Un calvo Símbolo de la Paz.

Capitulo 17 - Prueba de Campo

Saitama se sintió como un niño en un parque de diversiones mientras navegaba por el aire entre los rascacielos. La capa, con su capacidad de generar ráfagas de movimiento, le daba una sensación de libertad que nunca había experimentado. Aunque sabía que podía ser más rápido y más ágil sin el traje, no podía negar lo emocionante que era la nueva experiencia.

Planeó entre los edificios con gracia, ajustándose rápidamente a la función de su capa. La brisa fresca acariciaba su rostro mientras se deslizaba por el aire, y una sonrisa se extendió por su rostro calvo. 

"Esto es genial", murmuró para sí mismo, disfrutando cada momento de su vuelo improvisado.

A medida que se movía por el paisaje urbano, comenzó a experimentar con las capacidades de su traje. Probó diferentes ángulos de vuelo, sintiendo cómo respondía el traje a sus movimientos.

"Seguramente soy mas duro que este traje y realmente no necesito volar... pero es divertido". Con esa simple verdad, continuó su vuelo, disfrutando de la sensación de libertad que solo podía encontrar en los cielos de la ciudad.

La voz artificial de su IA resonó en el auricular del traje de Saitama mientras continuaba su vuelo entre los edificios de la ciudad. "Señor Saitama, llegaremos en veinte segundos", anunció la IA.

"Gracias, seas quien seas", respondió Saitama, agradecido por la advertencia oportuna.

"Usted puede llamarme Sora", ofreció la IA. "Es un acrónimo, pero seguramente no le interesa saber qué significa".

Saitama reflexionó por un momento antes de responder con desinterés, no necesitaba ser educado con una maquina: "No, no me interesa".

A pesar de su falta de curiosidad por el significado detrás del nombre de la IA, Saitama apreciaba tener a Sora a su lado. La IA le proporcionaba información valiosa y alertas en tiempo real, lo que le permitía responder rápidamente a las emergencias y actuar de manera más efectiva como héroe.

Con Sora como su aliado digital, Saitama se sentía menos perdido en este extraño mundo tan innecesariamente centrado en los héroes.

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Dos atracadores salieron apresuradamente del banco, con la tensión palpable en el aire. "¡De prisa, mi Quirk solo mantendrá dormido a ese héroe por un minuto más!", gritó uno de ellos, visiblemente nervioso, señalando a un héroe con traje planeador y una cabeza de pájaro que yacía inconsciente en el suelo.

"Ugh.. al diablo ¡No dejaré que nos siga si se despierta!", exclamó el otro atracador, apuntando su mano, que tomo la forma un cañón hacia el héroe dormido. Con un gesto rápido, disparó el arma, pero el proyectil fue detenido en seco por la intervención inesperada de un hombre calvo que apareció de la nada.

Con su traje de héroe recién estrenado, se plantó frente al héroe inconsciente, protegiéndolo del ataque. Sus ojos reflejaban una calma serena mientras enfrentaba a los atracadores, quienes lo miraban con sorpresa y desconcierto.

Los atracadores intercambiaron miradas nerviosas antes de decidir su próximo movimiento. No tenían información de quien era el héroe calvo frente a ellos, pero el que disparo vio como Saitama sostenía el proyectil humeante en su mano sin el menor esfuerzo.

Bien, dejen lo que robaron y manos en la espalda".

Sin embargo, sus palabras cayeron en oídos sordos. El segundo atracador, ignorando la advertencia del héroe recién llegado, comenzó a dispararle con su brazo cañón.