Capítulo 19

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24 de enero de 2021

- ¿No olvidas nada?

- No, creo que no, a ver un chequeo mental de todo lo que debo llevar. Pantalones, si, camisetas, si, abrigos, si, zapatos, dos pares, sandalias, si, ropa interior, bastante – me reí – cepillo de dientes, peine, loción, perfume, desodorante, crema de peinar, accesorios, crema de cuerpo, todo sí.

- Tu cargador del celular

- Si cierto, eso se me olvida, gracias Gofie

- ¿Tus otros dispositivos? ¿Tu libreta especial donde tomas notas?

- Si todo va ya.

- Ya sé qué te falta!... ¡yo!!!! – Se rio con un poco de vergüenza

- No te llevo porque no me cabes en la maleta, pero créeme que quisiera que vinieras con nosotros.

- Disfrútalo, has luchado mucho por esto, estoy más que seguro que formar parte de este proyecto los pondrá en la mira de muchos.

- Que así sea... ¿vendrás conmigo al aeropuerto verdad?

- Si, por nada del mundo dejaría irte sin estar ahí. Si ya tienes todo listo vámonos, sino se te hará tarde.

- Vamos – salimos de mi departamento directo al aeropuerto. Al llegar los chicos ya estaban ahí, aunque todavía faltaba un poco de tiempo para abordar. Gof saludó a todos los chicos y les deseó mucha suerte para el viaje. Nos quedamos platicando y riendo, cuando se nos acercó personal de la empresa que iba con nosotros acompañados de Jungkook y su chica. No podía negar que aquello me dolía, pero debía ser fuerte y tratar de superarlo.

- Buenas tardes – dijo dirigiéndose en general a todos – espero que todo les salga bien, yo estaré viajando para encontrarme con ustedes algunos días, no puedo ir todo el tiempo debido a actividades de la empresa. Quiero presentarles a Lisa, ella será el rostro femenino de la campaña, no los podrá acompañar a las grabaciones, pero si realizaremos sesiones de fotos con ella donde se incluirá la música de la campaña – quería morirme – así que bueno, nos vemos en unos días en Busan.

Todos hicimos una reverencia para saludarla, ella solo medio se inclinó y se aferró al brazo de Jungkook sin darnos mayor importancia. Él la abrazó por la cintura, mientras le hablaba al oído, en ese momento me di cuenta que estaba viéndolos demasiado y Jungkook ya me había dicho que no los viera, ni a él ni a ella. Volví a ver a otro lado queriendo demostrar entereza, pero Gof me conoce bien, tomó mi mano y me acercó a él, me llevó un poco lejos de los demás y nos sentamos juntos.

- ¿Estás bien?

- No Gofie, pero creo que él ha dejado muy en claro todo, ya no debo pensar en él, no debo sentirme de ninguna manera, simplemente apartarlo de mí y estoy esforzándome.

- Si gustas, cuando te des cuenta que estás pensando mucho en él o te sientas mal por algo que tenga que ver con él, llámame, búscame y yo te ayudaré a pensar en otra cosa

- Que buena idea, te tomaré la palabra, aunque después no te quejes que no te dejo en paz – ambos reímos. Luego nos miramos a los ojos y los nervios se apoderaron de mí, él tenía ojos tan bonitos, tan profundos y sinceros que me podía perder ahí, así que intenté bajar la mirada para no ruborizarme, él lo notó y tomó mi mentón para hacerme volver a verlo.

- Eres hermoso Tae, tú... me gustas, sé que tú no quieres nada con nadie y no es mi intención ponerte incómodo o ejercer presión, solo quiero que sepas cómo me siento, sin obligación de corresponderme en nada – mi corazón estaba acelerado, podía sentir la fuerza de las pulsaciones resonar en todo mi cuerpo – simplemente quiero que sepas que me gustas mucho y que siempre estaré para ti, quiero que seas feliz y que todo te salga bien – se acercó y me besó en la mejilla, luego nuestras miradas conectaron y nos acercamos un tanto más.

- ¡Kim Taehyung! – Jungkook me estaba llamando otra vez, parecía que no podía dejarme en paz.

- Dígame sr. Jeon – dije con un poco de molestia

- Ya van a abordar, apúrate – se quedó ahí, parado esperando que yo me fuera.

- Que te vaya bien Taehyungie, te deseo lo mejor – me acercó y me aprisionó fuerte a entre sus brazos – te voy a extrañar.

- Yo también Gofie, te estaré escribiendo, gracias por todo – levanté mi rostro mientras seguía abrazando a Gof y Jungkook nos miraba con su singular mirada de "te voy a matar", pero ya no importaba, él no tenía más derechos conmigo. Tomé de la mano a Gof para que se despidiera de los chicos y luego, nos fuimos para abordar. Jin me tomó de la espalda evitando que volviera a ver, porque la verdad es que quería ver a Jungkook, en el fondo de mi corazón aún quería darle una última mirada, pero Jin me dio fuerza para no hacerlo y eso estuvo bien.

Llegamos a Busan y nos acomodamos, el lugar era hermoso y tenía una vista fenomenal, recorrí el alojamiento y encontré un pequeño estudio en la segunda planta que tenía un enorme ventanal, corrí las cortinas y se veía asombroso desde ahí, en ese momento supe que ese sería el lugar donde me sentaría a escribir, tenía tantas cosas que decir y ese lugar realmente era inspirador.

Serían semanas arduas, de mucho trabajo y mucha inspiración, estaba listo para empezar, esperaba que toda la sensibilidad que había en ese momento dentro de mí, me ayudara a crear letras hermosas para esos hermosos lugares. Había tantas historias escondidas en aquellos paisajes, tantas lágrimas y risas, tantas esperanzas y desilusiones, quería que las canciones para el proyecto no fueran simples jingles publicitarios, realmente quería abrir el corazón y la mente de las personas para que descubrieran lo hermoso que es Corea y las mil y una experiencias que podían vivir. Quería crear música que viviera por siempre y no que cambiara con la siguiente campaña publicitaria. Estaba listo.

Diario de un corazón rotoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora