Entre Especies

Capítulo 44

La estación de esquí a pesar de estar situada cerca del pequeño pueblo de Lefton, era la más grande de todo Clearwood, esto era algo beneficioso para el pueblo ya que durante el invierno sus hoteles y posadas se llenaban gracias a los turistas que venían a esquiar. Y, según nos contó Roxlin, era la segunda estación de esquí más importante de Akrampia, nuestro país.

Me sorprendió el coche de Roxlin, tenía siete plazas y por suerte cabíamos todos en el. Jade estuvo de copiloto para indicarle a nuestro amigo por dónde debía ir en todo momento, mientras tanto el resto nos dedicamos a mirar el paisaje o en el caso de Hope, a hacer fotos de cualquier momento.

–¿Es necesario que hagas tantas fotos? –le preguntó Ross, quién estaba sentado a su lado.

–Sí. Además, el hacer tantas fotos significa que puedo llenar mi álbum y el de Kaira, así tendrá más recuerdos con todos nosotros. –respondió Hope con emoción y le tomó una foto a Ross, él sonrió con cariño mientras la veía emocionarse al ver la foto.

El resto del viaje paró relativamente rápido. Ross y Hope hablaban sobre las fotos que habían hecho, Jade estaba pendiente del mapa, Roxlin conducía bajo las indicaciones que Jade le indicaba y Alicia hablaba con Kaira sobre el esquí, y de como iba a ser su primera vez esquiando. Por mi parte me entretuve con el móvil buscando información del sitio al que íbamos, siempre me daba curiosidad sobre adónde iba y terminaba informándome sobre todo lo relacionado con el lugar, al cabo de los siglos se convirtió en uno de mis hobbies favoritos.

–¿Qué estás leyendo, Elnora? –alcé la vista observando como Alicia y Kaira me veían con curiosidad. También noté como todos parecían haber cortado sus conversaciones para centrarse en mí, algo que me incomodó y decidí responder.

–Información sobre la estación de esquí a la que vamos, me gusta estar informada.

–No sabía que te gustaba investigar sobre los lugares a los que vas. –dijo Hope bastante sorprendida por el descubrimiento.

–No habíais preguntado.

–¿Y qué dice? –me preguntó Kaira con interés, y le sonreí con cariño.

–Dice que está situada en el Parque Nacional de Lefton, tiene una longitud esquiable de ciento diez kilómetros y posee dos cintas transportadoras, dieciocho telesillas, dos telecabinas y un telesquí. Además, cuenta con un bar y con un spa.

–No está mal, suena bien. –dijo Jade mirándonos a través del retrovisor interno del coche.

–¡Tengo muchas ganas! –exclamó Alicia con emoción.

Alrededor de las nueve o nueve y media llegamos a la estación de esquí, y al salir del coche pude ver a Alicia abrazarse a sí misma para entrar en calor, señal de que el frío hizo acto de presencia para dejar claro en dónde nos encontrábamos. Seguimos a Roxlin hacia el bar dónde se encontraba la oficina, una vez allí nos preguntaron si queríamos que un instructor viniera con nosotros para enseñarnos o preferíamos ir por libre, y después de discutirlo decidimos ir por libre.

Después de que la chica nos explicara dónde se encontraba cada lugar de la estación de esquí nos dirigimos a una sala dónde se encontraban todos los esquís para que pudiéramos alquilarlos, y una vez los elegimos nos fuimos al exterior para empezar con el día. Según nos contó la chica, la estación de esquí estaba abierta hasta las ocho de la tarde, hora en la que el sol se escondía para dar paso a la noche, y debido a la mala visibilidad preferían cerrar la estación para que no hubiera ningún tipo de accidente.

Por suerte nosotros teníamos la sala de patinaje sobre hielo alquilada sólo para nosotros a media tarde, por lo que el cierre de la estación no nos perjudicaba en ningún aspecto. Una vez todos nos colocamos los esquís nos acercamos con cuidado hasta la cinta de transporte la cuál nos subiría a lo alto de la pequeña montaña para deslizarnos, más tarde acordamos de subir a lo alto para bajar pero por ahora preferíamos estar en la zona baja de la montaña.