DECISIONES

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Los nervios la asaltaron pero de inmediato luego se recompuso —Buenas tardes.

Caminó con normalidad y se detuvo en la puerta de su habitación.

—Yo— Neji guardo silencio había planeado tantas cosas y ahora no podía decir nada.

Hinata se giró a su primo y le sonrió un poco —No tienes que decir nada, yo soy la que debe hablar— se armo de valor —Lamento no haberte dicho nada, sé que puedes pensar que es pronto o que estoy loca pero estoy segura de esto.

Neji la miro —Sabia que algo pasaba— desvió la vista a la ventana —En cuanto la vi al regresar ya algo había cambiado— volvió su atención a ella —Ahora luce distinta.

Se sonrojo pero se esforzó por dejar la mente en blanco — ¿Estás molesto?

Había querido enfadarse pero era Hinata de quien hablaban, era imposible —No.

Ella rompió el trato y desvió la mirada, se habían hecho cercanos, siempre hablaban y él le había pedido que le dijera si pasaba algo — ¿Decepcionado?

-No. Yo solo espero que sea feliz.

Se aventuro a verlo y sintió su corazón empequeñecer, él no se veía enfadado o decepcionado, se veía dolido. —Nissan.

Nunca esa palabra le había sonado tan amarga —Sin embargo no crea que dejare de protegerla, eso no cambiara— Asintió culpable —Y tampoco olvide que si algo malo pasa…

—Te lo diré— le interrumpió.

—No confió en él y no me agrada— Hinata lo vio sin decir nada —No creo que eso cambie— le toco la mejilla sorprendiéndola —Pero intento no alejarme de su vida.

Los ojos se le llenaron de lagrimas todos le pedían eso y temía no poder hacerlo —Nissan— quiso abrazarlo y olvidar esas estupideces de bouke y souke, ellos eran familia pero él la detuvo por los hombros.

Neji no se creía capaz de manejar una situación así. —Descanse Hinata sama— Se giró y se marchó dejando a Hinata con un nudo en la garganta.

Ella lucía feliz, había sido valiente ante el clan y parecía plena ¿qué podía hacer él? nada, pero si osaba lastimarla o dañarla de cualquier forma aunque le costara la vida lo haría pagar.

...

Sasuke buscó en su ahora llena despensa algo que comer, se preparó cereal y comió en silencio. Cuando vio su reflejo en la ventana de la cocina se quedó quieto, la expresión que se vio no creía haberla puesto nunca, él no era un idiota enamorado pero recordar a Hinata, su piel, sus reacciones a sus caricias… la expresión surgió de nuevo. , negoció y se levanto.

Necesitaba una ducha, se desvistió y al mirarse al espejo se quedó atónito, solo la marca con la forma del MS de Itachi quedaba. Todas las otras ya no estaban, jadeó y se concentró, sus ojos se tornaron rojos y tres aspas surgieron.

—Perfecto.

...

Hinata se vistió después de ducharse, tenía el cabello húmedo pero no tenía tiempo para nada, tenía que verlo. Ya todo estaba oscuro, saltó por la ventana y corrió entre los tejados pronto llego al distrito Uchiha y de un salto entró por la parte de atrás.

EMPATIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora