Capítulo 24

2.5K 277 42
                                    

Harry se vio en la obligación moral de asegurarse que Cho llegase sana y salva a la torre Ravenclaw. El castillo no era el más seguro en este momento... Ni en ningún otro momento desde que recuerda. Era un bendición que la entrada a la guarida estuviese oculta dentro de cada Casa y no tener que deambular por el castillo. Sin embargo, en el actual estado, emocionalmente sensible, de Cho, prefería no correr riesgos.

Harry se quedó a su lado hasta que Cho pareció retomar un mejor control de sus emociones, se dieron un último abrazo, como gesto de consuelo mutuo por la prematura muerte de Cédric y se despidieron sabiendo que ahora son buenos amigos.

§•••§•••§

Regresar a la Sala Común de Gryffindor fue tan reconfortante como en su primera vida, todo era tan hogareño, a Harry le resultó imposible no sentarse frente a la chimenea y relajarse por unos minutos antes de lanzarse otra vez a la acción.

Esta vez no había nadie esperándolo, por lo que Harry aprovecho para hablar con Lady Muerte.

—Madre— pronunció con nerviosismo. Probablemente nunca dejé de asombrarse de que ahora es él quien formula la palabra.

Dos hermosos hombres, uno rubio y tez bronceado, el otro pelinegro y de tez pálida.  Vida y Muerte.

—Padre —se corrió Harry, sin inmutarse ante el cambio de género. —Señor —saludo. No tenía tanta familiaridad con Vida como para referirse a él de otra manera.

Muerte sonrió alegre y lo abrazó con fuerza—. No seas tan formal con Zoé, Cariño. Él también es familia, se enojara con nosotros si lo excluimos así.

—Lo siento, padre Zoé.

—No te preocupes, Harry— Lord Zoé sonrió con calidez y se unió al abrazo—. Puedes llamarme Zoé o Pater, si lo deseas, para no confundirte.

Harry se dejó envolver por la calidez y confort que le brindan los brazos de sus padres y susurro con agradecimiento.
—Gracias, Pater.

Las dos deidades compartieron una mirada amorosa y besaron al mismo tiempo la cabeza de Harry.

Pasaron las siguientes dos horas conversando sobre su día, contando historias de otras épocas y pasando el tiempo de manera amena. Hasta que dieron las 3 de la mañana, Harry se levantó, ya extrañando el calor de sus padres.

—Me tengo que irme, Nagini esta a punto de atacar al señor Weasley— se excusó.

La mano de Lord Zoé agarro a Harry del brazo, deteniendo exitosamente al menor.

—Harry, no vayas. Ya es hora de que Arthur Weasley se una a mí— explicó Lord Yue.

—¿Qué?

— Ha llegado su hora, Cariño...

—Pero, ¿cómo es eso posible?, la última vez sobrevivió... Él seguía vivo cuando entré al Bosque Prohibido durante la Batalla de Hogwarts.

—Lo sé, Cariño. Sin embargo esta guerra hizo más que traer muerte a su paso. Esta guerra causó el desbalance del mundo. Se llevó a los que debían vivir y dejó a aquellos que no debía— Lord Zoé hablo con calma, sabiendo que esto sería duro para Harry.

—Pero... El señor Weasley se ve tan saludable...

—Es su magia la que mantiene la apariencia, Arthur lleva años trabajando hasta el cansancio e incluso a través del mismo, todo para brindarles una buena educación a sus hijos. En una línea temporal sin el regreso de Riddle, Arthur Weasley abría muerto de agotamiento y desnutrición este mismo día.

Harry asintió y se dejó caer al asiento que había ocupado antes, en medio de ambos padres. Lloró por la muerte del señor Weasley, lloró por sus amigos Weasley que pronto quedarian huérfanos de padre y por la señora Weasley que pronto sería viuda. Vida y Muerte lo abrazaron con fuerza, intentando darle tanto consuelo como es posible.

Harry se quedó dormido entre las deidades y fue encontrado solo a primera hora de la mañana por la profesora McGonagall.

—Señor Potter, despierte.

Hubo una vez en la que Harry tuvo un sueño pesado, especialmente estando en Hogwarts, esto no volvió a ocurrir; no después de sobrevivir a la guerra.

—¿Sucede algo, Profesora? —pregunto con voz adormilada, apenas siendo capaz de detenerse para no hechizarla.

—Venga conmigo, señor Potter, sospeche que a los señores y señorita Weasley les vendrá bien su apoyo en este momento.

Harry la siguió en silencio y la ayudó a despertar a los gemelos y Ron, mientras ella hacia lo mismo con Ginny. Fueron guiados a la oficina de Dumbledore, ahí el anciano anuncio la muerte de Arthur Weasley a los presentes. Los menores entraron en negación para después soltarse en un llanto desesperado. Preguntaron por lo sucedido pero el anciano no dio explicación alguna, en cambió, trato de interrogar a Harry. Queriendo averiguar si Harry sabe algo o vio algo en la mente de Voldemort.

Harry fingió ignorancia y se enfocó en consolar a sus amigos, casi hermanos, al mismo tiempo que contiene sus propias lágrimas.

Una hora más tarde fueron enviados por flu a Grinmaul Pleace no. 12, el funeral sería al día siguiente.











§•••§•••§

Holiwis, Chicxs!
Perdonen la demora, sucedieron muchas cosas (entre ellas que se descompuso mi celular anterior y se perdieron todos los borradores del fic), tuve que reescribir el capítulo varias veces... Hasta que hice algo que me gusto.

El capítulo aún no está editado, cualquier error, por favor, háganlo saber en comentarios.

Gracias por seguir aquí y por todo su apoyo.






¡Nos leemos luego!

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 15 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Hijo de la MuerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora