La tensión en el camión donde se encontraba McQueen era bastante grande, estaba desconcentrado y triste. No sabía si era por todo lo que pueda ocurrir en la pista o porque no había recibido mensajes de su amado Francesco. Entendía que si necesitaba días para concentrarse, pero admitía que ocupaba al italiano para que lo apoyara, lo ocupaba, pero al mismo tiempo estaba contento de que estaría ahí con él, pero sentía que algo estaba mal; conocía a Francesco tanto físico, emocional y psicológico, ya que jamás le haría caso a McQueen y le seguiría mandando mensajes, Francesco nunca dejaría de marcarle o intentar comunicarse con él.
El americano solo pudo suspirar hasta que de una vez salió del camión a escondidas para ir al taller donde estaba su número y marca. Hasta que apareció Sterling atrás de él, pero no estaba solo. Tras de él se encontraba Miles Axerlord.Francesco apenas llegó al estadio con unas raspadas en su fórmula, pero no le importaba, saltó a seguridad con tal de llegar a los talleres dónde se posicionan los equipos, buscando con la mirada a su amado Lighting. Estaba desesperado, se le hacía tarde, si otra vez lo golpean no se perdonaría la vida. Vió el camión de Mack dónde rápidamente estacionó con fuerza para después dar un salto para salir y correr hacia los talleres como si fuese un conejo huyendo de un depredador.
Mack vió al novio de su jefe y quiso pararlo pero al parecer el italiano solo lo ignoró y siguió en su mundo. Francesco corrió y al ver a Miles Axerlord y a Sterling se abalanzó hacia Axerlord con un gran salto de tigre tumbándolo al suelo de forma brusca.—¿¡Qué mierda haces aquí!?—dijo Axerlord furioso.—¡Deberías estar muerto italiano de quinta!—
—¡Pues el plan de derrotar a Francesco acabó!—al terminar de hablar le lanzó un fuerte puñetazo a la cara del inglés para después ser agarrado por otras personas y estás eran las mismas ratas que lo habían capturado.
Para después llevárselo a otro rincón del lugar para no ser visto con otros competidores novatos.
Sterling vió esto, por suerte McQueen no escuchó por el ruido de unos motores que los aliados de Sterling hicieron para cubrir lo que haría. Antes de que Sterling le lanzará un puñetazo para acabar otra vez con la memoria de McQueen... Este volteó en lo cual tuvo que reaccionar ante todo para cubrir que no lo quería golpear con fuerza.—¿Señor Sterling...?—dijo McQueen con confusión.
Sterling, haciendo una mueca de alegría falsa alzó sus brazos como si fuera a dar un abrazo.
—¡McQueen! Qué bueno que te encontré, estaba a punto de darte la buena suerte en la competencia, ya sabes... Si no ganas tendrás que hacer comerciales, darás una buena cara al público aunque no compitas de nuevo.—dijo con una sonrisa alegre, muy falsa para ser verdad.
—Señor Sterling ya lo hablamos... Voy a ganar sea como sea...—dijo el rubio seguro.
—Eso espero... Ya sabes que tenemos un trato, espero y... Te cuides mucho en la carrera, no quiero que mi corredor estrella de Rustize sufra otro problema.—dijo acercándose un poco hacia el rubio.
McQueen sintió algo de incomodidad, y mucha sospecha, pero decidió dejarlo pasar para después asentir y estrechar la mano de Sterling. Después de eso salió con paso seguro, vio a Sally cerca de las entradas de talleres y caminó hacia ella.
—¡Hola letritas!...—dijo felíz, para después borrar su sonrisa al ver al rubio algo serio y desanimado.
—Hola Sally...—dijo tratando de hacer una pequeña sonrisa.
—¿Estás bien?—dijo la castaña ojiverde.
—Estoy bien, solo que... No, no pasa nada... ¿Está Francesco?—dijo algo ilusionado.
Sally respiró hondo y le dió una sonrisa calmada, jura por su vida que iba a soltar todo lo que le había pasado al moreno italiano, pero tomó la compostura y prosiguió.
ESTÁS LEYENDO
Francesco x McQueen| amore e ricordi
RomanceTodo ocurre en un accidente, cuando McQueen estaba compitiendo contra Storm, teniendo un accidente, ocasionando la perdida de memoria de McQueen, quién tenía una relación con Francesco después del gran Prix Mundial. Francesco hará lo posible para re...