¿Y si Darth Vader hubiera criado a Luke y Leia? ¿Y si Padme sólo hubiera estado en estado de coma? ¿Y si Obi Wan no hubiera sido tan fiel a la Orden Jedi como aparentaba y tuviera que saldar cuentas con su pasado? Todo esto y más en: Mi luz, tu fuer...
Al día siguiente, luego de las primeras horas de clase, finalmente llegó la hora del recreo, Luke había intentado evadir la promesa que le había hecho a su hermana, pero de poco o nada le sirvió, ya que Leia no dudó en buscarlo y llevarlo de la mano ella misma hasta la oficina de Natasha, una vez llegaron, Leia tocó la puerta.
-Adelante. -Se escuchó desde dentro.
-Buenas tardes señorita -dijo Leia.
Natasha se levantó de su escritorio al verla.
-Leia -saludó con un tono cariñoso antes de besarle la frente.
Luke las observó con sorpresa, definitivamente se tenían mucha confianza.
-Mire -dijo Leia jalando a Luke de la entrada donde se había quedado-, este introvertido de aquí, es mi hermano Luke.
Natasha al ver al niño de cerca:
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-Hola Luke -saludó Natasha.
-Hola -respondió Luke extrañado por el sentimentalismo de la mujer.
-Acércate, no te voy a morder -dijo Natasha.
-Bueno, los dejo para que hablen -dijo Leia antes de salir por la puerta sin dar chance de que Luke pudiera replicar.
Natasha se sentó en un pequeño sofá que estaba junto a su escritorio, y con una sonrisa, invitó a Luke a acompañarla. El chico se fue acercando lentamente hasta ocupar el lugar a su lado, una vez que estuvieron lado a lado, Natasha lo miró y le dijo...
-Estaba ansiosa por conocerte, tu hermana me habló mucho de ti -dijo Natasha.
-Por supuesto que lo hizo -dijo Luke poniendo los ojos en blanco-¿ qué tanto estuvo ventilando sobre mí?
-No seas tan duro con ella, no lo hizo con mala intención -dijo Natasha con dulzura.
-Puede ser, pero que pretenda que le cuente mis problemas a una completa desconocida ya es otra cosa -dijo Luke.
Natasha tragó el horrible nudo que se le había hecho en la garganta al escuchar eso y respondió...
-He hablado con tu hermana muchas veces, ella me ha confiado sus cosas, no tienes nada que temer, te prometo que lo que hablemos quedará sólo entre nosotros -dijo Natasha.
Luke suspiró, no sabía si debía de abrirse con ella o no, pero Leia confiaba en la profesora, y, por alguna razón, él se sentía seguro estando a su lado; finalmente, se decidió.
-Bueno, verá, todo comenzó...
Luke le contó a Natasha toda la historia de su vida, desde cómo era vivir con sus tíos, hasta cómo se había tomado las revelaciones de su padre.
-¿Hubo algo que te gustara hacer en Tatooine? -preguntó Natasha queriendo saber más de él.
-La verdad, me gustaba jugar a ser piloto, veía a las verdaderas naves partir junto a mis amigos -contó Luke.
