La obsesión del demonio ❁ HyunIn

♡ : XXXV - SE ACABÓ

—Aunque sigo creyendo que no soy digno de estar con Jeongin, tampoco creo ser capaz de estar lejos de él —murmuró levantando una copa con vino tinto ante la mirada atenta de sus otros dos amigos.

Hace un par de horas llegaron a almorzar en el departamento de los Yang, pero ahora que estaban completamente solos porque los demás habían ido a comprar la cena, disponían para hablar temas que solo a ellos como ex demonios les preocupaba.

El encuentro había sido igualmente emocional, tanto a Minho como a Changbin les había costado desprenderse del abrazo y las lágrimas, no habían cesado de verbalizar cuan agradecidos estaban por todo lo que había hecho y que se sentían en absoluta desventaja porque no había manera de devolverle la mano.

Superar el sacrificio iba a ser imposible. Estaban alegres de tenerlo de vuelta.

—Hyunjin ¿Sabes que ha sucedido con los servus? — Changbin jugaba con su dedo índice derecho sobre la superficie de la copa— ellos eran incomprendidos, demonios de baja categoría que se aferraban a algo más superior, de hecho, presenciaron muchas cosas que podrían habernos puesto en problemas ante Asmodeo, pero... no lo hicieron, fueron fieles hasta el final.

—Me agradaban —murmuró Minho masticando una hojuela de papa frita.

Hyunjin terminó su vino y dejó la copa vacía sobre la superficie de vidrio, recordó las últimas conversaciones con el ángel Félix antes de que fuera enviado a la tierra. Luego suspiró.

—Fueron convertidos en criaturas libres como animales, aves que pudieran volar entre las cordilleras, colibríes que bebieran el néctar de las flores, perros que hicieran feliz a otras familias... seres que no pudieran razonar pero que fueran puros en su esencia. Así, Asmodeo u otro ser del inframundo sería incapaz de tener poder sobre ellos.

La sonrisa en el rostro de los demás evidenciaba la tranquilidad que eso les daba, de alguna manera habían estado siempre al servicio de ellos y eso generaba conexiones incluso si fueran pequeñas.

Los tres siguieron manteniendo una conversación y una postura distendida en los sofás, hablando de cosas que habían sucedido en los años que llevaban siendo humanos. Incluso rieron de su torpeza al inicio de la etapa tanto así que enumeraron los hechos que más le causaron conflicto. Comprender los sistemas del cuerpo humano, la frecuencia con la que se iba al baño, la frecuencia con la que se debían alimentar, tener que viajar largas distancias para llegar a sus destinos, no poder influenciar de manera sobrenatural a otros para su conveniencia, desconfiar de todo por temor a que pudiesen ser potencial peligro para sobrevivir, entre otros.

—Aunque todo vale la pena —habló Minho— si realmente no hubiésemos tenido contacto antes con los humanos, habría sido peor —miró su teléfono y sonrió con tristeza al ver la foto de Jisung y él con el rostro unido para una "selca"— ahora que Jeongin te tiene de vuelta, creo que tomaré un avión a Estados Unidos la próxima semana, tengo que cuidar de mi chico ¿Qué harás tú Binnie?

—Regresaré también, hay audiciones que no debo posponer, aunque Seungmin dice que pedirá solo un par de días más para quedarse con Jeongin, recuerda que está en plan de cortar su relación y contarles a sus padres que también está enamorado de un hombre.

Era bobo ponerse celoso, Hwang Hyunjin seguía pensando que el género femenino era un precioso regalo del cielo, sin embargo, no estaba interesado en lo más mínimo de entablar relación con una mujer, sus ojos, su cuerpo y mente estaban enfocadas en el corderito. Y, sin embargo, le dolía el estómago pensar que el muchacho había jugado a la heterosexualidad o que había dado besos o que su apreciado miembro estuvo en el cuerpo de esa chica.

—Tranquilo campeón —murmuró divertido Changbin al ver la tensión en Hyunjin, aunque pensándolo bien, estaría peor si fuera el caso de Hyunjin— de todas formas, no te preocupes, siempre supimos que ese chico te seguía amando, tanto así que jamás nos atrevimos a hacer cosas indecentes... ya sabes.