Capitulo 12 - Reencuentro

273 21 1
                                    

No planeaba irme bien para conquistarlo ni mucho menos recuperarlo. Me iré lo más básica posible, una remera negra, una pantalona, zapatillas Adidas y una campera para no sufrir con el frío. Nada de maquillaje y un poco de perfume. Pelo recogido dejando dos mechones adelante y estoy lista. No estaba para nada emocionada, simplemente quiero que se vaya de mi vida y no verlo nunca más.

"Estoy abajo." Recibí un mensaje de Aaron.

Llegó una hora antes como dijo. Me coloqué nuevamente el abrigo y bajé.

—Hola.—Saludé.

—Hola.

—¿Cómo ha terminado la reunión?

—No entiendo cómo los soportas.—Respondió.

Me reí.

Estábamos a un par de calles del restaurante y Aaron me explicó lo que vamos a hacer:

—Estaremos en llamada, voy a escuchar todo y  me voy a aparcar en un lugar donde ustedes sean visibles para mis ojos.

Eso me parece una exageración y le daré mi humilde opinión.

—¿No es demaciado? Estás actuando como típico tóxico cuando ni estamos en una relación.—Soy una adulta y puedo manejar sola mi vida sin tener un hombre a mis espaldas.

—Mira Aurora, me da igual si estamos en una relación o no. Nos acostamos y eso ya es bastante. Tu me gustas y lo sabes, pero aún así quiero estar pendiente de todo. No sabes cómo puede actuar Alek después de todo ésto.—Su mirada hacía ponerme nerviosa.

Le gusto...no me lo esperaba. Su idea no me gustaba en lo absoluto pero accedí.

Me bajé unas dos calles antes y Aaron avanzó.

Estaba nerviosa, es algo inegable. Mis uñas parecían taladros de tanto presionarlas en mi palma. Esto recién inicia y tal vez termine dentro de horas.  

Ví a Alek desde lejos, su pelo rubio llamativo que nunca se oscureció y su altura que no llega a superar la de Aaron. Traía una remera negra suelta y unos jeans oscuros no apretados.

Mi corazón iba tan rápido que era imposible contar las palpitaciones, no es por amor la rapidez si no que por otra cosa.

Intentó darme un beso en la mejilla pero me alejé y sin decir una sola palabra nos sentamos junto a la ventana, como me indicó Aaron.

—Que bueno estar finalmente solos sin el idiota de tu jefe.—Se digno a decir para matar al silencio.

Lo peor de todo esto es que Aaron estaba escuchando y vigilando cada uno de nuestros movimientos.

—Que bueno estar finalmente solos sin la idiota de tu nueva novia.—Lo callé y defendí a Aaron.

—¿Ahora se defienden? Todos los putos días venías enojada por él, ¡lo insultabás hasta en italiano!

Es verdad, Aaron ahora se enteró, UPS.

—Sí cambié la opinión de su persona no es de tu incumbencia. ¿Pero sabes que es de mi incumbencia? ¿Por qué rayos te atreviste a engañarme?

Interrumpió la mesera preguntándonos que queríamos para esta noche. No pensaba comer junto a él, simplemente voy a pedir el vino más barato tristemente para ambos.

—No sé Aurora. No sé que mierda paso conmigo y porque carajos lo hice.—Sonaba como una excusa segundos, no sé cómo haré para creerle después de todo esto—.Luego de echarme corté todo con ella. Tu eres la única mujer que amo, Aurora.

Cómo creer cada palabra de todo lo que dijo. Tú eres la única mujer que amo. Mentiras, todas mentiras. Un hombre que ama no engaña a su novia.

—¿Sabes Alek? No sé cómo creerte.—Estaba furiosa, gritaría pero si lo hago me terminarían echando antes de decir todo—. No sé a cuantas mujeres te has cogido y no me interesan, ¿pero como te atreves a amarme—simule unas comillas con mis dedos—luego de haberme engañado? Eso no es amor, eso es de hijo de puta.

—Lo sé, fuí un idiota y un verdadero hijo de puta. Me arrepiento, lloré cada vez que pensaba en tí y los momentos que pasamos juntos. Estoy arrepentido y quiero volver contigo, seré una mejor persona y no volveré a ser una mierda como lo he sido.

Me reí sin disimularlo, es difícil confiar en sus palabras, aunque lo intento se me hace difícil hacerlo.

—Creo que ya he escuchado lo sufiente.—Tomé la última gota de vino y me volví a poner el abrigo.

No pensaba pagar, ni aúnque yo lo haya pedido. Que pagué las consecuencias.

—¡Aurora!—Gritó desde lejos pero al alejarme  su voz desapareció.

Aaron estaba afuera, no era como quedamos pero si quiero ponerlo celoso es perfecto para mis siguientes movimientos.

Me imagino que Alek se habrá dado cuenta de su presencia y si es así es más que perfecto.

Él estaba parado con sus manos en sus bolsillos, mientras miraba distraído a los aires. Fuí corriendo hacía él y sin que se diera cuenta le corrí la cabeza para besarlo y él lo continuó, es cine sin haber pagado por las entradas.

_______________________________________________

Nota del autora ★

No olvides votar y dejar tu comentario !

Disfruten del siguiente capítulo...

Querido JefeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora