Oɴᴇ Sʜᴏᴛs [ Jᴊʙᴀ x Rᴇᴀᴅᴇʀ ] ¡Pedidos Cerrados!

82 | Gappy Higashikata

★ Pedido de alguien pero perdi el user, perdon ★

★ N/A! Espero que te guste <3 ★

★ ¡Advertencia! ¡+18 y Romance!★

Fem Reader User Stand

Gappy y tu eran pareja desde hacia un tiempo, nunca habian ido mas alla de besos y caricias hasta hoy. Tras una charla decidieron dar el paso. 

—Puedo comenzar haciendo esto. — La mano de tu novio se adentró debajo de tu sueter. Acarició tu vientre de arriba a abajo. Te dio una mirada, como si te estuviera pidiendo permiso. — Si algo te incomoda dime y parare.

—Lose. — Susurraste en su oído.

Uniste sus labios lentamente tomándolo por la nuca. El de cabellos oscuros te agarró de los muslos y se dirigió hacia la cama. Se sentó acomodándote en una posición más que comprometedora: con los muslos a sus lados y el trasero presionando sus piernas. No dejaron de besarse hasta que el aire les faltó.

Gappy jadeó un poco sintiendo como su miembro se endurecía debajo del pantalón de mezclilla al ser frotando contra tu feminidad. Gemiste al sentir su trasero ser ligeramente apretado y volviste a unir sus labios. Tu novio pasó su mano hasta tus pechos y comenzó a jugar con ellos, los acarició por encima de la tela con delicadeza.

—Te amo. — La chica dio una pequeña sonrisa.

—Yo más. — Eso fue lo último que pudo responder antes de que Gappy comenzara a besarte. Introdujo su lengua y ladeó su cabeza, presionando tu trasero son fuerza. Alzó tu falda plisada y bajó tus bragas tirándolas al suelo.

Tu novio te acosto en la cama y se posiciono arriba tuyo. 

— Abre las piernas. — Pidió.

Levantaste tu falda y obedeciste. Gappy bajó su cabeza y comenzó a degustar tu coño aferrándose a tu trasero, lo movía de adelante para atrás, haciendo círculos con lengua. Al mismo tiempo presionaba el clitoris con el pulgar.

Tus piernas femeninas, decoradas sólo por unas calcetas largas seguían temblorosas. Te quitaste el suéter ante la sensación acalorada y de paso tu brasier.

Gappy vio tus pechos desnudos rebotar y decidió parar. Se quitó su ropa, quedando completamente desnudo para luego treparla encima tuyo. Se quedaron viendo por unos segundos y unieron sus labios hinchados. 

— ¿Estas lista? — Asentiste nerviosa. Gappy beso tu mejilla y sonrio, su mirada era atenta y preocupada — ¿Segura? 

— Si — Agarro un condon de la mesita de luz, no tardo en ponerselo. Alinio su miembro con tu intimidad y lentamente te penetro. Dio un gruñido que no pudo escuchar porque tu gemido fue vociferado en su oído. Se quedo quieto por un momento, esperando a que los dos se acostumbren. 

Gappy cerro los ojos al sentir tanto placer, tu intimidad era tan apretada y calida. Realmente se esforzaba por no dejarse llevar por el deseo y placer. 

— ¿Estas bien? — Sonreíste ante lo atento que era tu novio, asentiste. El comenzó a moverse con penetraciones profundas pero lentas. 

—Carajo. — Suspiraste pesadamente sintiendo como él lamía tus senos al mismo tiempo que te penetraba. Repasó su lengua por tus sensibles pezones y segundos después los mordisqueó un poco.

Su miembro entraba y salía, la velocidad aumentaba. A tu pareja le encantaba ver tu rostro placentero. Tus ojos bien abiertos, al igual que tus piernas. Tus labios entrecerrados con varias mordidas. Tu cabello revuelto y ligeramente esparcido por tu rostro.

Admiraste a tu novio. De verdad se estaba esforzando por darte una hermosa experiencia, era la primera vez para ambos y no sería la última, eso estaba asegurado. Al llegar al orgasmo lo abrazaste por el cuello gimiendo.

—Acuéstate en la cama. — Pediste con un tono dulce.

El nombrado se tiró en la cama y te subiste en su regazo. Jugaste con su miembro subiendo y bajando la longitud, pasándolo por tus muslos viendo sus propias acciones con las cejas bajas.

Te penetraste y acariciaste el torso formado de Gappy, moviste tus caderas de arriba a abajo. El chico te tomó del trasero encajando sus uñas cuando comenzaste a saltar. El ágil movimiento provocó que él gimiera. El placer que le estabas dando era demasiado, un nudo se formó en su vientre, un nudo que parecía a punto de explotar.

—No grites tan fuerte, precioso. Los vecinos te van a oír. — Diste una sonrisa socarrona encima de él. Esto solo era el inicio de la noche.