EMPATIA

VERDADERO SENTIMIENTO

— ¿Qué boda? — repitió.

—Kiba kun— Hinata se armó de valor —Por favor ¿podemos hablar de esto en la tarde?

—No— respondió cruzándose de brazos.

Sasuke avanzó golpeó a Naruto en la cabeza, tomó las bolsas con una mano y jaló a Hinata hacia la casa con la otra.

—Un momento— el castaño se acercó.

—Sasuke— Hinata se soltó —tengo que explicarle.

—No, no tienes que.

—Sí debo.

Y ahí estaba esa mirada odiosa y segura en sus ojos claros. Le dio la espalda y entró seguido de Naruto.

—Lo siento— dijo el rubio. En cuanto cerró se pegó a la puerta a escuchar.

— ¿Qué haces? — lo increpó Sasuke.

—Sh.

Sasuke se acercó a quitarlo.

— ¿Te estás obligando? — escuchandoon a Kiba preguntar.

El azabache se quedó frío, iba a romperle la cara a ese imbécil. Naruto lo tomó del brazo y quedaron pegados a la puerta.

— ¿Parece que me obliga?— dijo segura. Kiba y Shino eran sus mejores amigos, los amaba y conocían a sabia como tratar a cada uno.

—No— murmuro —Lo que dijo Naruto...

—Si— se sonrojo pero mantuvo el control —Voy a casarme.

— ¿El clan te obliga?

—Más bien ustedes obligan al clan— susurro el rubio.

Sasuke hizo mala cara iba a apartarse pero Naruto lo retuvo y francamente no opuso resistencia.

—No— suspiro —Lo hago por dos razones, una serie de sucesos llevaron a que el clan quisiera imponerme el sello del bouke— Kiba iba a protestar pero Hinata continuo. —Sasuke encontró una forma de evitarlo.

—Casándose.

-Si.

—Esa no es razón para casarse.

—Dije que habían dos razones— se sonrojo sabia que está oyendo pero si quería convencer a Kiba tenía que ser honesta pensó en la forma en que se sentía a su lado, el lazo que se formó entre ellos, lo que le despertaba. —Porque lo quiero.

—Lo quieres— repitió despacio.

—S…sí.

—Pero creí que Naruto...

—No ¿recuerdas lo que dijiste del miedo una vez?

Sasuke recordaba fue antes de los exámenes chunnin…

— ¿Qué es el miedo?— pregunto Kurenai a sus alumnos.

Kiba habló sin esperar —Muchos creen saber que es el miedo, miedo a la oscuridad oa los insectos— ignoró a Shino que giró en su dirección —Pero el miedo verdadero ataca cada parte de tu cuerpo, cada músculo, cada célula, paraliza el cerebro. y todo se reduce a nada, cuando experimentas el verdadero miedo sabes que todo lo que creíste que te asustaba antes era una ilusión"