CAPITULO 24

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Poché.

No sabía cuánto tiempo había pasado, no sabía que día estábamos y tampoco me interesaba.

Lo último que recuerdo fue a ver despertado en la habitación de un hospital, oficiales preguntándome sobre el secuestro y el papá de Daniela gritando que su hija, había vaciado 2 millones de dólares de su cuenta.

Recuerdo quedarme callada luego del interrogatorio, no hablaba, ni comía, los médicos le decían a papá que solo era cuestión de tiempo para que yo hablara, según ellos yo habia entrado en un estado de shock.

Recuerdo que al día siguiente me dieron de alta, me llevaron a mi casa y lo que hice fue encerrarme en mi cuarto, no quería hablar con nadie y tampoco tenía hambre.

Recuerdo a ver pasado encerrada en mi habitación, todas mis cortinas estaban cerradas y solo entraba un pequeño rayo de luz.

La comida que venía a dejarme mi papá, estaba tirada sobre alguna parte, los regalos de mis amigos permanecían en el pequeño sillón, mientras yo solo me quedaba en mi cama, recordandola.

Recuerdo las visitas de Paula por las mañanas, se quedaba unos minutos en silenció y luego se iba porque tenía que ir a la universidad. Las vistas de mis jefas, pues yo había dejado de ir a trabajar. Las visitas de Mario dejándome flores todos los días. Los regalos que me mandaba la profesora Belén. El desayuno que constantemente me dejaba Valentina.

Todo en mi habitación estaba oscuro, yo solo permanecia sentada sobre mi cama. Tenía puesta la pijama desde que llegué a casa, no había dormido desde aquel día, su voz sonaba en mi cabeza día y noche.

-Te amo, poché- su voz.

No sabía que día era hoy, no sabía cuánto tiempo había pasado y tampoco sabía cómo iba el caso.

Lo único que sabía era que los oficiales habían encontrado mi celular en la camioneta, encontraron la arma que Dani uso para defendernos y no encontraron nada más. Era lo único que sabía del caso.

Había permanecido en una burbuja desde aquel día, burbuja la cual no quería salir.

Estaba sentada, con los brazos rodeando mis rodillas, mientras miraba hacia un punto fijo.

Escuché como la puerta de mi habitación se abría, pero no lo tome importancia, un rayo de luz atravesaba por mi ventana, escuche como sus paso se fueron acercando.

No alce la vista, simplemente me quedé callada, aquella persona se sentó al borde de la cama, no sabía si era Paula o tal vez Mario.

-Eres la novia de Daniela, verdad?- escuché que hablaba.

No sabía quién era, nunca había escuchado aquella voz, me límite a sentir con la cabeza.

-Me dijeron que dejaste de hablar- la escuché decir.

No sabía quién podría ser, pero no tenía ganas de ver a nadie, quería seguir en mi mundo.

-Te amo, poché- su voz.

Su voz me atormentaba, me sentía mal de solo pensar lo que estaría pasando mi Dani.

-Soy su mamá- dijo aquella voz.

Rápidamente me llamo la atención, entonces lo recordé:

-Dile a mamá que la amo, que siempre la espere y que la perdono por no venir a buscarme...

Ella pidió que le dijera eso a su mamá.

Por primera vez había dejado de escuchar su "Te amo, Poché" para escuchar algo distinto.

La cantante Daniela Calle Donde viven las historias. Descúbrelo ahora