Pov Londer
Hasta que llegamos a nuestro hogar, a nuestro mundo, me lleno de calma al ver lo que tanto trabajo y esfuerzo defendimos, ya está siendo reconstruido. Aún quedan dragónes acechando poblados y diversas ciudades, estos conforman pequeños grupos para intentar contraatacar. Los reinos e imperios formaron un ejército que se hacen llamar 'Escamas Blancas', su labor es cazar y matar dragón que disponga una amenaza para los seres de este mundo.
Nada más llegar a las costas de Pelsalles se nos fue recibido con los mejores tratos que había visto en mi vida, otro banquete en nuestro honor, en el cual asistieron las princesas y damas más hermosas que he visto jamás, al parecer todo está volviendo a ser lo que era antes. Tras estar unos días en la ciudad de Ajobiar fuimos llevados a la capital del imperio elfo, la ciudad de Roften donde fuimos recompensados por nuestra gloriosa victoria sobre el rey dragón. A Sergot no le gustan estos festejos, no quiere estar en estos lugares, yo tampoco quiero estar aquí, a decir verdad; nadie quiere. Miliga ha hablado con Sergot, le ha pedido que de por favor que deje que ella se encargue de todo, que sea ella la que de las reuniones y las asambleas de declaraciones. Al parecer ha visto que Sergot no está en conducciones para tal cosas, el elfo solo quiere descansar y volver a Kol Pol...
Pov Narrador.
-¿Segura que podrás tu sola con todo esto Miliga?- le pregunta Sergot a su amiga mientras preparaba todas sus pertenencias, ya que al día siguiente se dirijía rumbo a Kol Pol.
Miliga camina hacia donde estaba sentado este, pone sus manos sobre las de él agachandose, lo mira con consuelo.
-Tranquilo, Sergot, yo me ocupo. Ve y descansa, despeja esa mente tan sobrecargada de pensamientos- responde su dulce y leal amiga tras darle un beso en la frente.
Miliga no soporta ver a su elfo en ese estado, cómo todo lo había consumido en muy poco tiempo y nadie se había dado cuenta, nadie excepto Adat, la cual ya no estaba para él. Miliga deja que Sergot continúe recogiendo sus pertenencias, sentándose apartada de este, observándolo, viendo como le temblaba las manos y sus ojos se encontraban perdidos en una espesa niebla de soledad.
Miliga abre las ventanas de la habitación, dejando pasar el abundante fresco que tenía el aposento por su gran altura.
Justo al otro lado de esas paredes estaba Eduar acompañado de Cirigan y Dan, estos tres se mantenían haciendo sus cosas en silencio individualmente, Eduar le duele ver como sus amigos se habían distanciado tanto. El equipo Rainbow, o lo que quedaba de este, no tenía ni la más mínima idea de lo que harían ahora, no tenían rumbo, su maestro estaba perdiendo la cabeza y el mundo los empezaba a tratar como sin ya no les hiciesen falta.
-¿Y ahora que todo va a ser así?- le pregunta Eduar a sus compañeros, parandose este de la cama en la que estaba acostado.
Dan y Cirigan lo ignoran siguiendo con sus cosas, Dan leyendo y Cirigan puliendo su armadura.
-No me ignoren, hágame caso, ¿qué vamos a ser ahora? ¿Qué haremos ahora que cobramos nuestra fortuna?- les pide Eduar a sus dos amigos que les dijesen algo.
Cirigan mira a Dan y luego a Eduar, para de pulir su armadura y se sienta en dirección al joven.
-Eduar, ¿qué quieres que te diga?- le pregutna Cirigan a su amigo.
-Quiero que me digan que vamos a hacer, Cir- le responde Eduar mirando confundido a los dos.
-Ya todo terminó Eduar, es hora- contenta Cirigan haciendole difícil explicarle a su amigo que ya era la hora de separarse.
-¿Hora de qué? ¿A qué te refieres, Cirigan? ¿Acaso ya nos vamos a separar, ya no va a ver más equipo Rainbow?- le dise Eduar agitandose.
-Ya no hay equipo, Eduar- habla Dan de la nada.-. Ya no hay más equipo, yo tengo la mitad de mi cuerpo paralizado, Cristal no podrá volver a luchar, Cirigan ya está cansado, y tú, tú eres el único que aún tiene energías, queremos descansar Eduar, queremos estar en paz- le dice Dan mientras este sostiene el collar que los representa como Rainbow.
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Sangre De Un Dragón
FantasyEl cielo está a punto de ser cubierto de bestias, las cuales no osan a tener un destino fijo, se desmoronan los grandes imperios, los suelos se agrietan y los mares se ponen turbios. Está al construirse un frente de batalla, en el cual reinará la mu...