𝐂𝐮𝐞𝐫𝐝𝐚 𝐟𝐥𝐨𝐣𝐚.

141 19 29
                                    


Capitulo 33

</3

𝐂𝐮𝐞𝐫𝐝𝐚 𝐟𝐥𝐨𝐣𝐚.

– No pienso quedarme aquí por mucho tiempo, Joe – dijo Wolfgang rígido en el asiento.

Chay estaba a su lado, había parado de llorar pero las replicas del horrible momento que pasó todavía seguían angustiándolo, sentía que en cualquier momento se derrumbaría de nuevo y lo único bonito que tenía en ese momento era que Wolfi se había quedado, aunque sea para darle el beneficio de la duda. Tampoco juzgaba a Kim, sabía que estaba muy, muy herido... pero es que todo lo que le dijo...

– Nunca pensé que me sentía en la misma mesa que tu – admitió Joe con las manos rodeando su taza de té – Es... imprevisto, realmente.

Wolfgang la miraba con frialdad – Estoy aquí por Chay, porque se que él no mentiría con algo así – dijo de forma desdeñosa – Habla, por favor.

– Lo que dijo Porchay es cierto, en todo momento. Cuando lo secuestré, decidí que sería un buen... ¿Espia? Bueno, esa no es la palabra porque nunca me dijo nada comprometedor, la verdad es que me sentía más cerca de Kim teniendo a este chico de aliado – dijo y sonrió suavemente – Es un muchacho demasiado noble, si mi hijo no puede entenderlo creo que el que terminará perdiendo será él.

Wolfgang arrugó el ceño – No tienes que decirme algo que ya sé, vuelvo y te repito, se que él no nos miente, pero tu puedes mentirle a él de todos modos –

– Pero no lo hago, no miento en absolutamente nada. He sido una mujer trasparente – dijo con calma – Mira, se que soy culpable de muchas cosas, la mayoría de decisiones en mi vida han sido tomadas a raíz de la venganza y el sufrimiento que me causo un hombre, exactamente Korn... se que será complicado para ti escuchar esto pero si, tu padre y Korn mantuvieron una polémica relación, en nuestro tiempo no era... "normal" ver a dos personas del mismo sexo estar juntas como pareja y ellos lo eran a escondidas de todos, incluso de mi... Korn me utilizó para tapar lo que realmente era, una persona homosexual, enamorado de su mejor amigo.

Wolfgang tenía la cara sería... sin ninguna expresión, como si quisiera leer las de Joe que tampoco estaban salpicadas de mentiras, de hecho, nunca dejó de mirarlo a los ojos mientras hablaba.

– Tenía diecisiete cuando me comprometieron con Korn, a los dieciocho me caso y tuve mi primer hijo a los diecinueve, a Khun y... – ella sonrió – Lo amé tanto, cuando vi sus manitas fue... como si el mundo cobrara sentido porfin, la maternidad hizo que me enamorara de la idea del amor, así que comencé a querer más a Korn, como esposo... y pronto, mi relación con él dejó de ser por conveniencia pero... no sabía que mientras estaba conmigo pensaba en alguien más, yo ya conocía a Dmitry, nunca fue muy amable conmigo y ahora entiendo la razón de todo, me odiaba porque en las noches Korn dormía conmigo, me hacía el amor y yo tenía a sus hijos... – Joe secó una lágrima traicionera – Es horrible contar esto... pero es lo que hay... cuando tuve a Kinn, Korn ya no iba a la casa en las noches, me dejaba sola con mis dos bebés y yo estaba tan enamorada y dependía de él absolutamente en todo... me daba miedo reclamarme o dejarlo...

Chay se había encogido en su propia silla, ahora con nuevas lágrimas por ver a Joe llorar... estaba tan sensible, y era tan injusto que Kim no estuviera allí escuchando a su madre, las cosas cambiarían si así fuera... aunque sea un poquito.

– El seguía regresando y yo seguía cayendo, y la ultima vez que lo hicimos quedé embarazada de Kim... no puedo negarlo, tenía mucho miedo, la ayuda económica de Korn estaba desapareciendo poco a poco y mi familia me había dado completamente la espalda porque no había podido darles el dinero que se supone que ganaría por mi matrimonio a conveniencia con Korn, fue el embarazo más difícil porque él no estuvo conmigo, Kimhan nació en la habitación, con sus hermanitos ayudándome... con agua y mantas térmicas, yo misma corte el cordón umbilical... Fue hermoso, pero también muy triste, imagínate a una mujer joven, en una cama con dos niños ayudándote a dar a luz, y tu marido... ni siquiera sabía cuando iba a nacer el bebé.

COLD HEART FOR LOVE - KIMCHAYWOLFDonde viven las historias. Descúbrelo ahora