Capitulo 8

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Tailer

Tengo muchos malos recuerdos  varios de ellos se manifiestan en cuestión de pensamientos y no me dejan de atormentar incluso en sueños, el que me extraño fue por un hecho de una joven. Momento que me regresaban a la preparatoria lugar donde abunda la oscuridad come humanos, me encontraba en una de las feas bancas del lugar en la escuela había tres sombras.

A medida que el sueño transcurria la identidad de las sombras se iba revelando, una de ellas era Ruby una chica que llegue a conocer en situaciónes muy pesadas, ella tenía el cabello de color azabache y una tonalidad carmín en la punta del flequillo ropa muy casual para estar en la escuela.

— Turuturu — murmuros, susuros que asechan por todos lados.

De otro lado había una rubia de trenzas qué sonreía malévola ente, una zona de su cabello estaba pintada de unas tonalidades celestes sin contar que llevaba una blusa muy escotada.

Había otra chica también aunque de ella no recuerdo su apariencia ni jamás se disipó de las sombras dejando solo la figura en el marco de esta, recuerdo que estábamos hablando un tema casual aunque esto no sabía si estaba del todo bien. En medio de la plática a Ruby se le ocurre hacer un comentario muy particular.

—Tu, no puedes mentirme, se que sientes algo por mi — su tono era suave, sereno y sobre todo dulce.

La sensación que dejo en mi era agridulce ya que eso me dejo extrañado le dije que no era cierto que ni siquiera la topaba en ese sentido.

Fue entonces que las otras dos chicas dijeron que lo comprobara a manera de broma como si me estuvieran tomando de burla lo que dije, eso me molesto un poco pero no pude decirlo ya que la azabache se levantó para irse, no la vía puesto que estaba detrás mi.

Inesperadamente ella va a abrazarme del cuello recostando su cabeza sobre la mia, derrepente sentí como las mejillas me ardían de manera inconsciente lo que hizo que ellas se estuvieran carcajeando burlaronamente. 

Lo siguiente que hice se si fue por dolor o por vergüenza pero me solté de su abrazo levantándome para pegarle en la barbilla, huí del lugar rápidamente y lo último ue escuché al irme eran sus burlas.

— ¿Crees saber lo que realmente es sufrir? — pregunto una voz

— I still griece my wife and son — dijo un hombre.

— I'm not so cold as to mook your pain — comenta el otro apretando un puño

— I wise choice — dice serio apretando una cadena.

Fue cuando desperte al ver el techo de mi cuarto, adolorido de la espalda me levante para mirar el lugar algo extrañado, ya que no sabia el por que me dolia la espalda mirando el lugar me dispuse a hacer la rutina diaria.

— Aburrido.

Ya que el sol se alzaba perezosamente en el horizonte igual que yo, este estaba pintando el cielo con tonos cálidos y promesas de un día lleno de posibilidades para que truinfe. Para mi, era solo otro día en la universidad, pero cada uno traía consigo la emoción de lo desconocido por que ahora he descubierto el secreto.

Ya que desperté con el sonido insistente de mi alarma, rompiendo la paz de la mañana con su ritmo monótono, decidi que como soy una persona que se respeta lo rompi a el. Con un suspiro, me estiré y salí de la cama, preparándome para enfrentar el día que se extendía ante mí.

Después de una ducha rápida y un desayuno apresurado, regaños de Black de por que demonios me quede jugando con Willy hasta las 2:00am.

— Correle Tai — me regaño Black.

Te amo, pero esto esta mal.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora