Capítulo 23: Tentación

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ADVERTENCIA

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Se encontró con que sus labios y los de ella estaban llenos de deseo; deslizó sus manos desde los anchos hombros hasta la nuca de Doflamingo, acariciándolo, al mismo tiempo que su cuerpo se fundía con el de él.

—Toda la noche me he estado preguntando si llevabas la ropa interior nueva bajo el vestido de seda —murmuró él, mientras le besaba una oreja.

A pesar de que Doflamingo había intentado hacerle el amor de una forma más juguetona, ella nunca había aceptado. ________ deseaba mantener sus sentimientos hacia su marido bajo control, sin mostrar intensidad alguna. Pero en ese momento tuvo que admitir que no podía impedir que creciera, y el deseo de probarle que podía ser tan sensual y excitante como cualquiera de las mujeres que había conocido, se apoderó de ella.

—¿Por qué estás tan seguro de que uso ropa interior? —le preguntó ________ con voz ronca.

—Es un pensamiento que hace que la imaginación de un hombre se vuelva fuego —le respondió, mientras sus manos exploraban las curvas del cuerpo femenino, buscando una evidencia que le dijera si usaba o no ropa interior.

—Me haces cosquillas —rió ella mientras se movía seductoramente contra él. La excitación que sintió ante su obvia erección era diferente a cualquier otra cosa experimentada con anterioridad.

—Las cosquillas eran lo último en lo que yo pensaba —aseguró Doflamingo mientras le mordisqueaba el cuello y ella sentía que se le erizaba la piel.

Habiendo olvidado cualquier pretensión de mantenerse alejada, ________ se sorprendió al saber cuánto lo deseaba. Le quitó la chaqueta, le deshizo el nudo de la corbata y la arrojó a un lado. Le desabrochó el último botón de la camisa y lo besó en el cuello. El sabor de Doflamingo era intoxicante. Con lentitud, la chica, sin dejar de besar su piel, subió hasta encontrar su boca. Doflamingo aceptó sus labios y el beso se hizo más profundo, al mismo tiempo que ________ temblaba de deseo besaba y daba besos en todo el cuerpo de ese hombre. Rompiendo el contacto con besos breves, Doflamingo la separó de él.

—Creo que ya es hora de que yo sepa qué llevas debajo de ese vestido.

Para aquel primer encuentro con las amistades de Doflamingo, ________ había elegido un vestido muy conservador, con botones desde el cuello hasta el borde de la falda. Él le quitó el collar de perlas antes de empezar a desabrocharle el vestido.

—Podría estar desabrochándolo toda la noche —murmuró Doflamingo mientras desabrochaba el primero.

Mientras lo observaba con una sonrisa, ________ sentía las emociones violentas que él le provocaba. Empezó a mover las manos hasta la cintura de Doflamingo y después bajaron hasta sus caderas.

—No toda la noche, espero —suspiró ella con voz ronca.

Una chispa de alegría iluminó los ojos oscuros.

—No toda la noche —estuvo de acuerdo con un tono aprobatorio, cuando llegó al noveno botón y el mínimo sostén empezó a aparecer—. Así que llevas puesta una de esas prendas provocativas de París.

—No quería que te sintieras decepcionado si la cena resultaba aburrida — bromeó ella, esforzándose en mantener la voz a un nivel adecuado, mientras que el calor de las manos de Doflamingo hacía que sintiera fuego en el cuerpo. Ella ya lo había deseado con anterioridad, pero nunca con tal intensidad.

Al Mejor Postor - Donquixote Doflamingo X READER 💗🦩🍋Donde viven las historias. Descúbrelo ahora