Desesperada perdición (Tsukishima x ti)

17. lo siento

(Misako Higurashi)

No pude dormir en casi toda la noche pensando en lo que había pasado, tampoco me acerque a alguna respuesta que me dejara tranquila y cuando por fin estaba por dormir todos se estaban levantando así que me tuve que resignar a dormir.

Me levanté bien temprano y después de organizar donde había dormido me dirigí a las duchas, eran como las cinco y media de la mañana aproximadamente.

Mientras el agua recorría mi cuerpo los recuerdos de la noche anterior invadieron mi mente.

¿Que era lo que iba a decirme?

Me cambie ahí mismo en las duchas y me dirigí a la cafetería para desayunar, cuando llegue la mayoría ya estaba comiendo al parecer me había demorado bañando así que me formé para hacer fila detrás de Shoyo.

Para ser sincera no tenía hambre, pero sabía que debía comer así que en una porción pequeña saque un poco de lo que iba a comer. Mientras terminaba de escoger lo que comería vi como Noya molestaba a Tsukishima que estaba comiendo poco al igual que yo lo haría, se me hizo un poco extraño por qué cuando lo había visto comer había casi siempre porciones un poco grandes para mi gusto.

Me dirigí a la mesa donde estaba Sugawara, Tanaka y el dúo de raritos, al sentarme sentí como Sugawara me miraba fijamente y sabía que era por lo poco que iba a comer.

—¿Vas a comer tan poco?— pregunto Hinata con inocencia

—Si, no tengo mucha hambre— le respondí sin mirarlo.

Para mí una de las cosas que más me costaba hacer era comer con personas alrededor que no sabían nada de mis problemas alimenticios y ocultarlo era complicado, comí tal vez demasiado lento, por qué los que estaban en mi mesa terminaron rápido, Sugawara me iba a esperar pero yo le dije que se adelantará y luego Yamaguchi llegó y se sentó a mi lado.

—¿Estás bien?— pregunto mientras me miraba fijo

—¿Ah?, si, yo ya me llené, creo que no comeré más— con eso me levante y deje la bandeja que aún tenía un poco de comida, lo que más odiaba de que no tuviera tanto apetito era eso, que no podía comer toda mi comida.

Yamaguchi sin decir nada me espero y ambos fuimos a entrenar pese a que su amigo seguía comiendo, por lo que intuía habían peleado, no quise preguntar al respecto y ambos comenzamos a calentar para jugar contra uno de los equipos que ya estaba entrenando.

Y el entrenamiento fue bastante agotador, unas horas más tarde las managers de los distintos equipos nos invitaron a comer sandía y bueno, ¿quien le dice no a la sandía?, me senté junto a mi hermano mientras disfrutaba la fruta, un rato después Kuroo se acercó saludando a todos, yo le di un abrazo y nos sentamos nuevamente el a mi lado derecho.

Lo que menos esperaba era que el tema de conversación fuera el poste con patas, no me molestó pero solo me dediqué a quedarme callada mientras terminaba de comerme el trozo de sandía y escuchaba atentamente, no estaba muy interesante la conversación hasta que Tanaka dijo algo que captó toda mi atención.

—¿Hermano de Tsukishima?— dijo mi hermano confundido yo estaba igual de sorprendida

—Tal vez sea otra persona con el mismo apellido— dijo Tanaka restándole importancia

—¿Pasa algo?— me preguntó Kuroo al ver que estaba un poco sorprendida por lo que dijo Tanaka

—No es nada— no pudimos seguir con la conversación porque Sugawara nos llamó para seguir con el entrenamiento.

Ni por más motivada que estuviera logré salvar los suficientes balones como para ganar los sets, habíamos corrido la colina varias veces y estaba agotada.