✓ Tan bonito y tan irreal (LGBT)

Capítulo 18.

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Scarlet

— Scarlet...

Sentí un pequeño murmullo a lo lejos pero mis ojos aún estaban cerrados, solo sé que mis manos apretaban algo.

— Scarlet...

— Ugh.

— Despierta —esa era la voz de Eva y parecía nerviosa. 

Yo abrí los ojos aún sin entender nada, la chica estaba encima de mi.

«¡Eva encima de mi!»

Sus mejillas estaban coloradas como un tomate y yo no entendía nada.

— ¿Podrías quitar tus manos de mi culo?

«Oh por favor, dios santo dime qué yo no estoy haciendo eso»

Mis ojos se abrieron como platos. Fue cuando recordé que Eva solo llevaba ropa interior y un pulover.

Estábamos debajo de una manta y mis manos se encontraban una en su cintura y la otra en sus nalgas. Tocando el borde de sus bragas.

«Oh, espero que yo nunca tenga amnesia, porque esto no sería muy fácil de olvidar»

— Joder lo siento, b-buenos días —dije y subí mis manos a su cintura.

— Al parecer si que me ibas a violar —sentí mis mejillas arder e intenté moverme pero era soltó un quejido de dolor...

— Lo s-siento, ¿Dónde te duele?

— Las costillas, una mano, y un poco la cabeza —susurró aún encima de mí.

Todo su cuerpo estaba pegado al mío y agradecí cuando se separó hasta caer a mi lado. Todavía tenía algunas vendas puestas en sus brazos y varios moretones por todo su cuerpo.

(...)

Ya era mediodía y yo me encontraba tocando la guitarra que me había alcanzado Alex esta mañana mientras Eva leía un libro cuando sentimos la puerta.

Corrí a abrir y eran las chicas del grupo de Basketball, ya había olvidado eso.

Habían venido a visitar a Eva, pero claro ella no se acordaba de ellas tampoco.

— Eva estábamos en una competencia —le explicó una de las chicas, la morena cuando les conté lo sucedido.

— Wao, ese es mi sueño —susurró ella y me miró, yo asentí divertida.

— La última parte de la competencia es en año nuevo, pero debemos practicar mucho, deberíamos empezar cuánto antes, solo falta una semana para navidad. 

— Mañana el doctor vendrá a casa a visitarla —les dije yo y ellas asintieron.

—Si todo está bien puedo comenzar en unos días...

En eso sentimos a alguien llamar a la puerta otra vez y corrí a abrir.

Era Cameron...

— ¿Que haces aquí Cameron?

— Y-yo, quería pedirte perdón Scarlet —dijo y se notaba arrepentida— Fue mi culpa y...

— No tienes la culpa Cameron, tranquila.

Ella hizo una mueca.

— ¿Eva está bien? —yo asentí y ella hizo una pequeña sonrisa.

— Lo siento de verdad, creo que lo mejor es que me vaya de la banda, ya he causado suficientes problemas.