No sabía la reacción de Alek, pero estoy segura que su reacción fue la que esperaba. Luego Aaron me dejó de besar y colocó sus manos en mi trasero mirando fijamente a Alek pero no logré ver él gesto que hizo o la reacción de Alek, nunca me dió tanta satisfaccion poner celoso a alguien.
Al terminar mi plan nos fuimos al auto y nos reímos de la situación. Pero luego se puso serio al recordar mi terrorífica charla que tuve con mi ex.
-No pensaba bajar del auto pero lo último que te dijo me dieron ganas de dejarlo en el hospital como te lo advertí.
-Tampoco fue una mala decisión, mi plan de celos fue completada con éxitos.
Puso en marcha el auto y no se que tenía planeado hacer, pero que me lleve a dónde él quiera, hoy soy toda suya.
-¿Que tienes planeado?-Pregunté.
-llevarte a cenar y enseñarte a unas personas muy importantes para mí.
Y que sea una completa y no solo vino si es posible. Unas personas muy importantes para mí, mi curiosidad va a comer a mi cerebro toda la noche hasta que sea la hora de hacerlo.
Sonreí.
Verlo manejar es una adicción, sus ojos mirando a la carretera sin ser su distracción, presionando sus dientes para que su mandíbula se marque aún más o admirar sus manos grandes y dedos que con tal solo mirarlos me hace recordar a lo de hoy y lo que sucedió en la oficina, dónde inició todo. Miento, las mariposas salieron del capullo aquél día en mi departamento, dejando ese odio de lado y descubriendo a su persona verdadera.
Estábamos pasando por una calle no tan habitada, pero raramente esta llena de restaurantes y apenas te encuentras a cinco personas cenando allí.
Estacionó y nos bajamos. Si hubiese sabido de la cena no me hubiese vestido así de básica.
Era un restaurante chino, dios, hace cuánto tiempo no me siento en un lugar así, es un sueño.
Aquí en Londres hacen cinco grados y es imposible aguantar afuera sin congelarte, así que nos metimos adentro y disfrutamos del calor.
Un hombre de origen chino se nos acercó y nos ofreció el menú y con gusto aceptamos.
Yo pediré fideos chinos y Aaron dumplings chinos. Aaron extendió su mano para llamar la atención del mozo y ordenarlo cuanto antes.
-¿Quiénes son las personas importantes que mencionaste en el auto?
-Personas.-Que dato, no sabía.
-Ja, ja, ja. Que gracioso.-Puse la cara burlona y la manera en la que lo dije también.
-Los conocerás está noche, solo espera.
-Entonces...-Estaba formulando la pregunta y era necesaria hacerla porque si no no hablaremos en toda la cena-¿Qué tal si me hablas de tu familia?
-Tengo un hermano mayor. Me lleva cinco años.
Que raro, no mencionó a sus padres.
-Se llama Luke, no lo veo hace años y no me interesa hacerlo.-De la manera sería y seca como lo dijo me hace pensar que se detestan y la editorial tiene algo que ver...
-Que mal...yo soy hija unica y agradezco por ello.
-¿Te ha escrito Bruno?
-No. No me ha enviado los detalles.
-No te preocupes. No ha empezado nada, simplemente se adelantó en elegirte.
Asentí lentamente. Ya menos preocupada.
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Querido Jefe
RomanceAurora detesta a su jefe. Pero Aaron está obsesionado con ella. Es imposible que a ella le caiga bien. Pero es imposible resistirse a él.
