Eran las ocho de la noche ya era hora de irnos, llevaba puesto un vestido largo color negro y alado estaba abierto me puse unas zapatillas negras y que bien me miraba en este, sabría que a Tom le iba a gustar.
Ahora me encontraba en mi habitación maquillando a la estúpida de Carla ella también tenía que ir presentable y no como una sucia y apestosa zorra.
—Listo ya vámonos— le dije mientras aguardaba una cosas. Ella no dijo nada y solo se levantó para agarrar su bolsa.
Puse los ojos en blanco y la empujé para que saliera de la habitación, ella bajó primero pero antes regresé a mi habitación y tomé una arma y la eché en mi bolsa, quién sabe qué va a pasar esta noche.
—Por fin bajan—dijo Marlon.
—¿Por qué estás tan arreglado?—le pregunté.
—Voy a ir contigo—
—No, no lo harás te quedarás aquí —le dije en una voz demandante.
—Que ¿Por qué—
—Cállate o si no te arranco esa puta lengua—lo amenace después de eso ya no abrió la boca.
Unos de mi guardaespaldas nos abrió la puerta, salí pero la estúpida de Carla no se apuraba.
—Vamos zorrita que se nos hace tarde—subí a la camioneta blindada, ella subió después de mi evitando mi mirada.
Durante el camino me había llegado un mensaje de Tom diciendo que ya había llegado, un poco temprano, le contesté a Tom en eso me llegó un mensaje del guardaespaldas, el también había llegado, perfecto.
Después de unos minutos ya habíamos llegado nosotras también salimos de la camioneta, ahí estaba Tom y el guardaespaldas parados en la puerta.
Puedo notar como Tom me mistaba de arriba a abajo lamiéndose los labios, carajo quería follar con el, tal vez después de la cena.
—Hola caballeros—les sonreí ha ambos.
—¿Carla— hablo Tom.
—Tom por Dios—Carla corrió hacia Tom pero antes de que pudiera llegar a él alcance agarrarle el brazo y la jale.
—No —digo— Ahora vamos que nos esperan con nuestra comida— sonreí.
—¿Que es esto— preguntó el guardaespaldas pero lo ignoré y seguí caminando al cuarto donde estaba toda la comida.
—Por favor siéntense—señale con mis manos, los tres se miraron.— Siéntense, ! Ahora¡—casi grité se asustaron y se sentaron— Gracias—
—¿Por qué estamos todos aquí?— preguntó Tom, me levante de mi silla y camine a donde estaba el.
Me puse detrás de él y subí mi mano por todo su brazo lentamente pude notar como se tensaba, me acerqué hacia su oído.
—Dios te vez tan sexy en este traje —dije en una voz seductora
—No le digas —eso habló Carla
—¡Cállate zorra!— tragó saliva y volvió su mirada al piso, volví a la posición que estaba antes con Tom. — Ya verás porque los tengo aquí...—sonreí—Tom— dije casi en un gemido, quería provocarlo. Regresé a mi lugar y me senté, }
Y ahora comencemos con mi plan...
