Cap. 6 Recuerdos del pasado... (parte 1)

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Era un gran otoño del 2011, el gran Prix era un aviso grande para Francesco, había pasado por victorias grandes en su país natal y por el mundo, y el Prix quería sacar su más grande e increíble potencial en las carreras, siempre se decía a él mismo que ganaría todas esas pistas, más de 60 vueltas completadas rápidamente por él... Francesco Bernoulli.

Estaba tan metido en ese pensamiento mientras veía como su teléfono sonaba y vibraba, con la flojera más grande que tuvo agarró su teléfono y vió una notificación de un entrevistador americano, Mel Dorado, una entrevista sobre sus invitaciones al gran prix, que iba a hacer para beneficiar con el Allinol, etc, etc... A Francesco le interesaban bien las entrevistas, si hablaban más de él, su ego crece de más, aceptó la entrevista con la condición de que sería entrevistado desde los canales de Roma Italia.
Se acostó de forma satisfactoria a su cama matrimonial, demasiado grande solo para él. Francesco hizo una mueca de aburrimiento y empezó a acomodarse su pijama ajustada mientras buscaba el control de su pantalla grande, no sabría que encontrar en la tele, lo que quería era distraerse, si, será millonario, hermoso y de un carácter egocéntrico y único, pero no tenía compañía en su gran mansión. Estaba lejos de su verdadera casa, de su amada madre.

Quería llamar a su madre de golpe, pero después recordó que acababa de llamarla hace una hora para ver cómo estaba, su madre le había dicho que estaba bien y que se cuidara, que su hermano lo cuidaría en las próximas carreras y que le fuera bien en las carreras. Francesco se sentó de golpe en la cama, sin ninguna idea cruzando por su cabeza, la tele empezó a sonar fuerte por los gritos que se daba en una competencia de carreras, vio al Rayo McQueen, al gran novato que cambió en solo una semana y que decidió no ganar para ayudar a uno de las grandes leyendas de las carreras profesionales....

Francesco se quedó mirando esa temporada en la que él sin ninguna dificultad atravesó todos esos corredores así ganando la famosa copa pistón... El italiano sonreía de una manera extrañamente satisfactoria, era la primera vez que alguien le llamaba mucho la atención, ni siquiera las amantes que tenía cada noche lo hacían sentir... Que lo atrajeran.
Se quedó mirando la competencia completa, no parpadeó, solo miraba como McQueen superaba a todos con solo pocas velocidades de arranque y siempre era el líder de la gran fila de autos que trataban de revasarlo. Francesco se cruzó de brazos mientras miraba con atención, era algo curioso, tenía ganas de verlo.

El italiano se arregló su copete, sus piercings y su gran traje de gala para parecer presentable en la entrevista, solo serían veinte minutos, pero quería verse elegante para todos. Empezó a acomodarse en la silla y los maquillistas estaban a su alrededor como moscas, cubriendo su cara con algo de maquillaje para parecer un poco natural y elegante.
Una mujer no paraba de coquetearlo mientras lo maquillaba, al cabo de que ya casi comenzara la entrevista, Francesco solo le dió un par de coqueteos, los hizo de la forma más natural y coqueta pasible. Mel habló y Francesco saludó de forma agradable al entrevistador Dorado.

La entrevista hacia Miles seguía, luego llegó el tema de el Rayo McQueen, de que decidió tomar un leve descanso por su larga temporada de carreras, en el interior de Francesco estaba molesto, pero su ego lo ganó diciendo cosas hirientes, pero sin antes alardear que él era el mejor, que no le ganaría y ni siquiera llegarle a los talones.
Hasta que alguien llamó, defendiendo a McQueen, Francesco se sintió algo poderoso, peleando con ese muchacho que quería defender a toda costa a ese tal... “Rayo McQueen” antes pensaba que era un gran fanático de este nada más, pero al parecer alardeaba de más haciendo que Francesco casi perdiera la paciencia, pero por alguna extraña razón le encantaba pelearse con él, pero de repente.... ¡¡Puff!! Un McQueen siendo amable contesta el teléfono, sorprendiendo a Francesco que al parecer le encantó que contestará el teléfono.

McQueen: Eh si... Hola soy el Rayo McQueen...

Francesco: El Rayo McQueen ¡¿eh?! -un poco contento-

McQueen: No me agrada que hablen de esa forma a mi mejor amigo... -sonando amable-

Francesco x McQueen| amore e ricordiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora