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Ayuda no me deja publicar nada

Giyuu llego junto a aquel perro llamado Inosuke, la mascota de Makio y como buen gato que era se subió al techo de la casa de su compañero, decidido a tomar el sol justo ahí. Cuando el can lo vio solo movió su cola de entusiasmo, saliendo de su casita y colocandose en sus dos patas traseras para poder estar más cerca del gato.

-Vamos Guyi pelea conmigo! - ladro mientras movía su cola de un lado al otro

-No quiero, dejame tomar el sol- lamio una de sus patas para luego pasarla sobre su cabeza

-No eres divertido bola de pelos- bufo con molestia, ya habían tenido en un enfrentamiento antes y termino con Inosuke atado a un árbol

-No es problema mio que siempre quieras pelear- alzo una de sus patas traseras para poder lamerla como parte de su baño diario

-Por qué siempre te lames? Masu no te baña bien?- acerco su nariz un poco más al gato para poder olfatearlo

-Primero, se llama Suma- coloco su pata sobre la nariz del can quien parecía contento -segundo, es para mantenerme limpio- dicho aquello se levantó y se alejo del perro para poder acicalarse

Su interacción era observada por Hinatsuru, quien estaba vigilando que Inosuke no decidiera qué Giyuu sería su comida. No era raro ver como el gato y el perro "charlaban" aunque no sabría decir si es eso ya que solo ve como el perro ladra y de vez en cuando Giyuu emite un maullido.

Aquello se había vuelto una rutina, si bien al principio Giyuu era temeroso como para acercarse a Inosuke, termino haciendolo ya que lo dejaron afuera una vez y aquel perrucho lo correteo por todo el patio pero termino amarrado al árbol mientras que Giyuu le hisheaba desde una rama.

Hace un tiempo empezaron a tomar sus medidas, si bien su gato crecería solo hasta los dos años, siempre lo hacían incluso si solo se trataba de un centímetro de diferencia. Giyuu se acostumbro, al igual que se acostumbro a que su dueña Suma decidiera ponerle moños o listones para combinar con ella, moños qué su amigo perruno le quitaba.

-Es increíble, le compraste aquella torre y ni si quiera la usa- Makio señaló la torre de gato de tres pisos y luego a Giyuu quien estaba dentro de la caja dormido-prefiere aquella caja que íbamos a tirar-

Suma solo rio y con esfuerzo, porque su gato ya pesaba, lo subió al segundo piso asegurandose de que siguiera dormido.

-La verdad, creo que sería mejor comprar cosas para Giyuu cuando crezca en su totalidad, dudo que quepa ahí- Hinatsuru señaló lo obvio, sabía que su compañera se emocionó por tener una mascota pero debían pensar en la comodidad del gato

-Si, pero, se ve tan adorable así-acaricio con algo de fuerza la panza de Giyuu quien despertó y al notar que no estaba en su caja se bajó de la torre y se retiro, dejando a las tres mujeres hablando.

En su caminata hacia la caja fue atrapado por un par de brazos, al alzar la vista vio a Tengen, aquel humano que lo salvó de la calle. Cuando se dio cuenta ya estaba recibiendo caricias y ronroneando, no es un gato que le guste mucho el contacto físico y solo lo acepta de sus dueños.

-Tranquilas chicas, Giyuu aun es pequeño no creo que crezca tan rápido- hablo mientras sentía como el minino se resbalaba de sus brazos -aunque eso sí, esta ganando peso- rio al ver la mirada indignada de su mascota y más cuando el felino decidió bajarse.
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Medio año paso, Giyuu era más grande ahora y más fuerte, solía dormirse en el sillón o sobre el techo de la casa de Inosuke.

-Por que eres más grande? -pregunto mientras lamia la cara de su amigo

-No hagas eso, me contaminas- se sacudio y lamio su pata para pasársela por la cara -No lo se, asi es mi raza-

-Tu siempre te lames, no veo el problema- ignoro la petición de su amigo y para molestarlo lo volvió a lamer

Makio quien los veía fue a levantar a Giyuu ya que el minino estaba apuntó de rasguñar a Inosuke.

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Estaba aburrido, definitivamente aburrido, ver el paisaje por la ventana del carro era aburrido, no entendía porque se tenían que mudar. Tal vez era porque ya era totalmente grande, pues ya tenía dos años.

Bostezo y se colocó sobre su dueña quien iba totalmente dormida, atrás de ellos estaba Inosuke acaparando los asientos pues no dejaba que el gato se fuera a la parte de atrás.

Hace tiempo que no ve los pájaros de Hinatsuru, quería molestarlos por un rato para no estar tan aburrido, al final termino durmiendose, quería llegar de una vez a su nueva casa.

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Cuando llegaron y abrieron la puerta del carro, Inosuke fue el primero en salir a correr y mear en una esquina, recibiendo un regaño por parte de Makio. Mientras que Giyuu solo fue cargado por su dueña, o bueno, medio cargado ya que la pobre suma ya no aguantaba el peso de su gato.

Fueron recibidos por una de sus vecinas, Mitsuri Kanroji, ya la había visto unas veces, la chica era buena pero le estresaba, para su mala suerte era amiga de Suma.

El,como el gato que era solo fue a la casa, echandose frente a una ventana para poder dormir, escucho los ladridos de su compañero pero los ignoro, optando por dormir.

Su sueño fue perturbado cuando una dos sombras aparecieron frente a él, cubriendole el sol. Cuando abrió los ojos solo vio a dos gatos, uno negro y otra siames, que intentaban entrar, arañando el cristal y maullando. El solo se fue a la parte baja, iría a donde Inosuke para que ahuyentara a los intrusos.

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Perro wattpad, anda de mamon

Momentos de giyuu y shipsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora