COLD HEART FOR LOVE - KIMCHAYWOLF

𝐕𝐞𝐫𝐝𝐚𝐝𝐞𝐬 𝐝𝐨𝐥𝐨𝐫𝐨𝐬𝐚𝐬.

Capitulo 47. 

𝐕𝐞𝐫𝐝𝐚𝐝𝐞𝐬 𝐝𝐨𝐥𝐨𝐫𝐨𝐬𝐚𝐬.

Kim se sentó al lado de la cama donde descansaba su hermoso flor de loto, estaba un poco pálido, el médico había recetado unos calmantes por vía venosa, pronto volvería la enfermera para retirarlos, cuando la bolsa se haya acabado, por lo pronto, Chay tenía que estar en la cama reposando. Había tenido un colapso nervioso en el ascensor, justo cuando Kim llegó... al menos logró hacer algo rápido y no paso por eso solo.

– ¿Como te sientes ahora, Cherry? – le preguntó tomando su mano sana, la que no tenía un catéter.

– Bien, pero... me siento avergonzado, no debería darte más problemas – susurró

– ¿Problemas? Tu no me has dado problemas – aseguró alzando su mano para proporcionarle un suave beso en el dorso – ¿Te sientes bien para hablar sobre lo que sucedió?

Chay asintió – Kan sabe algo que nosotros no, no se que será pero tiene que ver con Wolfi, a demás, dijo que tu padre lo sabía... supongo que tarde o temprano querrá aprovecharse de eso –

– ¿Por qué Kan nos ayudaría? Es igual de hijo de puta que mi padre – dijo Kim

– Quiere dinero, quizá va a marcharse – comentó Chay – Sea lo que sea, quiere todo lo que hay en la caja fuerte de tu apartamento, no se como sabe que tienes una.

– Seguramente Korn le comentó o Dmitry – dijo Kim y suspiró – No tengo mas remedio que darle lo que quiere.

El más joven lo miró ceñudo – Pero... ¿Si acaso piensas que es real lo que dirá?

– Kan es un idiota pero no es un tonto, él siempre ha jugado su propio juego... si él sabe algo, cualquier cosa que yo no, quiero saberlo también – puntualizó Kim –

Porchay suspiró – Tienes razón

– ¿Donde te citó?

– En mi trabajo – respondió Chay – ¿Crees que hay que decirle a Wolfi?

– Si, pero no ahora – Kim lo miró fijamente – Se que no debemos guardarnos nada pero esto es sobre él, primero tengo que saber en que está involucrado.

Porchay hizo un puchero – No estarás pensando nada malo de nuestro lobito ¿verdad?

– Claro que no, confió en él ciegamente – determinó Kim – Así como también confió en ti.

– ¿Incluso después de lo que pasó?

Kim se inclinó hacia él para darle un suave beso en los labios – Lo que pasó ya está olvidado y perdonado. – Dijo – Se que tu nunca me harías daño.

Chay se alegró de que Kim lo viera claro.

– No quiero que le pase nada a Wolfi

– Nada va a pasarle, lo prometo – le sonrió – Ahora tienes que descansar ¿ok? Venice vendrá y te cuidará mientras yo no estoy, tengo que hablar con mis abogados y con mis hermanos, la conversación que tuviste con Kan que sea solo para ti y para mi ¿de acuerdo?

– Si, por supuesto –

El pelinegro asintió y volvió a besarlo – Si sucede algo, no importa lo que sea, llámame –

– Lo haré, bebé –

Después de eso y aunque usando toda su fuerza de voluntad, Kim tuvo que salir del apartamento. No quería dejar solo a Chay pero realmente tenía cosas importantes que hacer para mantenerlo a salvo.