Capitulo 2: "Agradecimientos"

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Harry abrió los ojos, le costó unos segundos ver donde estaba, era la habitación antigua de Percy, la cual era ahora de él, al menos el tienpo que se quedaba con la familia Weasley. Se sentó en la cama y observó a su alrededor, en la silla del escritorio ropa usada que debía lavar, colgado en la percha de la puerta su uniforme escolera listo para ponerselo y a los pies de su cama el baúl de madera con todas sus cosas que llevaría a la escuela. Tomó una ducha lenta, aprovechando que era el último en usar el baño, se vistió y bajó a desayunar, a pesar de que tenía un nudo en el estomago de los nervios, al ver toda la comida que la señora Weasley preparó, se le hizo agua la boca.

-Vamos chicos, no querenos perder el tren- apuraba Hermione acompañada de Ginny, quien esperaba resignada, era costumbre esperar a los hombres de la casa.

Se escucharon 6 pies bajar apresurados las escaleras, eran el señor Weasley, Ron y Harry, el pelirrojo menor se quejaba de la poca paciencia de las mujeres hasta que apareció su madre y lo hizo callar.
-Ya vamonos, no pueden llegar tarde a su último primer día- rió Molly por el juego de palabras y empujó a todos a la chimenea para aparacerse cerca del andén 9 3/4.
Una vez llegaron a su destino, Molly amenazó con llorar, aludiendo que se sentía orgullosa de sus hijos, incluyendo a Harry y Hermione. Mientras los padres se despedían de Ginny, el trio dorado se dedicó a inspeccionar quién iba apareciendo, era notable la poca cantidad de estudiantes de su generación, sin duda serían un curso pequeño, Hermione creía que así las clases serían mejor, más tranquilas, Ron se quejaba de las pocas opciones para coquetear y el pelinegro se dedicaba a ver quienes seguían llegando.

Ahí estaba de nuevo, aquel olor tan conocido, Potter buscó con la mirada y ahí estaba, siendo abrazo cual niño por su madre, Narsissa lo llenaba de besos mientras el rubio no se oponía, parecía esperar que la tortura acabace sin molestar a su victimario.
-¿qué tanto miras?- le preguntó al oido Hermione, sabía perfectamente que miraba, mostró cierta preocupación por su amigo, pues no entendía que se traía con aquel rubio.
-no pensé que estudiaría último año, ya sabes- dudó en que decir el pelinegro -como ya es millonario-
-Pensé que dirías que no estudiaría por mortifago- se unió Ron a la conversación - La verdad es que no debería haber venido-
Harry se limitó a fruncirle el seño, aún después de que Malfoy le hubiese ayudado en un par de ocasiones y de demostrar que estaba siendo manipulado por su padre, Ron seguía repudiando al Malfoy menor. Por un lado era entendible, los había molestaro durante toda su estadía en Howgarts, pero había cambiado, aquel día en el ministerio se lo había demostrado a Harry.

_Flashback_
-Potter- llamó a sus espaldas Draco Malfoy, esperando lo peor se giró, se veía venir el enojo y los comentarios arribistas del rubio.
-Dime Malfoy- esperó de brazos cruzados lo que aquel alfa tenía para decir.
-Gracias- Harry puso cara de tonto, a lo que el rubio frunció el seño- Por testificar a favor de mi madre y también por mí- Harry estaba perplejo, aquel niño berrinchudo ya no estaba, era un hombre quien le pedía disculpas
-No te preocupes, era lo que tenía que hacer, ustedes me ayudaron, gracias a los dos- Respondió, Draco asintió y caminó de vuelta a la oficina de aurores donde su madre terminaba de hacer el papeleo de ambas audiencias.

