió cerrando la puerta y encendiendo la maquina que aplastaría la camioneta matando a Jiwoo y Pildo, pues yo estoy legalmente muerta.

     La camioneta se movió gracias a la maquinaria, se detuvo bruscamente al lado de la maquina que nos dejaría debajo de la plataforma para aplastarnos, haciendo que Pildo se despertara por el golpe.

     Pildo se veía consternado, pero al verme a mí y a Oh Hyejin comprendió lo que estaba pasando.

     La maquina nos levantó bruscamente, haciendo que Jiwoo y Pildo empezaran a tratar de romper las esposas, mientras que yo solo los miraba sentada en el suelo con resignación, ya había aceptado lo que se suponía que pasaría, pues no tenía razones ni posibilidades para vivir, no tenía familia, ni amigos, ni un lugar para llamar hogar, solo un departamento con viejos recuerdos de lo que fui.

     La maquina nos soltó y nos puso debajo de nuestro final, la maquina aplastadora.

     — ¡¿Qué mierda esperas?! —me gritó Pildo mientras trataba de soltar sus esposas— ¡¿Quieres morir aquí?!