Hijo de la Muerte

Capitulo 10

Dicho y hecho.
Tal como Harry supuso, tan pronto cómo Fred y George se enteraron que Hermione recibió su primera detención (en su primer día de clases) organizaron la fiesta del año. Muy parecida a la que hicieron cuando se enteraron de que habían ido a Hogwarts con el auto volador del señor Weasley y que no habían sido expulsados por ello.

La celebración se extendió tanto, que tuvo que ir Mcgonagall para obligarlos a irse a la cama. La estricta profesora les había dado la regañada de sus vidas por festejar la detención de su amiga mientras ésta parecía estar aguantando el llanto.

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Harry caminó tranquilamente por los pasillos de Hogwarts, ya era sábado y por fin a llegado la hora de resolver las cosas con sus amigos. Las cosas nunca volverían hacer igual; Harry no es el mismo chico que ellos recuerdan y ellos no son los guerreros y compañeros de armas que él dejo atrás.

Se adentró en un aula desocupada sin molestarse en comprobar que Ron y Hermione lo estuviesen siguiendo, era obvio que lo hacían.

Cuando los tres estuvieron a dentro, Harry giró sobre sus talones con varita en mano para lanzar los hechizos de protección y silencio correspondientes sobre la puerta. Ignoró el temblor y desconcierto que cruzo por el rostro de sus mejores amigos y guardo la varita, todavía sin decir nada, extrajo de su mochila una pequeña caja que resguarda un pensadero.

Coloco el mágico artefacto sobre un viejo escritorio y coloco en el sus memorias, todas aquellas que lo atormentaron antes y durante su quinto año.

Cuando terminó levantó la vista, asombrado de que ambos fuesen capaces de guardar silencio por tanto tiempo, y habló.

—Sé que están molestos por mi actitud y que se sienten heridos por qué no les conté lo que tenía planeado hacer.- Comenzó a decir Harry, titubeándo un poco. Esto iba a ser más difícil de lo que había sido con los Merodeadores, ellos ya habían sufrido y vivido la guerra, y podían comprender y empatizar más con él. Cosa que no era lo mismo con sus amigos. Ellos aún eran muy ingenuos, ellos todavía no comprendían el alcance total de la guerra, lo único que saben o conocen sobre el tema es lo que otros les han contado.. aún cuando se han visto envueltos en algunos problemas a causa suya.- Pero quiero que entiendan porque lo hice... sé que desde su punto de vista no es tan malo estar un par de meses incomunicado, no es la gran cosa. Y a lo mejor pensaron que me estaban haciendo un favor al cumplir con las órdenes de Dumbledore.

Hermione dejo escapar un pesado suspiro, Harry nunca había sido tan irrespetuoso con el Director, estaba a punto de protestar pero el ceño fruncido de Harry la detuvo. Ella sabe que a pesar de que ya se hablan nuevamente, las cosas entre ellos siguen estando sobre la cuerda floja, o por lo menos en cuanto de su amistad se trata, y no quiere tentar más su suerte con él.

» No es así, no me protegieron de nada, por el contrario... la angustia me estaba matando. No tenía idea de si Voldemort había decidido atacar a alguno de ustedes en venganza por qué no lo logro conmigo. Todo un maldito mes la muerte de Cedric y de mis padres me atormentó en sueños, apenas podía dormir un par de horas... ¡me estaba volviendo loco!

Para entonces, Harry ya no los veía a ellos, su mirada se perdió viendo hacia algún lugar lejano. Su voz seguía siendo suave y calmada pero la tristeza le cubría, y su magia podía provocar nieve en cualquier momento.

Ron y Hermione observaron a su mejor amigo como si nunca en sus vidas lo hubieran hecho. El joven frente a ellos se veía agotado y aterrado, hoy no había rastro del Joven Gryffindor que se lanza al peligro para salvar y cuidar de sus seres queridos. Solo había un niño que parece tener sus días contados y de quién otros esperan que derrote al Mago Oscuro más grande de todos los tiempos.

Pequeñas lágrimas escurrían por sus mejillas, y un peso invisible se posó sobre los hombros del menor, haciéndolo ver aun más vulnerable.

» Entren. - Dijo el pelinegro, haciéndose a un lado y dejando que sus primeros y mejores amigos vieran todos aquellos demonios que lo atormentaron a lo largo de su vida. Todo aquello que se esforzó en ocultar de los demás por temor a ser apartado de nuevo.

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Ambos adolescentes observaron con horror y un poco de morbo todas aquellas situación en dónde Harry se enfrentó a Voldemort. Situaciones a las que le ayudaron a llegar pero en dónde el menor, por una u otra razón, siempre terminaba enfrentando sólo. Vieron el enfrentamiento por la Piedra Filosofal, la batalla contra el basilisco y la destrucción del diario de Tom Riddle, y por último, vieron lo sucedido durante y después de la tercera prueba del Torneo. Observaron horrorizados a un muy malherido Harry ser torturado con la maldición Cruciatus y luego ser obligado a batirse a duelo contra el deforme mago, quien no solamente tiene más años de educación mágica, sino que está en "perfectas" condiciones físicas.

Además de eso, también vieron las cortas y nada esclarecedoras conversiones que Harry tuvo con el Director. Las verdades a medias y oraciones con varios significados les dejo un muy mal sabor de boca a ambos, además de que el anciano mago no daba respuesta a ninguna de las preguntas hechas por el pelinegro y sin embargo, éste se esforzaba por conseguir hasta el último detalle de los sucesos. Además de que Dumbledore parecía más interesante en interrogar a Harry qué en asegurarse de que el ojiesmeralda estuviera en un buen estado de salud.

Lo último que vieron fue a Harry escondiéndose de sus tíos para poder escuchar las noticias, tratando de leer entre líneas o buscando algún suceso extraño e inexplicable para los Muggles. Cualquier cosa que le diera información de lo que está sucediendo en el mundo mágico.

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Harry paseó nerviosamente por el salón en desuso, con el temor recorriendo su cuerpo. "¿Y si después de todo deciden que no quieren seguir a su lado? ¿Creerán que soy un fenómeno igual que mis tíos?", se preguntó cuándo las dudas lo asaltaron, las mismas qué siguieron creciendo en él durante todo el tiempo que sus mejores amigos estuvieron dentro del pensadero, viendo todo aquello que no le había contado a nadie...

Las horas pasaron y su ansiedad aumento, el nerviosismo causó que el cabello de Harry pasará por todos los colores del arcoiris y que sus ojos no se pusieran de acuerdo con el color que usarían.

No fue sino hasta que vio las siluetas de sus amigos ser expulsadas de pensadero, cuando pudo reinar sobre sí mismo y regresar a su apariencia física original.

Se enderezó en su lugar y se preparó para cualquier reclamo o insulto que pudiera ser dirigido a su persona. Fue por eso que no espero que Hermione se lanzará hacia él con los brazos extendidos y el rostro bañado en lágrimas. Para que luego Ron, siguiendo los pasos de la castaña, los envolviera a ambos en un apretado abrazo de oso.

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Aclaraciones y Nota de la autora...

Estuve leyendo sus comentarios y me di cuenta que algun@s de ustedes esperaban o pensaban que iba a crear una enemistad entre el Trío de Oro, y pues aunque si me hubiera gustado hacerlo (porque a veces no soporto a Hermione por ser tan entrometida, ni a Ron por su actitud envidiosa...), también creí que sería injusto hacerlo. Pues, a pesar de todo, ellos nunca le dieron, realmente, la espalda a Harry... Además de que desde el primer libro le brindaron su amistad incondicional, y la mayoría de las peleas que tuvieron entre ellos es por qué no alcanzaban a comprender la imagen general de las cosas... No habían participado realmente en la guerra, no sufrieron lo que Harry sufrió y realmente tampoco podían imaginar que alguien de su edad pudiera pasar lo mismo que éste y salir vivo...

Bueno, y ahora, la Nota;

Sé que la historia tiene varios errores ortográficos y gramaticales, y aunque me estoy esforzando por corregir esto... me es algo complicado hacerlo bien, ya que padezco de Dislexia* y esto me complica las cosas. Claro que no todo es culpa de la dislexia, también estoy medio pendeja, pero voy a corregirme lo mejor que pueda.
Sería de gran ayuda si ustedes me ayudarán a corregirme cuando noten alguna falla y así entre tod@s poder mejorar la calidad de esta u otra de mis historias, y así las puedan disfrutar más. Al fin y al cabo es para el disfrute de ustedes.

* Dislexia; Alteración de la capacidad de leer por la que se confunden o se altera el orden de letras, sílabas o palabras.