_fin flasback_

Sin duda aquel acontecimiento removió algo en Harry, pero este no lo admitiría jamás.
Y como si el destino se quisiese reir de él, se dio cuenta de que una mujer venía muy decidida hacia él, Narsissa (ahora) Black.
-Buenos días Harry- saludó sonriente, pero a su vez tímida -quería robarte unos segunditos ¿podemos hablar?- Preguntó más decidida. Harry miró a sus amigos, pero fue en bano porque estaban igual o peor que él ante la situación.
-claro, vamos- comenzaron a caminar algo apartados, el omega buscó con la mirada a Draco, pero al parecer este estaba bastante ocupado hablando con Pansy y Blaise, que al parecer también estudiarian último año, como para darse cuenta de lo que estaba haciendo su madre.
-Quería pedirte disculpas por todo lo que hizo mi esposo, sabes como son los lazos, yo no podía oponerme, al final de cuentas era su omega y también intentaba proteger a mi hijo de su propio padre- La mujer miró a Draco, Harry la imitó. -También agradecerte por todo lo que hiciste por Draco, por testificar a su favor y darle la oportunidad de redimirse, él es buen chico, creeme, solo confiaba demaciado en el bastardo de su padre- Narsissa puso cara de asco ante lo último, por ultimo se giró de nuevo hacia Harry y lo miró a los ojos, parecía querer llorar, tomó sus hombros suavemente y sin pensarlo lo abrazó como una madre a su hijo. Potter quedó perplejo, sin corresponderlo, no porque no quisiera o porque odiase a la mujer, si no porque estaba bastante ocupado intentando decifrar que estaba pasando.
-No se preocupe Señora Black, no pienso que Malfoy sea malo, creo en lo que usted dice- Harry no mentía, le sonrió, un poco por lastima, la mujer pareció querer llorar y esta vez si se le escaparon un par de lagrimas.
-Dime narsissa cariño, de ahora en adelante cuenta conmigo para lo que necesites, te debo mucho- lo volvió a abrazar, esta vez fue más fugaz -Te devuelvo con tu familia, que tengas un buen año escolar- se despidió dejandolo atónito, jamás pensó que eso podría pasar.

Cuando llegó a donde sus amigos, estos abieron la boca con la intención de bombardearlo de preguntas cuando el tren comenzó a anunciar su salida, quedando con la palabra en la boca. Se despidieron de los señores Weasley, Molly abrazando y besando a cada uno de ellos lo más rápido que pudo y los empujó dando suavez toques en sus espaldas para que abordaran el tren.
-Que bueno estar de nuevo aquí, en el tren, camino a Howgarts- Dijo Luna entrando al compartimiento junto a Neville, el pelinegro se alegró de verlos y los invitó a sentarse. Ginny también se integró unos minutos después, y así el grupo se halló completo, nuevamente, todos con las mejores espectativas y la esperanza de un buen año.
-Voy a comprar dulces, ya vuelvo- Anunció el pelinegro saliendo del compartimiento. Caminó buscando el carrito de ventas, cuando lo encontró no estaba solo el carrito y el que vendía, si no que también Malfoy, "vaya suerte" pensó Harry, Aún no entendía porque el rubio lo ponía tan nervioso, su primera hipotesis, era porque era alfa, pero muchos de sus conocidos lo eran y no se ponía así con ellos.
-Potter- saludó primero. Harry lo miró, disimulando cualquier emoción.
-Hola Malfoy- saludó de vuelta, el alfa lo miró sin expresión alguna, y con leve moviento de cabeza en forma de despido, abandonó el carrito. El pelinegro compró y se devolvió pensativo.
- ¿qué con esa cara amigo?- preguntó riendo Ron.
-Malfoy me saludó, o sea me dijo mi apellido, ya saben "Potter" -imitó -fue raro, después se despidió con un gesto y se fue.
Ron quedó igual, Hermione en cambio fue la voz de la razón.
-Pronto seremos adultos, obviamente Malfoy en algún minuto tenía que madurar, deberían alegrarse de que ya no nos molestará más- dijo sin despegar la vista de su libro. Neville asintió de acuerdo con ella.
-Puede ser, bueno, una preocupación menos- Respondió Harry.
Y sin darse cuenta, Harry Potter estaba esperanzado, ¿de qué? no sabía, pero el que Draco hubiera sido cortez, le había apretado el corazón de una extraña manera.

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He aquí otro capitulo, espero les vaya gustando.
Aún no defino días especificos para actualizar, pero trataré de no dejar muchos días entre capitulo y capitulo.
Se despide, la autora.

Era de esperarse [Drarry]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora