(Recomiendo comenzar a escuchar la cancion en la escena del primer baile, ya que es como me la imagino. Quizas les sirva para entrar más en la situacion <3)
Hace muchos, muchos años.
Jake Williams
No lloré porque no sabia como hacerlo, pero de saberlo hubiera llorado como un niño. Quizás fue que estaba ya emocionado de todo lo que estaba ocurriendo y la película añadió otra cebolla para que me picaran los ojos. Si es que esa metáfora tiene sentido.
Las almas gemelas, el amor verdadero, temas que hacía unos años me pasaban por el costado. Pero desde que había conocido a Moon la pregunta del amor era más frecuente. La película hablaba sobre el amor en general. Tres historias de las mismas almas.
Dos amigos, una pareja y un padre y una hija. Todas tenían similitudes y siempre podías darte cuenta que alma era de quien, como si algo de su personalidad estuviera ahí, incluso con tantos años de diferencia y habiendo nacido en otro país.
La película terminó con la muerte del padre y a los pocos segundos el nacimiento de un bebé en una casa. Como una puerta abierta. La pregunta de cuál será la siguiente historia. Sin pensarlo giré para ver a Moon. Él lloraba. Pero despacio, con los ojos rojos y las lágrimas en las mejillas.
Se hizo un silencio en los créditos y la gente lentamente se fue levantando, para irse. Con Moon nos quedamos hasta el final, mirando los nombres que bajaban con rapidez.
—¿Qué piensas? —rompí el silencio.
Moon se limpió las lágrimas con la mano y recién entonces me di cuenta que habíamos estado toda la película dándonos la mano. Sonreí un poco por eso, pero escondí la mano en mi bolsillo.
—No sé —respondió, con una risa que sonó como un llanto.
—Que maricon —murmuré divertido y me golpeó el hombro.
—¿Tú qué piensas?
Me encantó y quisiera poder llorar como tu, porque jamás algo me había emocionado tanto como esa película y la tonta e infantil idea de que quizás mi alma, o lo que sea que esté dentro mio, se conecta con otro y el destino va a lograr, siempre, que nos encontremos. Y quise en ese momento que la otra mitad de mi alma fuese la tuya y si no lo era pues me cagaría en el destino y dejaría sola a mi verdadera alma gemela para irme contigo. Siempre contigo.
—Estuvo bien —respondí, tras el monólogo que llegó a mi mente.
—A mi igual —las luces del pequeño cine se encendieron— ¿Cuál fue de las tres tu historia favorita?
Suspiré. Era difícil. La de los amigos me emocionó mucho, porque me recordó a Toto y a Moon al mismo tiempo y me generó en el estómago una sensación extraña. La de los amantes me pareció bonita y la del padre y la hija me frustró.
—A mi la de los amantes —contestó su propia pregunta, sonriendo.
—A mi la de los amigos.
—Estaban enamorados —añadió, levantándose.
—Para mi eran amigos.
—Los amigos no actúan así...
Nos miramos con incomodidad, como sabiendo que ese comentario significaba muchas más cosas y yo comencé a caminar fuera de la sala. Moon me siguió.
—Para mí sí. La película lo dice, las almas gemelas no son siempre románticas —dije, pasando por la puerta de salida de la sala.
—¿Pero qué hace que la romántica sea la otra y no la de ellos dos?
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El Loco se enamoró de la Luna (BORRADOR) / BL
Teen FictionEn un rincón olvidado de la ciudad, oculto entre los gritos y casas de ladrillo, nacieron dos chicos. Jake y Moon. Moon no tenía padres y se refugiaba en la responsabilidad de cuidar a su hermano menor y en las charlas nocturnas con su tío. Jake en...