Capítulo 7

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Michelle Pearson. (Narradora)

La verdad, Jack me llamó la atención desde el primer día y con lo que pasó aquella noche ahora aún más. Estoy empezando a pensar que Jack me gusta, es guapo, divertido, cariñoso y siempre ha sido atento conmigo. Además Jack es un gran artista. El problema es que tengo novio. ¿Acaso soy una infiel? Debo dejarlo en cuanto antes pero no se como es que vaya a reaccionar. Oliver es mi novio, vive en San José pero desde que me mudé a Chicago realmente no hemos tenido muy buena relación. Llevamos 6 meses juntos pero no siento lo mismo por él que antes, es por eso que tengo miedo de hacerle daño y perder su amistad.

Jack realmente es a quien yo quiero y he decidido terminar con Oliver. No podía seguir engañándolo ni a él ni a mi misma así que agarré el teléfono y le llamé. Una vez en la llamada, le dije que tenía que hablar con él pero en ese mismo instante noté como le cambiaba la voz. Parecía enfadado y nervioso pero eso no me impidió decirle la verdad. Le dije que había conocido a alguien, que ya no sentía nada por él y que esperaba que lo entendiera, él me preguntó si era por Jack. Me quedé atónita, ¿cómo sabía quién era Jack si él vive en San José? Oliver me confesó que se había venido a Chicago y que no ha parado de observarme, me dijo que era un mentiroso, un infiel y un egocéntrico de mierda y que si yo decidía quedarme con él me haría la vida imposible. Me quedé helada y le colgué.

No sabía qué era lo que había pasado, pero lo importante es que ya lo había dejado con Oliver. Aproveche el momento y quede con Jack en una heladería aunque no sabía si creer a Oliver por todo lo que había dicho sobre Jack Morgan.

—¿Qué helado prefieres? —preguntó Jack.

Me quedé mirando el catálogo de los helados hasta que pensé con claridad.

—Quiero este de aquí, amo los de vainilla. —respondí dulcemente.

Una vez Jack fue a pagar, yo me quedé sentada esperándolo. Justamente de la nada apareció Oliver. Me dijo que me amaba pero que al mismo tiempo me odiaba y que era una maldita zorra. Me enfurecí en ese momento y le dije que se acabó, que no quería saber más nada de él y que por favor se fuera de mi vista.

Jack me agarró del brazo, me dijo que no me soltaría, que me llevaría con él y que me haría sufrir. Intenté escapar pero me apretó con mucha fuerza que apenas podía moverme. Grité, pedí ayuda pero no había más nadie en el local. Estaba atrapada.

De repente vi a Jack, con los helados. Cuándo me vio, corrió hacia mi. Oliver le dijo que se metiera en sus asuntos, que yo era su novia pero Jack sin pensárselo dos veces le estampó los helados y le pegó un puñetazo en la cara tirándole al suelo. Jack me abrazó, me dijo que todo estaría bien y que no me preocupara, me había salvado.

De la nada, se levantó Oliver del suelo y sacó un cuchillo con intenciones de apuñalar a Jack. Sin darme cuenta, me interpuse y Oliver me apuñaló. Caí de rodillas hacia el suelo, la sangre no paraba de salir y Oliver salió huyendo de ahí. Mientras sufría Jack llamó a una ambulancia y me besó apasionadamente diciendo que todo saldría bien. En ese mismo instante fue cuando me di cuenta de que me había enamorado de verdad, lo que sentía en el pecho era algo nuevo y no estoy hablando de la puñalada, sino que de Jack. No creo en el amor pero pienso que él es la excusa perfecta para enamorarme.

Rápidamente me trasladaron al hospital, me quitaron el cuchillo y me cosieron. Estuve a pocos segundos de morir desangrada. Oliver estaba loco, es un maniático.

En el hospital, mientras estaba en recuperación vi como estaban mis familiares, mi hermano Noah, las chicas del fuego, había venido hasta Harry, el novio de Skye y eso que yo no me llevaba muy bien con él. Pero aún así me sentía algo rara, ¿tal vez era por la anestesia? Pero no veía a Nick en ninguna parte, en cierto caso yo lo busqué, veo normal que él ya no sea mi amigo. Realmente me pase con él y tal vez debería tratar de disculparme con él pero no puedo creerlo, él ni siquiera colabora viniendo a verme después de que me apuñalaran cuando yo si fui a animarle al partido. Vaya sinvergüenza.

Unos minutos después entró Jack a ver como estaba, o eso supuse. Parecía algo enfadado y confundido.

—¿Quién era ese hombre, piensas contármelo? —preguntó mientras trataba de mantener la calma.

Me quedé en blanco, estaba nerviosa pero pensé que tal vez me entendería y le intente contar todo lo sucedido.

—Es mi ex novio, vivía en San José y cuándo lo dejé por ti se enfureció tanto... Él está loco, estuvo observando durante días, sin decir nada.

Jack lo entendió a la perfección, me dijo que se asegurara de que lo lleven a la cárcel pero lo noté algo extraño. Era como si me estuviera ocultando algo y no lo pudiera decir. Todas esas frases que Oliver me dijo sobre Jack no paraban de llegarme a la cabeza, no podía convencerme de que eso era cierto. Una vez Jack se fue, entraron mis amigas, las chicas del fuego.

—Chica, cuéntanos absolutamente todo. —ordenó Skye. —Si Harry, ella está bien ahora ya puedes irte son cosas de chicas.

—Michelle, ¿qué tal estás? Nos tenías súper preocupadas Vaya susto mujer, ya puedes ir contándonos todo. —dijo Abby.

—Estoy bien chicas, gracias.

Les conté todo lo ocurrido, sin dejarme de nada, absolutamente todo. Aunque parezca que no, son mi gran apoyo estas dos mujeres. Desde que vine a Chicago, aparte de Jack ellas siempre estuvieron ahí y las apreció mucho.

UNA CONEXIÓN DE AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora