Destello del Sol

Capítulo 35: Nuestra búsqueda

— ¿Conseguiste algo?

— Fue al banco de información. Estaba buscando a alguien.

Dos personas estaban en una oficina.

Un hombre alto, cabello castaño peinado hacia atrás al estilo de corte low fade, viendo y leyendo en la computadora infinidad de nombres que pasaba la mujer a un lado suyo.

Una joven mujer de cabello corto y negro hasta los hombros, desordenado, al estilo nape bob con ojos negros levemente rasgados, yacía observando los perfiles que había estado buscando Hugo en aquel banco de información.

— Hay decenas de miles de curadores en todo el país — Menciona Alduin un poco abrumado por la información — Es imposible que encontremos a quien buscaba.

Un sanador.

¿Por qué buscaría aun sanador en una situación como esa?

¿Qué buscaban del sanador?

— ¿Buscaban a un sanador para unirlos a sus filas? — Se pregunta Adriana Gallaban meditativa, mientras que Alduin solamente suspiraba sin encontrar respuestas.

— Parece que buscó algo más... si encontráramos a-

— Si fuera posible... — Interrumpió Adriana los pensamientos en voz alta de su compañero — Desgraciadamente el joven de la oficina murió ayer por culpa de Hugo.

— Carajos... — Maldice internamente el joven castaño sabiendo que no había salida de este laberinto.

Mientras pensaban en alguna salida, el celular de Alduin comenzó a sonar, este toma la llamada de inmediato al saber quién era.

— Alduin — Menciona la voz al otro lado de la llamada — Estoy tratando un caso en el área residencial.

— Sí, estoy al tanto de que fue una batalla grande la que ocurrió, hubo muchos heridos en esa zona — Afirma Alduin saber sobre el caso, pero no se esperó que al escuchar esto a través de la bocina delantera, Adriana se levantara y usara su teléfono celular a favor de los dos.

— Si mal no escuché, es en el área residencial, ¿Cierto? 

— ¡Adriana! — La voz de Adriana se escucha al otro lado, cosa que era perfecta para Paúl — Bien, eso es perfecto. Tienen que venir aquí, creo que quien Hugo estaba buscando estuvo involucrado con este incidente.

Sin más que decir, los dos toman sus pertenencias y se retiran a gran velocidad, permitiéndoles llegar en tiempo récord al lugar de encuentro.

Adriana no logró más que fruncir el ceño al ver el destrozo colosal que había causado la lucha en ese lugar, parecía ser el montaje de una película bélica de la gran guerra basado en el Continente de las Estrellas.

Tras mostrar su identificación de la Guardia, pasan entre los ciudadanos que se formaron alrededor del área de trabajo de los bomberos, médicos y Guardias que ayudaban.

Con Alduin viendo la identificación de la Guardia en sus manos, un sentimiento de alivio se presentó en el momento de recordar en cómo se lo habían quitado y pensar en cómo se lo devolvieron.

Paúl se presentó ante los dos con un saludo al corazón, con el uniforme del Cuerpo de Melóforos, el cual se componía de un conjunto negro con bordeados dorados con un chaleco gris mecanizado perfecto para compaginar las debilidades de los dones.

— Me gusta esa armadura — Menciona Alduin golpeteando con los dedos el acero que sonaba desde el uniforme de su compañero, quien suspira ante esa reacción — ¿Si me uno a los Melóforos, me darían una de estas?