Una vida conmigo

Capítulo 3 cosas de adultos

La Nonna está en el jardín como todas las mañanas, Revel y yo camino a la escuela.

A Revel le va super bien, mientras que mis notas decaen cada vez más y más, solo tengo una amiga que lastimosamente la molestan por las manchas en su piel, un día no vino a la escuela y desde entonces no la he vuelto a ver, los compañeros de mi clase no me toman en cuenta y las niñas me molestan por ser rara, pero no sé a qué se refieren.

La profesora de este año escolar me tiene fichada y entre ceja y ceja, ya que una vez a mediados del año escolar le pedí permiso para ir al baño, no me dejó por más que prácticamente le rogué, realmente me sentía mal aquel día, acto seguido empecé a vomitar, todos guardaron silencio, sus miradas están sobre mí, la profesora me dijo que tenía que limpiar eso le pregunté con qué y su respuesta fue:

- Así sea con el abrigo del uniforme, pero debe de estar limpio cuando vuelva.

Salió con el teléfono en mano, empecé a limpiar con el abrigo llorando mucho, una compañera que se sienta atrás de mí me dijo que ella me ayudaría y así fue, salió a buscar un trapeador y un tacho y me ayudó, ella es la única que me ayudó y jamás olvidaré de ese hermoso gesto mi compañera Cristina, obviamente se hizo un escándalo porque mis padres fueron ese mismo día a reclamar y a la docente casi la dan de baja en la escuela y desde entonces me tiene fichada.

Estamos en las instancias finales de este año escolar, hoy entregan el examen que dimos ayer es el 25% de la nota final, la profesora de remplazo nombra uno a uno hasta que es mi turno me entrega la nota con una mirada triste que a mí me dice que mi nota es insuficiente, y así es 2/10 es obvio que reprobé este año escolar, a la hora de salida decido romper el examen y tirarlo a la basura por el enojo, busque a Revel para irnos juntos a casa.

En cuanto llegamos esta solo mi progenitor, ni nos miró paso de nosotros, está atendiendo sus negocios supongo, nos fuimos al patio a jugar con Jade, después de un par de horas nos hizo entrar en casa, nos comenta que la profesores correspondientes de cada uno les dijo de los exámenes.

Revel le entrego un 9.58/10 le dijo que puede mejorar si desea un futuro sin carencias, en cuanto sus ojos se posaron en mi guarde silencio, me dijo con su dulzura notablemente fingida tu examen Camila?, respondí con notable temor que lo había olvidado en la escuela, su mirada se llenó cada vez mas de enojo, seguí diciendo: pero de seguro estará mañana donde lo deje, el contesto: mañana sin falta solo asentí, pero sabiendo lo que hice con ese examen no sé cómo haré, dejaré eso para mí yo del futuro ahora solo quiero disfrutar lo que queda de este día.

La Nonna llego con mi progenitora y otros tíos, Revel y yo corrimos a abrazar a la Nonna mientras los tíos y mi progenitora se dirigen a la cocina con mucha comida, cenamos realmente delicioso una ribollita que es una sopa de verduras a la Toscana muy típico de Fucecchio.

Después de la cena mi progenitor con los tíos están en la habitación de los adultos, mientras nosotros estamos en la sala viendo una película, en cuanto note que Revel se había retirado y mi progenitora esta recostada en la puerta de la habitación de los adultos, me encamine asea allá, pero la Nonna me dijo que no fuera, pues aun así lo hice, en cuanto estuve junto a mi progenitora me fije que Revel esta con ellos viendo algo en la televisión, en cuanto entre mi progenitor echo el grito al cielo.

- ¡CAMILA SAL DE LA HABITACION AHORA!

Mientras me grita vi en la tele a una mujer totalmente desnuda, metiéndose objetos de formas alargadas y redondas por cavidades intimas y haciendo ruidos raros de vocales.

- ¡CAMILA QUE FUE! ¡SALES O TE SACO!

- ¿Pero porque Revel puede estar aquí con los tíos viendo la tele y yo no? Cuanta osadía la mía, pero la curiosidad me gana

- ¡ESTO ES COSA DE HOMBRES!

