Eruhaben y Raon observan con preocupación creciente hacia la columna de fuego a la que ingreso Cale, si bien esta creada con su propio poder y es capaz de restringir al espadachín negro, aún sigue siendo peligroso.
De repente, la columna de fuego rojo es tragada por un fuego más voraz y vivido que antes. Eruhaben se da cuenta que este poder ya no pertenece a Cale.
- Abuelo goldi, ¿por qué el fuego se siente diferente?
- ¡Raon prepárate!, debemos-
Antes que Eruhaben pudiera terminar de hablar, el fuego se desvaneció instantáneamente, permitiendo ver a los dos individuos que yacían dentro.
- ¡Humano! ¡¿qué le hiciste al humano?! ¡Aléjate!
Choi Han que sostenía a Cale fue sorprendido por los gritos del iracundo dragón negro que reunía rápidamente mana es sus garras delanteras, entonces le habla en tono suplicante.
- ¡Por favor! ¡Ayúdenlo!
- ¿Qué?
Eruhaben se asombró bastante por el hecho que Choi Han, claramente angustiado, había recobrado el sentido, algo que debería ser imposible en el estado en que se hallaba antes; después su atención se dirigió hacia Cale, que estaba consciente, siendo cargado por Choi Han mientras se retorcía de dolor.
- Cale ¿qué hiciste?
- Eru...haben, los niños... no dejes... que me vean...
Desde un costado, el joven lobo que estaba llorando hacía solo unos segundos, descubre lo que está sucediendo y corre hacia Cale y Choi Han.
- ¿¡Hyung-nim!?, ¡Choi Han Hyung-nim!
Lock que observa con gran emoción a Choi Han se detiene de golpe cuando observa a Cale.
- ¡Joven maestro!
- ¡Humano!
Con molestia, Eruhaben toma a Cale de los brazos de Choi Han y con una mirada casi amenazante le da la espalda.
- ¿Eru-?
- Cállate, Cale Henituse.
Raon vuela a lado de Cale y Eruhaben, llorando.
- ¡Humano! ¿por qué estas así? ¿qué te hizo esa persona? *sob*
Jack que había terminado de tratar Hanna y Alberu lo mejor que pudo, se apresura hacia Eruhaben. Su débil poder divino a punto de agotarse pudo borrar las heridas más superficiales, pero aparte de eso Cale no mejoró.
- Oh no, tendré que recuperarme rápidamente para intentarlo de nuevo.
- No tiene caso, él daño está en su plato, no puedes curarlo.
- ¡No puede ser! esto...
Jack observa a Cale morder sus labios para reprimir sus gritos de dolor y aferrarse a su pecho con desesperación y no pudo evitar estar conmocionado por lo dicho por Eruhaben.
Alberu que recobró su conciencia recientemente, se aproxima con cautela sin perder de vista a Choi Han que camina junto a Lock y detrás de Eruhaben.
- No te preocupes por él, ha recobrado plenamente su conciencia.
- Pero dijiste que eso era imposible Eruhaben-nim, incluso la estrella blanca lo dijo.
- Es imposible, pero este pequeño bastardo lo hizo posible, sin embargo, parece que el precio fue alto.
Alberu observa a Cale en los brazos de Eruhaben, su cuerpo tiembla incontrolablemente y una bocanada de sangre sale de su boca. Él rostro de Alberu palidece.
- ¡Cale! debemos darle atención médica de inmediato. El palacio real, voy a asegurarme de-
- Ningún médico puede ayudarlo ahora.
- ¡¿Entonces qué debemos hacer?! ¡A este paso morirá!
A excepción de Alberu y Eruhaben los demás se estremecen por la cruel declaración del príncipe.
- ¡Abuelo dorado! ¡¿es cierto?! ¡El humano no puede morir!
- Si es la primera vez que ocurre, debería curarse a sí mismo, pero...
Raon entre lágrimas cuestiona a Eruhaben y él trata de dar un parte consolador, pero no está seguro, ningún humano debería ser capaz de tolerar tal dolor, pero viendo como Cale no grita y hace lo posible para controlar sus expresiones faciales, parece que está acostumbrado a este tipo de situación.
- Pobre y estúpido humano.
- ... Pero... él me dijo que no moriría...
Choi Han habló débilmente detrás de Eruhaben, como alguien que no tiene certeza de lo que dice, pero quiere creerlo.
Alberu pasa el dragón dorado y agarra a Choi Han por el collar de su ropa tomándolo desprevenido.
- ¡Tu! ¡¿Qué le hiciste exactamente?!
- ...
Choi Han no fue el culpable directo del estado de Cale, pero de una manera o de otra sabe que fue su responsabilidad, por lo que no trata de excusarse y evita la mirada del príncipe.
- ...Lo siento mucho...
Sin poder contener su ira, Alberu le da un puñetazo a Choi Han y lo derriba
- ¡Choi Han Hyung-nim!
Sin decir queja o reclamo, Choi Han escupe la sangre de su poca en el suelo, luego, en lugar de ponerse en pie se postra sobre sus rodillas e inclina la cabeza.
- Lo siento mucho, haré lo que sea que esté en mi poder y soportaré toda vuestra ira y odio sin contemplación, pero por favor, no le dejen morir. ¡Por favor!
La ira de Alberu mengua al presenciar el legítimo clamor de Choi Han de ayudar a Cale y un sentimiento de parentesco toma lugar, algo que lo molesta.
- Vamos al palacio primero, pensaremos en una solución allí.
En la entrada principal del palacio, aparece un círculo dorado y de él salen varias personas, todos en mal estado y con miradas llenas de abatimiento y derrota, algo contrario a lo que se esperaría teniendo en cuenta las dos victorias recientes. Sin embargo, notando el estado del héroe que logró tal hazaña, es evidente el motivo.
- Por aquí.
Alberu los guía personalmente mostrando su apuro, en el camino le indica a los sirvientes que llamen médicos y sanadores, aunque sabe que no tiene sentido hacerlo.
En la habitación más ostentosa para huéspedes, Cale es puesto en la cama con cuidado, eso no evita que las costosas sábanas sean manchadas con sangre y polvo.
Verlo retorcerse en agonía, era una vista tan lamentable que revolvía las entrañas de los presentes, pareciese que fuera a morir en cualquier momento en presencia de todos sin que ninguno pudiera hacer nada.
Los médicos o sanadores tampoco fueron la excepción, ni siquiera las opciones de más alto grado fueron de utilidad.
Cada cierto tiempo, Cale caía inconsciente para despertar minutos después en sufrimiento. En un leve momento de lucidez, los ojos de Cale nublados por sus lágrimas escanean la habitación con dificultad, nota la figura de Alberu, Choi Han y Ron que llegó recientemente, y en su costado escucha el pequeño dragón inconsolable.
A pesar de sus rostros apesadumbrados, Cale agradece en su corazón que todos estén bien, por lo que una sonrisa trata de dibujarse en su rostro teñido de dolor, pero para todos los demás parecía más una mueca de disculpa por lo que temiendo lo peor fueron inundados por el pánico.
- ¡Cale! ¡Tienes que resistir!, Eruhaben-nim ha ido a visitar el árbol del mundo.
"No se preocupen... estaré... bien"
Por desgracia o por suerte, esas palabras no pudieron salir de la boca de Cale.
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Una vez más, pero nada es igual
FantasyEl dios sellado lamenta la pérdida de su juguete y la desesperación de Cale será su compensación. Cale es enviado a otra versión del nacimiento de un héroe donde nada será igual que la primera vez, sin embargo, Cale decide asegurarse de que el dios...