En el año siempre había un día especial y para muchos era diferente pero para mi, este era mi cumpleaños.
A pesar de que era un año más donde tendrías que madurar, crecer y aprender de muchas cosas, siempre trataba de verle el lado positivo, hubo muchos donde no los valoraba del todo, pero aprendí que a pesar de eso siempre hay algo bueno o de provecho que estos me brindan.
La pasaba con amigos, familia y podía comer sin dudarlo.
Tenía que admitirlo, amo que me regalen cosas, de todo en general, pero el dinero nunca le iba mal a nadie, era algo que valoraba de las personas que me lo regalaban, apreciaba mucho los detalles y más que nada el esfuerzo y tiempo que tomaban.
Aunque al momento de abrir los ojos y analizar que era mi cumpleaños, me inundaba la flojera y solamente quería quedarme tirada en mi cama sin nada que hacer, pero eso era más que imposible.
— shhh — dije cubriéndome con la almohada —
— vamos linda, hay mucho que hacer el día de hoy — Max a mi costado dando todo de sí para poder convencerme a levantarme de la cama —
— no quiero — asegure girándome —
— yo sé que si quieres cariño — sentí su mano en mi estómago provocando que riera ante aquello —
— está bien, ya, está bien — decía cómo podía teniendo la risa a un nivel increíble de intensidad —
— anda linda, que el día va empezando — para estas palabras me levante quedando sentada y tallando mis ojos para aclarar mi vista —
Al momento en que pude ver a mi alrededor estaba realmente impresionada por todo lo que había pasado mientras estaba dormida.
Mi habitación llena de mis flores favoritas, peonias, de mucha variedad, en diferentes tonos y colores, estaba encantada, no iba a tardar mucho en detectar el olor clásico de estas, se presenciaba rápido.
Entre todas las flores el estaba ahí, también con su pijama, con una enorme sonrisa en su rostro.
Esperándome a que me acercara.
Me levante y fui corriendo hacia el directamente, me aválense provocando que mis piernas abrazaran su cintura y me sostenía por la cintura.
— oh cariño — mire a mi alrededor —
— no lo digas preciosa, no es necesario que digas nada — beso mi cuello y yo reí pasando mis manos por su cabello para despeinarlo —
— no era necesario tanto — ante mis palabras el negó varias veces —
— eres el amor de mi vida Athena, daría lo que fuera para siempre verte feliz y esto es lo mínimo que mereces — sonreí de lado mientras lo miraba directamente a sus destacados ojos azules —
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Catarsis - Max Verstappen ୧-₊˚
FanfictionAthena es una modelo griega la cual tiene un hermano menor Theo, siempre han sido solamente ellos dos, ya que desde la muerte de su madre la chica veía por ambos, era hija de él mismo Toto Wolff pero su relación no era la mejor. Max Verstappen pilo...