- Boris déjala estar

- ¡LEILA TE VOLVISTE LOCA, SACALA AHORA!

Mi progenitora nos sacó a Revel y a mí, nos llevó a nuestra habitación, la Nonna está lista para descansar y ayudo a alistarnos, por más que pregunto qué están viendo mis tíos con mi progenitor, no me responden y cuando mi progenitora contesta a la variedad de mis preguntas con: cosas de adultos, le contesto: Revel solo tiene 5 años no es adulto, me dijo que no más preguntas, que es suficiente de mi osadía y que es hora de dormir.

Pues en la mañana antes de ir a la escuela le pregunté a Revel y me dijo que es lo mismo de lo que vi anoche una y otra vez solo que diferentes mujeres, la Nonna nos escuchó de que hablamos y nos dijo que ni una palabra más sobre eso nunca más, que eso es cosa del demonio y que nuestro Dios odia esas cosas pecaminosas, pues la Nona es muy católica nos lo hizo prometer y lo hicimos.

En la escuela nada cambia, en receso siempre sola en los asientos del patio, la verdad ya me acostumbré, aunque a veces la profesora suplente me mira con pena, y en cuanto lo noto me retiro de su rango visual.

Al llegar la Nonna nos recibe muy cálidamente y nos comunica que nos alistemos que nos vamos a la iglesia a confesar, escuchar la misa y después paseíto al parque, Revel y yo saltamos de alegría en cuanto escuchamos parque, entonces con mucha prisa nos alistamos.

En la iglesia siempre me aburro, excepto cuando cantamos eso si me gusta, al salir de la Iglesia almorzamos en un restaurante de comida rápida y de postre helado napolitano uno de los más pedidos en esta zona, en cuanto estamos en el parque la Nona se puso a leer la biblia en un asiento para echarnos un ojo por cualquier cosa, Revel y yo jugamos a que estamos en el espacio sideral como lo llama el, después de un par de horas volvimos a casa deshechos, cansados del ajetreo del juego y del minie viaje en autobús.

En casa mi progenitora llora, Revel la abraza su sollozo para de repente, parece que apenas nota nuestra llegada, me siento muy preocupada en el comedor, no parece ver rastro de mi progenitor, le pregunto qué sucede y me dice cosas de adultos, muy enojada me voy a la habitación y pienso, cosas de adultos siempre dicen eso cuando no quieren contestar, que no podemos saber, nunca me explican nada.

Me quedé dormida, me desperté de un buen rato, pero no salí de la cama quiero quedarme aquí porque fuera siento que molesto a mis progenitores, cuando escucho que me llama mi progenitor.

- Camila ven, necesito hacerte unas preguntas.

- Mande

- ¿Dónde está el examen que te entregaron ayer?

- Es que....

- ¿Qué pasa Camila? Lo dice con su dulzura fingida, pero noto claramente algo de enojo en su tono, asi que guarde silencio.

- ¡CAMILA! ¿Dónde está el examen? Veo como su mandíbula se tensa cada vez más y mi temor crese.

- Es que ya no estaba donde lo deje. Dije temerosa.

- COMOOOOO! Dime la verdad o habrá consecuencias.

Creo que sabe que miento, debo pensar rápido, pero al no escuchar respuesta de mi parte actúa, todo pasa tan rápido solo siento que mi rostro se gira a la derecha, apenas puedo asimilar lo sucedido, veo de reojo su puño flotante, un escozor debajo de mi ojo izquierdo, un chirrido dentro de mi cabeza suena y es molesto, pero sobre todo la palpitación sobre las cienes, la Nona se acerca con velocidad, me toma de los hombros y me pregunta si estoy bien, niego.

Mi progenitor toma mi barbilla bruscamente para que lo mire, creo que me esta examinado, pero no lo sé con claridad, solo escucho que dice: no iras unos días a la escuela, además crees que no me enteraría de la mentira de los vecinos, lo tienes más que merecido niña estúpida, me soltó con brusquedad y se fue a la cocina.

La Nonna no me soltó ni un momento desde que se acercó y nos dirigimos a la habitación, me da medicamento y hielo para el ojo.