Insistencia | Minayeon G!P

17

Un mes

Su cabeza dolía, y su estómago no dejaba de contraerse en cierto tiempo, al menos se había detenido pasado los 10 minutos porque pudo controlarlo, pero no sabía cuánto tardaría.

Salió del baño, siendo recibida por Sana y su compañera de dormitorio, Dahyun. Lo cual hizo sonreír de medio lado a Mina ante los recuerdos que ambas crearon.

Ambas eran completamente insaciables estando juntas.

-Sharon... Sabes que podemos hacerlo por ti -Mina vió sus intenciones y la detuvo antes de que tocase su entrepierna.

-Lo sé muy bien, Sana, pero no me hagas recordarlo o tendrás que resolverlo.

Le guiñó el ojo antes de retirarse, tocando las mejillas de ambas y se fue rápidamente aún sabiendo que la encontraría por la fragancia que desprendía.

Le fue complicado por no dejar de saludar coquetamente a sus amantes, pero pudo salir de la universidad tiempo después, guiandose por su olfato.

La vió salir con una amiga, pero ahora caminaba sola entretenida en su celular y a Mina no dejaban de interrumpirla, ahora el humano que no dejaba de decir que eran amigos.

-Mi-na, ¿Adonde vamos?

-Tu, a cogerte a Chaewon, para eso te pago.

-Ya me aburrí, dame otra.

Mina siguió caminando bajo el parloteo de Jeno, quien no dejaba de seguirle el paso aún cuando era ignorado.

Caminaron diez minutos más y Mina alcanzó su objetivo que se había detenido en la estación de tren, estando de pie ahora escuchando música.

-Esa, dios mío, no sabes cuántas fantasías he tenido... uff -jadeó con deseo, haciendo que Mina volteaste aterradoramente lento sobre su hombro donde se encontraba el chico; él ambas manos separadas como si estuviese agarrando algo y moviendo sus caderas como si estuviese embistiendo-, su culo impactando contra mi pelvis, su coño mojadito y lleno de lo que mis bolas...

-Cierra la maldita boca, mortal. -impuso fríamente, haciendo lo posible por no torcerle el cuello al asqueroso animal que decía ser un humano.- No me interesa saber tus patéticas fantasías, imbécil. Y jamás vuelvas a llenar de tu mierda a Im Nayeon.

Pasmado por la situación en la que se encontraba, frunció el ceño. ¿Le estaba tomando el pelo?.

Se formó una expresión de incredulidad y extendió una sonrisa torcida para cubrir rápidamente la incredulidad que sentía.

-Estas mintiendo.

-Vuelve a decirlo entonces -Mina se giró, acercándose amenazante a Jeno que notó que era muy en serio, así que sus manos se alzaron.

-Oye, oye... Está bien. Mierda, das miedo con esa mirada.

Mina retomó su camino y ya tenía la atención de Nayeon sobre ella, mirada desinteresada e indiferente.

-Bunny...

-La perfección no me gusta y tu arrogancia tampoco. -escupió con asco queriendo alejarse de Mina, sin embargo, se hizo una mala idea si pensó que la dejaría irse.

Aquel agarre de su mano sobre su brazo, a pesar de tener el jersey cubriendo su piel, azotó una sensación interesante en el cuerpo de Mina.

También deseaba tocar esa suave piel otra vez.

Pasaron segundos que Nayeon intentó por segunda vez soltarse, siendo inútil aún cuando Mina recibió una mirada hostil.

-Suéltame, porquería -expresó de la misma manera, dejando a Mina con el ceño fruncido cuando esa palabra le recordó a los insultos que le hacían a la anterior dueña y de alguna u otra forma que lo escuchara de ella, le afectaba.