Capítulo 43: Punto débil

1 0 0
                                    

Abdel es empujado violentamente hacia atrás, y antes de enderezar su cuerpo, es interceptado por Elián, quien utiliza su don de curación mientras detiene el curso vectorial de su amigo hasta detenerse por completo.

Inmediatamente después, de curarlo y detenerse en seco, la mano de Karnan logra alcanzarlo.

Abdel activa su don a tiempo para protegerse, cosa que logró debido a que los dos dones los lanzaron a lados opuestos con gran fuerza.

El pelirrojo logró enderezarse y mantenerse mientras era arrastrado por la física hasta su punto cero, mientras, Abdel fue lanzado hacia atrás con tremenda fuerza y no se detuvo, aunque cayó de espaldas y rodó por todo el jardín de la academia, en tiempos normales, esto sería para divertirse y reírse del infortunio de su amigo, pero ahora con frialdad, Elián se lanza directo hacia Karnan.

Lanzó unos cuantos jobs que fueron rebotados antes de llegar a su piel.

Karnan apretó sus puños y desde abajo preparó y lanzó un uppercut, cosa que su oponente logró esquivar por muy poco, recibiendo solamente una cortada en la otra mejilla. En ese mismo instante, su pierna se movió por una mezcla entre instinto y costumbre, directo hacia las de su oponente, recibiendo con esto el mismo rebote como si estuviese golpeando aquella barrera extraña que lo recubría.

De lo espontáneo que fue, ni siquiera Karnan reaccionó, por lo que, al voltear para terminarlo, Abdel se interpuso entre los dos, lanzándolos nuevamente lejos el uno del otro.

El moreno y el pelinegro suspiraron al comprobar que Karnan estaba al lado opuesto.

Abdel nota como una sonrisa aparece en el rostro de Elián.

La hipótesis de que algo recubría su cuerpo era cierta.

El don de Abdel era la de barrera psíquica. No era exactamente la misma que la de Flor, debido a que el de esta era muy prematura, pero si el don original de Karnan era la barrera psíquica, obviamente que se negarían entre sí.

Así como cuando dos dones telequinéticos luchaban entre sí, no era posible tener un vencedor hasta observar el uso de sus habilidades, atacar solamente con poder psíquico era inverosímil, debido a que se negaban con la fuerza que fuese, débil al fuerte, fuerte al débil, débil al débil o fuerte al fuerte.

Nada funcionaba, por ello estos utilizaban artefactos y herramientas para atacar por si estos encontraban a su némesis.

— Abdel.

El moreno lo mira de vuelta recuperando el aliento.

— ¿Qué pasó? — Menciona tratando de alinear sus pensamientos junto con su respiración — No me digas que ahora te arrepientes de esto.

Elián sonríe visiblemente mientras lo mira con cara de: ¿En serio estás escuchándote?

— No trajiste guantes de la Guardia que derrotamos en estos días, ¿O sí?

Abdel lo mira extrañado mientras niega con la cabeza.

Elián maldijo a Abdel mentalmente.

No importaba cómo atacara, si Abdel perdía la concentración por un solo instante, le daría la oportunidad a Karnan de cortarle la cabeza.

No era factible solamente utilizar las habilidades de Abdel para esa lucha.

Su poder era el don de la curación, aunque comprobara que podía regenerar alguna parte de su cuerpo, era inexperto y podría fallar en algún momento, además de que solo podría hacerlo con él mismo y una batalla en la que tendría que actuar como un soldado inmortal era simplemente demencial.

Destello del SolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora