Capítulo 11: Piel con Piel

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ADVERTENCIA

ESTE CAPITULO TIENE UN POCO DE CONTENIDO PARA MAYORES DE EDAD, SI TÚ NO ERES MAYOR DE EDAD Y AUN ASÍ QUIERES SEGUIR LEYENDO NO ME HAGO RESPONSABLE YA QUE ADVERTIDA ESTAS. PECADORA JAJAJA, TQM.




Inconscientemente se mordió el labio inferior, mientras observaba a Doflamingo sentarse en la arena. En definitiva era un hombre guapo. Recordó lo que sintió cuando aquellos labios la besaron y se dio cuenta de que lo que iba a hacer no resultaría desagradable.

Sus ojos le recorrieron los hombros y la espalda. Bajo su delgada camisa, era fácil adivinar las líneas de su cuerpo. Notando los músculos de sus brazos, supuso que haría pesas para mantenerse en forma. Su mirada descendió hasta las piernas. Mientras recordaba lo que sintió cuando aquellos músculos se presionaron contra los suyos, la invadió una tibieza y sintió un nudo en el estómago.

Siguió las líneas de su cuerpo hasta llegar a su rostro y descubrió que él la miraba.

—¿Por qué tengo la extraña sensación de que me estás midiendo como si fuera un caballo de carreras al cual estás pensando apostar los ahorros de toda tu vida? — preguntó Doflamingo.

________ se esforzó a sonreír antes de responder:

—Estoy segura de que no es la primera vez que te mira una mujer.

—Tienes razón —admitió—, pero siempre supe lo que querían.

________ volvió la mirada hacia el océano y se esforzó para hablar con tono desinteresado.

—Yo no soy tan diferente a ellas.

—Es un cambio de actitud de ciento ochenta grados, si tomamos en cuenta tu postura de anoche.

—Siempre he pensado que los hombres esperan que las mujeres cambien de opinión —replicó sin dejar de mirar al océano; el sol empezaba ya a desaparecer. El tiempo se le escapaba. Tardarían una hora en volver al pueblo y ella tendría que darse una ducha y cambiarse de ropa antes de reunirse con Sabo. Pasándose una mano por el cabello, preguntó—: ¿Alguna vez has nadado desnudo?

La mirada de él se oscureció, al mirar el perfil de la chica.

—Un par de veces.

—Ha sido un día muy caluroso —dijo al mismo tiempo que, con agilidad, se levantaba. De pie, le dio la cara y se quitó la camiseta antes de perder la valentía que sentía en ese momento. La dejó caer en la arena y se volvió para desabrocharse el sujetador. Sus dedos temblorosos hicieron que tardara más tiempo del normal.

—¿Quieres que te ayude? —ofreció él, poniéndose de pie.

Ella no quería decir que no, pero tampoco quería que él se pusiera detrás de ella. Forzó una sonrisa y por fin, pudo desabrocharse el sujetador.

—Gracias, ya está —murmuró en voz baja y con una actitud que deseaba que fuera seductora; dejó caer el sujetador sobre la camiseta, en la arena.

________ notó que el cuerpo de Doflamingo se tensaba, mientras miraba sus pechos llenos. «No lo estropees ahora», se advirtió a sí misma, y agarrándole de la camisa, le preguntó:

—¿Quieres venir conmigo?

—En eso estaba pensando —respondió él con voz ronca. Se quedó inmóvil mientras ella le quitaba la camisa.

Sus pechos rozaron seductoramente el poderoso tórax de Doflamingo. Dejó caer la camisa sobre su propia ropa y lo miró a los ojos.

La oscura intensidad de aquellos ojos hizo que sintiera las rodillas repentinamente débiles. Él la abrazó y sus manos empezaron a acariciar el cuerpo de ________.

—Me sorprendes, ________ —murmuró él acariciándole los pechos antes de inclinar la cabeza y besar los endurecidos pezones.

—Pensé que estabas acostumbrado a que las mujeres se sientan atraídas por ti —logró decir, a pesar de la intensa sensación de placer que se apoderó de ella.

Los labios de Doflamingo capturaron los suyos. Mientras permitía que su cuerpo se confundiera con el de él, sintió su musculoso cuerpo sobre su piel desnuda y el deseo se apoderó de ella. Muy pronto, el resto de las ropas de los dos estaba sobre la arena.

Él sabía cómo tocar a una mujer, y por primera vez, la chica experimentó la sensación de desear desesperadamente a un hombre.

Pero cuando él la echó con suavidad sobre la arena, sintió pánico. Tratando de ignorarlo, cerró los ojos y se dijo a sí misma que era Ace quien estaba con ella.

Doflamingo sonrió al verla así, abrió sus piernas y pudo ver lo húmeda que ya estaba _________.

Doflamingo se acercó y comenzó a besar el cuello y se puso encima de ella totalmente, __________ pudo sentir su peso y se éxito más, ese hombre era muy alto y no quería ni ver lo que estaba a punto de entrar en ella.

Se mordió el labio inferior y contuvo un grito de dolor cuando él la poseyó. Después de una mirada inicial de sorpresa, él continuó haciéndole el amor, aumentando el deseo de la chica y llevándola, experimentadamente, hacia los niveles más altos de la excitación y del placer, niveles que ella nunca antes había alcanzado.

__________ se cubrió la boca.

—no lo hagas, quiero escucharte

__________ siguió sus órdenes por algún motivo, Doflamingo la beso nuevamente.

— no, no lo hagas tan profundo... —dijo _________ un poco adolorida

Solo pudo ver una sonrisa en el rostro de este. __________ sabía que este hombre de más de 2 metros tenía un gran miembro y al parecer Doflamingo estaba siendo empático con ella, no estaba introduciendo todavía todo.

Ambos se besaron y Doflamingo pudo entrar por completo en __________, alcanzo aquellos rincones que nadie podía alcanzar, ella lo beso con pasión mientras le acariciaba la espalda.

_________ recordó todo lo que Sabo le habia dicho y lágrimas cayeron un poco, ella noto que Doflamingo se detuvo y ella comenzó a moverse aun con dolor. Doflamingo después se movió con delicadeza sin hacerle daño y después de que ________ llegara al orgasmo. Doflamingo pudo terminar igual.

Después, ella se quedó boca arriba, mirando aparecer las primeras estrellas mientras el sonido del océano llenaba sus oídos. Podía percibir que él la estaba observando y se puso tensa. Por fin, sentándose, ________ alcanzó su ropa.

Con un solo movimiento Doflamingo se puso de pie, la cogió por los brazos y la forzó a levantarse. Manteniéndola sujeta frente a él:

—Quiero saber qué es lo que sucede

La rabia que había en su rostro, la puso nerviosa. Sin embargo, logró mantener una actitud fría.

—Tuvimos un breve encuentro.

Él la zarandeó; su mirada estaba llegando ya a los límites del control.

—¡No juegues conmigo! Eras virgen.

Ella trató de zafarse.

—Esperaba que no lo notaras.

—Pero estuviste casada —su voz era ronca e inquisitiva.

Lo miró en silencio, con frialdad, y volvió a intentar soltarse. Los dedos de Doflamingo se hundieron más en sus brazos.

—¡Quiero una explicación!






Espero que les guste y no olviden VOTAR y SEGURIME lo quiero. 💖💖🤞🏻🦩

Al Mejor Postor - Donquixote Doflamingo X READER 💗🦩🍋Donde viven las historias. Descúbrelo ahora