Capítulo 28

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Max estaba decidido a no dejar que el futuro estuviera determinado por su papá, esta vez no caería en sus trampas. Por supuesto que el encuentro accidental con Nadine era obra suya, recordó aquél día que intentó presentarle a una chica en Abu Dabi, todo había salido mal y esta vez no iba a ser la excepción. Estaba dispuesto a enfrentarlo. 

Joe había citado a Max para jugar golf, según él era bueno para romper la rutina y relajarse un poco, Max odiaba golf. Las primeras horas jugaron solitariamente, el campo era bastante grande y el silencio reinaba en la mayoría de los momentos, en ocasiones Joe felicitaba a Max por su buen tiro y Max hablaba de lo encantador que estaba el clima, en realidad no, se estaban congelando. 

—Oye acerca de aquella noche—Max se llevó la mano al cuello pensando en sus próximas palabras— creo que debemos hablar sobre ciertos temas. 

—¿Lo has pensando mejor?—Joe dejó una bola de golf y se acomodó para hacer el mejor tiro posible, Max no entendía mucho el golf y lo veía con confusión.

Max se colocó a su lado buscando llamar su atención, era importante lo que iba a decir.

—No voy a salir con ella—Max tragó saliva con dificultad, era difícil enfrentarse a su papá—Ni con nadie. 

Joe soltó el tiro lo más fuerte que pudo y la bola salió volando a varios kilómetros lejos de ellos, Max sintió como si el fuera la bola que Joe había golpeado con enojó.  

—No estás pensando bien Max Emilian—lo vio directamente a los ojos. 

Quería decirle que lo estaba pensando bien, que tenía a alguien que lo hacía muy feliz, pero si lo hacía la próxima cosa que Joe golpeara no iba a ser la bola de golf. 

—¡Cómo no lo voy a estar pensando bien! Es mi vida se perfectamente lo que hago—Max perdió la calma en cuanto escuchó su nombre completo, solo Checo lo llamaba así y significaba cosas buenas, en cambio con Joe era regaño seguro. 

—Deja de gritar—ante todo el enojo, Joe no parecía tener emociones—Claro que no sabes lo que haces, si supieras ya estarías en una relación seria.

Bueno ya lo estaba, solo que era complicado.

—¿Y eso en qué afecta a alguien?—Max movía las manos enojado—Soy tres veces campeón del mundo y a ti solo te preocupa que tenga novia. 

—Cuidado con la soberbia—Joe apuntó con un dedo a Max en modo de regaño—no me interesa que tengas novia, lo que me interesa es tu imagen pública, ¿Planeas quedarte soltero hasta los 40? ¿Crees que eso le interesa a los medios? 

Claro, todo era negocios para Joe. 

—Prefiero estar soltero a ser manipulado por ti. 

Joe soltó una risa desdichada.

—No soy el malo aquí.—dijo Joe, pero Max podía sentir la mentira—Te recuerdo que llevo mucho más tiempo que tu en esto, se todo. 

Y era verdad, Joe tenía un pasado como piloto en formula 1, no había sido el mejor de sus tiempos pero eso no le quitaba la experiencia, una vez más, varias cosas que Max sabía era gracias a él. No podía negarlo, pero tampoco podía dejar de lado su impotencia por ver como Joe moldeaba los aspecto más mininos de su vida. 

—Solo déjame solo, ya te di lo que querías.

A decir verdad la relación entre ellos se había debilitado desde ese primer campeonato de Max, poco a poco tenían más roces y Max ya no era tan fácil de controlar, a medida que avanzaba el tiempo se distanciaban más y se veía que a Joe le dolía.

—Pero somos un equipo.

—Quizá este equipo debería separarse. 

Max se subió al carro de golf y por más que quisiera dejar a Joe tirado a medio campo debía esperarlo hasta que subiera con él. El amor que le tenía a Joe era único, después de todo era su papá, pero sentía que era hora de marcar límites, diferenciar la formula 1 de su relación padre e hijo. Pero mientras más pasaba el tiempo, Joe se aferraba más a la idea de seguir gestionando la carrera de piloto de su hijo. 

Fine Line || Chestappen F1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora