22. My love

505 167 63
                                    

Emma siempre es la última en acostarse, porque es la que menos sueño tiene

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Emma siempre es la última en acostarse, porque es la que menos sueño tiene. Carlos y yo siempre nos turnamos para mecerla un poco antes de dormir. Pero mi hija parlotea mientras lo hacemos y hay veces que su padre acaba poniéndole música en su móvil, acostándose con ella en la cama hasta que por fin consigue dormirla.

Aunque esta noche no es así y ambas están plácidamente dormidas en su cuna. 

-Están reventadas. Cuando empiecen a andar, va a ser una locura -los brazos de mi marido rodean mi cintura mientras ambos miramos como duermen. Tranquilas. Calmadas y con una expresión feliz en su rostro.

-Charlie ya ha llevado a Emma de la mano caminando un buen rato y según me ha dicho, tiene la espalda destrozada porque solo quería estar en el suelo.

-¿Tienes hambre?

-Un poco. Aunque me apetece un vaso de caldo -recibo un beso de Carlos en la frente, separándose de mi a continuación.

-Anda, vamos, nos lo bebemos en la cocina.

Dejo que él entrelace sus dedos con los míos para salir del dormitorio, no sin antes llevar en mis manos el vigilabebés. Se me hace raro que la casa esté en silencio después de todo el trajín que hemos tenido hoy. Les ofrecí a Diana y a Thalía quedarse aquí, pero, mañana vuelven a sus quehaceres y los cinco se marcharon a Maranello en el avión privado de Charlie.

Al llegar a la cocina, suspiro aliviada la ver que está todo recogido. Los encargados del catering han sido muy eficientes y excepto lo del jardín que vendrán mañana a buscarlo, el resto ya está recogido. Me apoyo en la encimera dejando que una sonrisa escape de mi boca al ver las cintas de colores con el nombre de mis hijas. Emocionada. Y también afrontando con más ánimo el futuro que nos espera con ellas, pues, jamás pensé que llegarían estos días.

Puedo sentir la presencia de Carlos tras de mi, como su pelvis presiona mi culo y sus manos, directamente, toman mis pechos, los cuales amasa y aprieta elevando mi excitación. Su boca busca mi cuello para dejar un sugerente beso, uno que desata en mi todo un torbellino de placer.

-Estabas jodidamente preciosa con ese vestido, solo me daban ganas de arrancártelo y follarte. Eres la madre más sexy que he visto en mi vida.

Sus rudas palabras provocan un gemido acrecentado por como sus dedos toman mis pezones. Sus manos se cuelan por el escote de mi camiseta sin encontrarse oposición ni de ropa ni de mi.

-Carlos -su nombre sale de mis labios con desesperación al sentir como presiona su miembro contra mis nalgas. Duro y deseoso de mi- bésame.

Él abandona uno de mis pechos para tomar mi barbilla y girarla de forma descuidada. Abro mi boca recibiendo su codiciosa lengua, tomando todo de ella. Sus labios me besan de una forma rotunda y desesperada a la que solo puedo dejarme llevar. El calor se apodera de mi cuerpo mientras su demandante boca empuja contra la mía una y otra vez. Enloquezco cuando el roce de nuestras lenguas, desatan un infierno en todo mi maldito cuerpo.

4Lust (Runner 4)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora