KIYOPON... ¿¡LATINOAMERICANO!?

V1.16. PLANES PARA LOS EXÁMENES

Volumen 1. Capítulo 16: Propuestas Indecentes por el Bien de la Clase.

- Matsushita Chiaki -

Cuando la campana que marca el final de clases sonó, me tomé mi tiempo para hablar de algunos cuantos temas con mis queridas amigas. Hacer este tipo de conexiones hacen que todo lo que pasó en el pasado, lo que me llevó a la decisión de venir aquí, haya valido la pena. Karuizawa-san y Satou-san son dos personas increíbles y me alegro poder pasar un rato con ellas. Su vida ha sido tan diferente a la mía, pero aún así somos bastante similares en algunas cosas y aspectos de la vida diaria.

Sin embargo, no solo estoy con ellas para pasarla bien y disfrutar de cada segundo, cosa que honestamente hago. Soy una persona curiosa por naturaleza, algo que me ha llevado a un sinfín de problemas de todo tipo, pero cuando hay algo que me llama la atención no puedo parar hasta descubrir todos sus misterios y lo que hay detrás de ello. Y estas dos chicas definitivamente han despertado mi interés por completo. Ambas ocultan bajo una llave de oro un secreto inquietante y que, en condiciones normales, las haría ser enemigas naturales; algo así como Leones y Antílopes luchando por la supervivencia y el dominio del lugar.

¿A qué me refiero con todo esto? Bueno, es fácil. Ninguna de los dos lo sabe porque de lo contrario no podrían ser amigas, pero ambas comparten similitudes en su pasado, pero en contextos distintos.

¿Aún no queda del todo claro? Por decirlo de alguna manera, ambas están más unidas de lo que creen, y de una forma muy extraña cuanto menos, todo por culpa del desagradable tema del Acoso Escolar.

El acoso escolar es algo que, en lo particular aunque no por experiencia, encuentro demasiado horrible y muy castigable. Tuve la suerte de nunca experimentarlo en carne propia, en ninguno de los dos bandos, sobre todo porque el estatus de mi familia en la sociedad es muy poderoso y eso me hace un blanco difícil, pero sí que he presenciado los horribles traumas que las personas que lo sufren pueden presentar y de las consecuencias que tiene en el comportamiento humano.

Tenía una amiga en la secundaria que, después de haber pasado por escenarios horribles y denunciables, nunca pudo funcionar como una persona normal por mucho que lo intentara disimular. Los reflejos condicionados, temblores ocasionales, mirada perdida, miedo extremo a las personas, todo eso aprendí que son síntomas de traumas relacionados con estos casos.

¿A qué voy con esto? Bueno, es difícil decirlo a primera vista y debo de darle un premio por esconderlo tan bien, pero Karuizawa Kei-san ha sufrido, en una gran medida que ni siquiera puedo comprender, de acoso escolar. Ella no me lo ha dicho explícitamente y dudo que se lo diga a alguna persona en su futuro, pero para una persona tan observadora y curiosa como yo, es demasiado obvio.

Kei-san es lo que la sociedad puede considerar una Gal en todo el sentido de la palabra. Una chica linda que se preocupa por su apariencia, el estatus, obsesionada con las modas del momento y que vive la vida sin preocuparse mucho por el futuro. Sin embargo, esto no es más que una fachada para ocultar su verdadera yo.

Es demasiado inexperta en algunos -y por algunos quiero decir varios- temas que toda autonombrada Gal se supone domina al derecho y al revés. Trata de disfrazarlo con historias de falsas experiencias, pero es bastante notorio que se inventa detalles sobre la marcha, tanto que en ocasiones tiene algunas incoherencias -apenas notables, pero incoherencias al final del día-.

Pero dejémosla a ella a un lado por el momento porque no quiero meterme mucho en su pasado y en lo mal que lo pasó. Ahora centrémonos en la chica que está al otro lado del espectro: Satou Maya-san.

Cualquier persona que viera en estos momentos a Maya-san pensaría que es una chica linda -mucho como para ser verdad-, pero que tiene un complejo de inferioridad muy marcado y cuya mayor característica es ser la perrita faldera de Kei-san. Pero, de nuevo, esto no es más que una fachada para ocultar su verdadero yo. Para decirlo de una forma simple, es la propia Satou-san quien elige ser vista de esa forma, como una simple subordinada a las órdenes de la líder del grupo.