Capitulo 11.

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Hoy era 1ero de noviembre, me habia levantado más temprano para poder hablar con mi padre, estaba terminando de arreglarme para salir a bosque cuando Pansy se removio en su lugar.

-A donde vas? Que hora es?- dijo trantando de abrir sus ojos, me causo ternura por lo cual sonrei y me acerque a taparla bien.

-Es muy temprano Pans, duerme, yo iré a llamar a papá- susurre, estoy segura de que antes de que yo termine de hablar ella ya se habia vuelto a dormir.
Sali de la habitación y comencé a caminar fuera de la sala común, tendría que tener cuidado de que no me vieran o me castigarian, llegando al bosque comencé a levantar el celular en busca de señal, aquí la verdad era muy mala por lo cual podía hablar muy poco con él, cuando por fin encontré marque su número y espere a que atendiera.

-Hola pequeña, como estas?- hablo papá, parecia feliz.

-Hola, bien y tu?- respondi.

-Bien cariño, bien. Como te esta yendo? Como estan las cosas allí?- pregunto.

-Mejor que la última vez, ahora hay nuevas escuelas por aquí debido a un torneo- conté- pero es para mayores de 17 asique no participaré- avise antes de que me interrogue- a ti, como te esta yendo?

-Que bueno que sea para mayores- hablo tranquilo- me esta yendo muy bien, pude crear mi primer hibrido hija y si sigo así las cosas van a cambiar muy pronto, lo prometo- dijo de manera entusiasmada, me alegraba por él pero no estaba realmente segura de que fuera buena idea andar creado híbridos pero no seria yo quien se lo diga, no arruinaría su momento- Nik con quien hablas? Es Ari? Dejame hablar con ella- se escucho al otro lado del teléfono, era una voz de mujer la cual no pude reconocer, con quien estaba, sera que conocio a alguien.

-Papá quién es?- pregunte de manera sería.

-Como que quien soy mocosa, acaso ya te olvidaste de mi?- no puede ser, me levante donde estaba y comencé a caminar para todos lados casi gritando.

-Tía Becc no puede ser, hace cuanto te desperto? Por que no llamaron antes?, quiero ir, donde estan?- dije alterada.

-Wow Ari, tranquila- dijo al otro lado riendo- no hace mucho que me desperte linda, no llamamos antes porque realmente no pudimos, lo siento- se lamento, yo asenti como si me pudieran ver- por ahora no es seguro que vengas, pero prometo hacer todo lo posible porque nos reunamos- aseguró, se escucho un sonido en el teléfono, me estaba quedando sin señal, mierda.

-Me quedo sin señal, lo siento, los amo- hable por ultima vez cortando el teléfono. Estaba muy feliz, no podía creer que papá le haya sacado la daga, no podia esperar para verlos, miles de pensamientos pasaban por mi cabeza mientras volvia al castillo, no se en que momento entre, ni que hora era, ni nada, solo senti como choque con alguien y caí al piso, al levantar la cabeza pude ver al rubio de mi amigo riendose, me dio la mano para levantarme y me ayudo a limpiar la tierra de mi ropa.

-Ibas muy distraída Ari, que te tiene asi- hablo aun riendo, mire a mi al rededor tratando de ubicarme donde estaba y cuando lo hice hable.

-Lo siento Ced, es que hable con papá y con mi tía Rebekah- dije mirandolo de manera sonriente, el me miro confundido.

-No tenia una daga clavada?- pregunto.

-Si, pero por alguna razón Nik se la saco- explique, la verdad yo también estaba algo confundida, pero la felicidad me ganaba.

-Me alegro de verte asi linda- hablo acariciando mi rostro- hacía mucho que no estabas tan feliz- termino para pasar un brazo por mis hombros y comenzar a caminar, yo solo sonreí, él tenia razon hacia mucho no me sentia tan bien.
Por lo visto el desayuno ya habia comenzado, me despedí de Cedric y me acerque a mi mesa, alli estaban todos mis amigos, algunos me miraban raro.

Arizbeth Mikaelson Donde viven las historias. Descúbrelo ahora