reminiscence of dreamers [Completed]

3 | Ápice

Dan Reinsd

     Estaba delante de la directora de la Coalición, era extraño verla aquí en el hangar cuando generalmente permanece siempre en los pisos inferiores.

     —Zara —la llamé por su nombre.

     —¿Es ella? —preguntó, la mujer de cabello café.

     —Sí —le respondí— ¿Subío a la superficie solo para confirmar si era ella? ¿Un lugar tan peligroso como este?

     —Aquí estamos rodeados de soldados y artillería, ademas estas tu joven Dios —Zara no era de responder, una persona fría—. Queria verte directamente, necesito que vayas a revisión, solo será rutinario.

     Varios soldados acompañaban a Zara, no entendía el motivo por el cual debía ir a revisión, tampoco podía negarme.

Rose Reinsd

     Otro día más en el laboratorio, mi hermano habia cumplido con su misión, y me encontraba delante de la esperanza para nuestro mundo. La chica de cabello dorado en la cámara regenerativa comenzaba a abrir los ojos.

     —Por fin despiertas —le dije, con una expresión lo más amigable posible.

     —¿Dónde está Dan? —preguntó.

     —Mi hermano, está ocupado en algo, todavia no lo eh visto pero supongo que vendrá a verme en algún momento —Sonreí mientras la veía a ella levantarse y observar sus manos junto a todos los sofisticados equipos a su alrededor—. Tu daño ocular, se reparó por completo, ¿logras ver sin dificultad?

     —Si.

     —Me parece muy impresionante el sistema de almacenamiento temporal en tu cuerpo, nunca habia visto ningún tipo de tecnología como esa —le dije con curiosidad, me parecía fascinante.

     —Era el unico modo de sobrevivir al Frío Eterno.

     —Aquí no lo necesitas, quiero mostrarte algo.

     Frente a ella apareció una gran ventana digital flotando, mostraba una calida playa soleada; un hermoso mar azul que se unía en el horizonte con el cielo. Imagenes de bosques tropicales, grandes ciudades super desarrolladas en una simbiosis perfecta con la vida natural. La emoción en su rostro me hizo entender que nunca habia visto algo como esto. En realidad yo tampoco. Continué mostrándole fotos, medio planeta Tierra cubierto en lava, plasma cristalizado y lleno de crateres tras un enfrentamiento de desproporciones descomunales, el satelite lunar hecho gigantesco trosos, y los edificios desplomados en las decadentes ciudades.

     Su expresión cambió por completo.

     —Este mundo ha visto tantas de guerras desde que surgió la civilización, el último combate hace 17 años no será el más devastador, el siguiente si lo será, por eso te necesitamos a ti. Mi nombre es Rose Reinsd, un placer —dije, ella hizo un breve silencio, el cual rompió diciendo: