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RECTA FINAL 

— ¡Buenos días! - grita Bruno entrando a la habitación

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— ¡Buenos días! - grita Bruno entrando a la habitación

Sonrió al ver a Thiago hacer una mueca y acomodarse mejor en la cama, para seguir durmiendo, pero Bruno, que no se da por vencido, salta sobre su papá, escucho a Thiago quejarse 

—Es muy temprano Bruno, no tiene nada de buenos días - mi hijo lo mira como si estuviera loco 

—Papá, no seas flojo - dice mientras se hace hueco en medio de nosotros, se coloca de costado y me mira - Mami, buen día 

—Buen día, amor mío - digo y le soy un beso en la mejilla

Él se acerca más a mí acurrucándose a mi lado, Bruno era un niño al que no le gustaban mucho las muestras de cariño, era un poco seco, pero cuando se trataba de mí, siempre se dejaba abrazar, besar, siempre me dejaba hacerle alguna muestra de cariño y nunca se quejaba, señal de que le gustaba que fuera asi con él. Lo abrazo mientras le doy unas pequeñas palmadas en la espalda, como cunado era bebe, él cierra los ojos y comienzo a sentir su respiración cada vez más tranquila 

—¿Se durmió? - dice Thiago susurrando

—Creo que sí, digo mientras le doy un beso en la cabeza a Bruno 

—Que lindo linda esta imagen - sonrió y asiento 

—Quisiera que toda la vida fuera asi de chiquito - digo mirando más a detalle a Bruno 

—Veo que últimamente estás más cariñosa con él ¿Pasa algo? - niego 

—No, solo que me he puesto a pensar mucho últimamente, dentro de cuatro meses voy a ser mamá por segunda vez, Bruno ya no va a ser el bebé de la casa, el único y no quiero que se sienta desplazado... Quiero aprovechar todo el tiempo que me sea posible, para demostrarle lo mucho que lo amo   

—Yo no creo que el amor por los hijos sea diferente, a todos los amamos por igual - sonrió y asiento 

—Puede ser, pero... Yo sé que vos no lo sabes por qué aún no lo has vivido. Pero un bebé requiere de mucho tiempo, requiere de una vigilancia de 24/7, muchos cuidados. Y es por eso que pienso aprovechas que ahorita solo es Bruno, para que sepa que lo amo y aunque voy a tratar de la atención no la acapare el bebé

—Te preocupa mucho eso ¿No? 

—Claro que me preocupa

—Sé que Bruno es muy inteligente y sé que él entenderá que un bebe, como dices, requiere de mucho cuidado. Los dos nos encargaremos de que él no se sienta desplazado y que entienda que hay amor para los dos.  

—Además, jamás sentiría celos de mi hermanita, mamá - dice Bruno sorprendiéndolos a los dos - Yo sé que es chiquita e indefensa y necesita de muchos cuidados. Todos debemos de cuidarla. 

Una vez másDonde viven las historias. Descúbrelo ahora