Sé Que Te Amo { Miguel O'hara × Tú} [AU]

~° 33 °~

Era extraño

______ había notado extraño a Miguel, en los dias siguientes de su cita, igual que cuando tuvieron una pelea, pero la unica diferencia es que Miguel ahora se mostraba emocionado.

Cuando preguntaba, él solo contestaba "pronto lo sabrás" dudaba que fuera por su cumpleaños, porque aún no estaba cerca de la fecha. Y los cumpleaños de Gabi y él ya habian pasado. No estaba entiendo.

—Creo que te es infiel cariño— Arthur dijo, bebiendo de su café

—No, no lo creo, Miguel no es ese tipo de persona— contesto segura

—Mi amor, piénsalo, un hombre rico, atractivo, y de su posición, es obvio que atrae a cientos de mujeres e incluso hombres, así que yo que tu, empezaria a dudar de mi relación— y ella lo penso por un segundo

—¿En serio? ¿Después de haber sufrido una infidelidad seria capaz? — dijo burlona, retandolo

—A-ay cielo.... Pues.... —y no supo que contestar

—¿Ves? Si no sabes mejor no opines Arthur, Miguel me ha demostrado muchas veces que me ama, incondicionalmente y yo también a él— apreto la taza en sus manos.

—Sí... Tienes razón— trato de apaciguar su ira— Pero no esta demás dudar un poco, incluso dudaría de lo que hace cuando está contigo— se quedó dudando un poco.

Ella se sentía insegura, sabía que Miguel podría conseguirse a una mujer rápidamente en un parpadeo si así lo deseara, pero incluso cuando tuvo sus dudas, él mismo se aseguró de hacerle ver que no era capaz de hacer algo así

...

—Dame tu dedo— Miguel le señaló que extendiera su mano

—¿Para qué?— dudosa lo hizo, Miguel lo coloco en el lector de huella de su teléfono, ella estaba atónita

—Si un día, llegas a desconfiar de mí, o tienes dudas de tu servidor, y de su amor por ti, no dudes, en revisar mi teléfono, si eso no te deja tranquila, tienes acceso a mis cuentas de banco, puedes transferirte el dinero que quieras, dejarme en bancarrota si así lo deseas, prefiero matarme, y dejar a Gabi contigo a lastimarte así— ella no supo que decir

—N-no hace falta amor, confío en ti, también te amo mucho— lo rodeo por el cuello con sus brazos, y Miguel correspondió gustoso

—Aunque sea, acepta que dejaré tu huella de desbloqueo, espero que te haga sentir tranquila— y ella murió de amor

—Dios mi vida, me matas de ternura, si eso esta bien para ti, entonces esta bien— lleno su rostro de suaves, sutiles y pequeños besos

—Amo cuando haces eso— suspiro enamorado, realmente enamorado —¿Podemos ir a la cama para que me sigas haciendo así?— Dios amaba cuando se ponía de mimoso

—Claro que si mi amor—  era tanto amor, y tan hermosa su actitud de niño pequeño, que incluso lo llevó de la mano hasta su habitación.

...

Sonrío ante tal bello recuerdo del moreno, que sus mejillas se pusieron rosadas, Miguel siempre habia dido tan lindo con ella.

Cuando llego a casa se sorprendio cuando las luces de adentro estuvieran apagadas, normalmente Gabi y Miguel estarian en la sala jugando juntos, asi que se sorprendio. Estacionó su auto, y se dispuso a entrar a casa.